¡Ríndete, Harper! [COMPLETA][#PGP2021]

«15»

«Harper Evans»

Estuve en silencio mientras Tyler me guiaba a lo largo del camino hacia el hotel, pero no tenía las más mínimas ganas de encerrarme en la cabaña que compartía solo con Arian. Él no estaría ahí y por ese simple hecho me encontraría deprimiendo por lo que había visto unos segundos atrás.

Todo el día me la había pasado pensando en qué le diría, cómo se lo diría y las miles de respuestas que él podría darme... Pero jamás pensé que no llegaría a decírselo, yo quería ser valiente y aceptar lo que sentía frente a él, diciéndole que no estaba segura de muchas cosas al respecto pero esperaba que me ayudara con eso.

No imaginé que mi valentía se iba a ir al caño por que estaba con Molly, la abrazaba de un modo tan amistoso aun después de la escena que habían montado en la piscina. Era evidente que se habían reconciliado y quizás estaban siendo tan íntimos por que ahora se gustaban entre ellos, quizás se amaban, quizás Alexander le contó la verdad sobre nuestra relación, quizás...

—Deja de pensar en él —susurró Tyler al tiempo que estábamos en la entrada del Hotel. Me entraron unas terribles ganas de llorar y no tenía idea de por qué, él me sostuvo entre sus brazos y me abrazó. Su perfume impregnó mis fosas nasales, a decir verdad olía de maravilla.

—¿Crees que estén juntos? —le pregunté y lo sentí respirar hondo.

—Harper, él es tu novio. Si está con esa chica será por imbécil. Nadie completamente cuerdo te reemplazaría —sus palabras me hicieron recordar que Alexander y yo no éramos nada.

Sentí una opresión en el pecho.

Tyler seguramente pensaba que estaba siendo engañada cuando en realidad yo estaba siendo una dramática, él tenía derecho a estar con quien quisiera por que aunque frente a todos era mi novio, realmente era un hombre libre que podía disfrutar de Molly a sus anchas si así se le antojaba. 

—No quiero que esté con ella —confesé con la voz átona, en un intento de sonar fuerte.

Apenas había aceptado que él me gustaba y en ese preciso momento estaba a nada de llorar sin explicación alguna. Por estúpida.

—Deja de pensar en ellos —acarició mi cabello—, si le interesa luego vendrá a buscarte. Sino, sabrás lo que le importa su relación.

—Gracias Tyler —solté con sinceridad.

—¿Quieres comer una hamburguesa? Yo invito —me tomó de los hombros deshaciendo el abrazo, sonriente. Solo podía pensar en que Alexander no aprobaría ir a comer algo como eso.

—Las hamburguesas engordan —bromeé.

—Tu eres tan dulce que con solo verte engordo —sonreí ante su mal piropo. Ahí estaba el Tyler que conocía. Rodé los ojos con diversión.

—¿De nuevo con lo mismo? ¿No te cansas?

—Mis ganas de ti no se gastan, se acumulan —hizo un baile con sus cejas acercando su rostro al mío. Reí apartándolo de un leve manotazo.

—¿Sabes qué? Mejor me voy, no creo poder soportar tus malos chistes esta noche —amenacé y, para darle dramatismo al asunto di media vuelta, esperando que cediera.

—¡Bien, me callo! Si vas conmigo a comer no diré una palabra más al respecto por el resto de la noche —giré hacia él que tenía la mano izquierda en el corazón y la derecha mostrando los tres dedos de en medio en forma de promesa. Alcé una ceja.

—Las buenas promesas se hacen por la garrita —le mostré mi meñique y ahora él sonrió deshaciendo su postura y tomando mi dedo con el suyo.