pov fercha:
Marianita no había vuelto a visitarme, yo no había vuelto al hospital, no quería seguir llorando, no volví a leer el diario en esos días, andrea se acercaba mucho a mi últimamente y ahora que ya la conocía más, podía decir que no tenía más de 24 años, era muy simpática, me hacía reír todo el tiempo, en clase dejo de preguntarme porqué estaba tan perdida, luego llego el dia de volver al hospital y encontraría una sorpresa que me terminaria de romper por completo.
-fercha no esperaba verte aquí-dijo baby y se veía de muy buen ánimo
-me tomé unos días antes de volver a ver a marianita dormida-dije un poco triste
-pues..mejor ven sígueme-respondió baby llevándome hacia el cuarto de marianita
-¿todo está bie..-no pude terminar la frase al ver a mariana despierta
Me sentí tan feliz, estaba tan contenta porque por fin la vería a diario despierta, la volvería a ver a mi lado, pero no siempre la felicidad es duradera
-baby, ¿cuándo nos iremos a casa?, ¿trajiste una amiga?,¿quien es?-dijo y con una frase volver un momento feliz en una pesadilla
-Marianita soy yo, fercha-dije casi empezando a llorar
-pues no te conozco pero mucho gusto ¿fercha?-dijo con una sonrisa hermosa
-bueno, gracias por traerme baby, me tengo que ir-respondí, aguantando las lágrimas
Salí corriendo del hospital y me fui al parque de la otra vez, ya no quería ir a mi cabaña porque todo allí me recordaba a Mariana, no queria leer el diario porque tambien me recordaba a mariana, maldita memoria, me quito a mariana y no me quiere hacer dejar de pensar cada recuerdo a su lado, no me importaba nada solo quería distraerme, llame a andrea y le dije que la necesitaba, ese fue el peor error de mi vida y lo notaría muy tarde.
-hola fer, ¿quieres tomar un café?-me saludo andrea desde su auto
-si claro y perdón por haberte llamado pero la verdad necesito distraerme -respondí subiendo al asiento de copiloto
-¿a dónde quieres ir?-pregunto
-a cualquier lugar-respondí y me dispuse a ver por la ventana.
-entonces iremos a mi casa-dijo arrancando el auto
-si claro andrea no hay problema-dije inocentemente
Llegamos a su casa y nos sentamos en el sofá a conversar, esta mujer si que sabia como sacarme los problemas de encima, pero marianita seguía en mi mente, pasamos un par de momentos agradables y luego paso todo.
-me gustas mucho fernanda y se que soy tu profesora pero no puedo evitarlo-dijo para después besarme
Lo peor de todo es que me deje besar, pude detenerla, pero me deje llevar por el dolor, después pasamos a quitarnos la ropa pero en ese momento marianita vino a mi mente, quería pero no era ella, mi primera vez no podía ser con nadie que no fuera el amor de mi vida y ese puesto lo tenía reservado mariana desde hace mucho.
-no puedo andrea, lo siento-dije apartando sus labios de mi cuello
-¿porque? ¿hice algo malo, te lastime?-respondió asustada
-no lo haces muy bien a decir verdad y yo quiero pero no contigo y no por despecho, lo siento-dije parandome a alcanzar mi camisa
Me puse mi camisa y salí de la casa de andrea, lo malo viene ahora, me fui a casa sintiéndome mal por haber besado otros labios y lo peor, solo por dolor, la vida te va enseñando poco a poco que cada error cuesta y el mio fue haber estado con andrea en su casa, sabiendo lo que significa en la mayoría de casos, me sentia sucia.
Llegue a casa y me encerré en el baño a llorar, llore por mariana, porque le fui infiel aunque ella no recordara que eramos algo, no sabia que mas hacer quería lidiar con el dolor de ya no tenerla a mi lado y en ese momento no sabía lo que venía.
A la mañana siguiente regresé a la udem y todos me miraban y hablaban de mí, me sentia muy incomoda y luego supe porque hablaban, en la entrada del auditorio, alguien había pegado fotos mias saliendo de casa de andrea y decían, "sin su noviecita, busca la compañía de la profe", tambien estaba Daniela, la chica que mas me odiaba en la udem, repartiendo las mismas fotos a todos los que pasaban por allí.
-¿que carajos haces Daniela?-le dije tirando todas las fotos al suelo, grave error
-mostrándole a todos lo zorra que puedes llegar a ser, ¿enserio pensaste que nadie se daría cuenta de que fuiste a buscar a andrea, porque fuiste tan insignificante para tu noviecita que ni siquiera te recuerda?-respondió desafiante
-callate y no hables mas de mariana-dije con la sangre hirviendo y lágrimas queriendo salir.
-Enserio crees que me callaré porque tu me lo digas, nadie puede pararme y menos alguien como tu-dijo soltando una risa sarcástica
-¿que pasa aquí? porque mencionan mi nombre y porque hay tantos panfletos de fernanda saliendo de una casa-dijo mariana llegando a la escena con un signo de interrogación en la cara
-No pasa nada mariana, solo le mostraba a todos que mereces a alguien mejor que ella-respondió Daniela señalandome
-alguien como quien, si ella y yo nunca hemos sido nada, ademas creo que la preferiría mil veces a ella, antes de estar con alguien como tu o como cualquiera de estos idiotas que se ríen de los demás-dijo mariana-asi que mejor ya dejala en paz, porque el hecho de que sea mejor que tu en todo e incluso más bonita, no significa que le tengas que armar la guerra.
-me las pagaras fernanda-me susurro al oído Daniela
Después de la escena montada por Daniela, mariana me cogió del brazo, me llevó hacia la salida de la udem y aunque se me partio el corazon muchisimo mas, al escuchar de su voz que nunca fuimos nada me alegro un poco que me protegiera, en esa disputa supe que Daniela me odiaba por que yo tenía lo que ella tanto anhelaba, a mariana.
-esa chica si que te odia jajaja, ¿que le hiciste?-dijo cuando estamos llegando al árbol donde siempre me sentaba a llorar
-jaja la verdad ni yo lo se, pero sé que está muy enamorada de ti-respondí-ven sentémonos aca
-¿para qué? ¿quieres hacer un picnic improvisado con una recién conocida o que?-pregunto empezando a reír
-si digamos que me caiste bien, recién conocida y quiero conocerte-respondió extendiendo la mano-soy fernanda garcia y pues no se que mas decir asi que mejor preguntame-
-yo soy mariana hinojosa, me gusta que me digan la mística y pues mucho gusto supongo-dijo estrechándome la mano
En ese momento sentí un corrientazo y ella se quedó quieta un rato, pasamos la tarde entre retos, preguntas y risas, era como volver a lo que éramos antes, con la diferencia de que la estaba conociendo de nuevo, después de mucho tiempo se me ocurrió una idea para pasar una noche fantástica.
-oye-le dije
-dime-respondió hipnotizada por el color del cielo azul
-¿quieres venir conmigo a una cabaña en el mar?-pregunté tímidamente
-¿en el mar???-respondió emocionada
-si claro, el resto lo verás cuando lleguemos-dije parandome y sacudiendome la tierra
-entonces no perdamos el tiempo y vamos-dijo saltando rápidamente
nota de autora:
Creo que este es el capítulo más largo que he hecho hasta ahora, espero que lo disfruten porque yo disfrute mucho escribiendolo, gracias por leerlo y aunque en el anterior capítulo dije que nos acercabamos al final, todavía falta un poco de tiempo, adios nos vemos en la siguiente actualización.
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llegaste tu
Randomperdida en un mar de confusiones me hago la misma pregunta de por qué ser normal no es parte de mi y por que a veces no lo disfruto yo soy mariana y esta es la historia de como mi cobardía me salvo de la perdición y de nunca encontrarla a ella que...