El novio de Donghae tiene un pene chico; él no quiere acabar con su relación por ello, pero tampoco puede tener sexo y eso le está volviendo loco. Comienza a ir a un psicólogo; Hyukjae, con su pene grueso y grande, sabe cómo tratarlo.
🍑•DongHae; Bo...
DongHae observó, sorprendido, al castaño entrar en la habitación y cerrar la puerta, golpeándola con fuerza contra el marco. El moreno decidió retroceder en la cama, su papi lucía realmente furioso, la espalda de DongHae chocó contra el respaldo de ésta, él se encontraba sentado, llevando solo unas pequeñas bragas rojas de encaje, que se apretaban a su pelvis.
—Ya te había dicho que no me gusta compartir lo que es mío. —El tono de voz de HyukJae era más bajo y su voz era fuerte, en ella se podía distinguir su enojo, pero DongHae no entendía por qué se había enojado.
DongHae ladeó un poco la cabeza luego de asentir como respuesta a lo que había dicho su papi, a la vez que intentaba recordar en que momento había hecho algo que no debía, mientras que el castaño se acercaba a la cama y se sentaba en la esquina de ésta. DongHae llevó su mirada hacía el otro, ya que sus movimientos le habían llamado la atención, y pudo observar como éste se estaba desvistiendo, quitó su camisa por encima de su cabeza y luego su pantalón, levantando las piernas de la cama mientras lo hacía.
—Recuéstate sobre la cama boca arriba y abre las piernas. —Ordenó HyukJae y DongHae inmediatamente hizo lo que se le pidió luego de responderle con un "si, papi".
El castaño terminó de quitarse el pantalón y se aproximó al de cabello azabache, posicionándose entre sus piernas, éste estaba acostado sobre la cama con las piernas abiertas, como HyukJae se lo había ordenado, y una erección que deformaba un poco el tanga que llevaba puesto, su pene tiraba de la tela hacía arriba. HyukJae al ver esto mordió su labio inferior y comenzó a acariciar los muslos de DongHae, con una de sus manos acarició superficialmente el glande del pene de DongHae, quien soltó un leve gemido a causa de esto.
—Ponte en cuatro, bebé. —HyukJae volvió a hablar con su tono imperativo.
—Sí, papi.
DongHae se dio vuelta sobre si mismo, acomodándose como se lo había ordenado el castaño de forma rápida y torpe. Cuando DongHae ya estuvo sobre sus codos y rodillas, HyukJae se acercó a él por detrás y le pegó fuerte en una de las mejillas del culo.
— ¡Papi! —Murmuró el azabache en un gemido, no muy comprensible.
HyukJae sonrió al escucharlo y sintió como la sangre de su cuerpo se dirigía hacía su pene, logrando que se endurezca aún más. Volvió a pegarle en la misma mejilla y vio como ésta se comenzaba a enrojecer, él amaba la piel morena de DongHae, ya que ésta se marcaba fácilmente por cualquier cosa que él hiciera con sus manos en él.
En la habitación lo único que se escuchaba eran los gemidos, jadeos y respiraciones agitadas de DongHae y el sonido que provocaba la palma de HyukJae sobre las mejillas del culo del otro chico, las dos mejillas del moreno estaban rojas, por lo que el castaño decidió que era momento de dejar las nalgadas de lado por un momento, así que bajo su bóxer, liberando su erección y haciendo que ésta roce ligeramente contra el trasero de DongHae. Éste al sentir aquello giró su cabeza y mordió su labio inferior al ver el hermoso miembro que tenía el castaño, él notó eso y soltó una fuerte carcajada.
—Cabeza al frente, DongHae.
Este obedeció perezosamente y con un leve puchero en sus labios, él quería ver la polla de su daddy. —Sí, papi.
HyukJae sonrió al oír aquello, la palabra papi lo ponía de sobremanera.
Con ambas manos tomó las mejillas del trasero de DongHae, separándolas, y sin previo aviso lo penetró profundamente. El moreno ante aquello soltó un fuerte gemido y se fue hacia delante, apoyando todo su rostro sobre la almohada. HyukJae gimió ligeramente, comenzando a embestirlo fuerte y profundamente. Entre medio de las embestidas el castaño le pegaba en las mejillas del culo de forma dura con la palma de su mano.
...
— ¡Podrías dejar de llamarme papi y de gemir como idiota! —Heechul gritó, alterado, y DongHae se sobresaltó tanto que casi cayó de su silla.
Las mejillas de DongHae se tornaron rojas, igual a las de su culo en su imaginación, al reaccionar de lo que había hecho, ellos estaban en la cafetería en la que se juntaban semanalmente esperando a su amiga Hani, y él había estado gimiendo en voz alta y llamando a su mejor amigo papi, pensado en su psicólogo, todos los empleados del lugar lo conocían, y eso quería decir que acababa de pasar la vergüenza de su vida.
Él necesitaba urgentemente dejar de fantasear con su psicólogo y también, buscar un nuevo lugar para reunirse con sus amigos.
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