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Blair. Pasaron tres días, tres malditos días desde que todo sucedió. Tampoco sé nada de Jaden, Anthony me evita, hace como si no existiera y eso me está matando.
Ahora estoy encerrada en mi cuarto, no pienso salir nunca más, maldita sea todo me recuerda Jaden y Anthony. ¿Por qué?¿Por qué la vida es tan cruel?
Luego de estar tanto tiempo hundida en mis pensamientos, mi padre entra sin tocar.
—Hola.
—Hola, papá.
—Alguien vino a verte..—inmediatamente me enderece en la cama con la ilusión que sea Jaden o Anthony.
Lo sé vivimos en a misma casa con Anthony pero él desde lo que sucedió vive en la casa de su novia evitandome.
—¿Anthony?¿Jaden?—murmure con la ilusión de que alguno de los dos pasará por esa puerta. Mi padre nego, rompiendo todas mis ilusiones haciéndose a un lado mostrando a ¿La señora Hossler?
—Blair, quería hablar contigo, cariño—sonrió acercándose a mi cama tomando asiento al mismo tiempo que mi padre abandonaba la habitación dejándonos solas.
—Siendo honesta no hay nada que hablar, destrocé la amistad de mi hermano y su hijo— susurré bajando la mirada, odiaba haberle causado tanto daño a mis dos personas favoritas en esta tierra.
—Blair, fui mejor amiga de tú madre por más de veinte años y si crees que no peleabamos de vez en cuando...—murmuro tomando mi mano dándole un pequeño apretón.— estás equivocada, cielo.
—¿Estás hablando enserio?
—No recuerdo bien las causas de nuestras peleas, pero siempre nos arreglamos—sonrió mirándome.— conozco a Jaden y Anthony, ellos volverán a ser mejores amigos, son como hermanos.
—Pero tal vez es diferente está vez, jamás los ví discutir de esa forma, casi terminan a los golpes...—un nudo en mi garganta se hizo presente, sabía que ellos estaban tan mal y odiaba la situación.
—Blair, estamos hablando de Jaden y Anthony, ellos son inseparables desde que tienen uso de memoria, no se dará por vencido—asentí convencida, solo había que ayudarlos a arreglarse.
—Gracias, tienes razón—sonreí abrazándola, ella era como mi segunda mamá luego de la muerte de mi madre, ella estuvo ahí para cuidarme siempre.
