• COBARDÍA •
AXEL
—Hola mamá ¿Que onda? —Ella alza la ceja y me mirá.
—No hay onda...¿Que hacías en mi habitación?—Mierda, mierda...
—No estaba en tu habitación solo estaba cerrando la puerta...Estaba abierta y buenos a ti no te gustan las puertas abiertas —Explico con nerviosismo y ella asiente lentamente.
—¿Que ocurrió en la comisaría?—Pregunta y la cara de Astrid me llega a la mente.
—Bueno yo...no era culpable y me soltaron y al otro sospechoso también.—Explico.
—¿Sabías que era muy cercano a los Davenport?—Asiento y ella ladea la cabeza —Eso fue venganza, tal vez alguien de pueblo que quería desquitarse las con ellos —Entonces las palabras de Dash llegan a mi mente:
—No es mi culpa que ella sea carnada para cazadores.
—Má, ¿aquí en Forks hay cazadores?—Ella me mira incrédula.
—¿Que clase de pregunta es esa Axel? Osea estamos en montañas, claro que hay cazadores —Yo asiento y ella rueda los ojos —¿Por qué la pregunta?
—No lo sé yo... Descansa mamá voy a dormir —Ella me da un beso en la frente y me dirijo a mi habitación, no estaba de ánimo para nada, tenía demasiadas cosas en qué pensar.
****
ANÓNIMO
Miró mi reflejo en el agua y maldigo una y otra vez, la ira que sentía en mi interior era inmensa.
—Maldito cobarde —Mascullo por lo bajo.
—Señor se encuentra bien —Le doy un golpe en la cara y este se queja —Ya veo que no...Tiene que ver con el cobarde de Jason.
—Si, más vale lo hubiera asesinado yo y no ella, ahora ellos tienen ventaja, quién sabe que les habrá dicho.
Mi problema es que mi plan iba de maravilla hasta que todo se fue por la borda, mi presa aún está en cautiverio y no la encuentro, el cobarde de Jason está muerto y probablemente los Davenport tienen una ventaja, Jason...Te encontraré y no dejaré que descanses en paz y en cuanto a mi plan sigue en pié, pero solo por una cosa...
Tengo que tumbar a un peón y así equilibrar la balanza...
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Nota de la autora: Ash y ahora, ¿se esperaban que Jason trabajará con el ANÓNIMO?
Decidí hacer una doble actualización así que váyanse al siguiente...
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A L A S K A ©
FantasyCorre Alaska... Corre... Nada, no habían imágenes, era como si fuera un recuerdo pero sin imágenes ¿Quién era Alaska? No podía ser yo, mi nombre era Astrid, hubo un tiempo donde me asustaba dormir, desde niña tenía esa voz metida en mi cabeza, y no...
