Te Enseñaré A Tenerme Miedo

28. ~ Schadenfreude, Skay ~

Maratón 2/3

Estoy a punto de llegar a la fiesta más sofisticada de mundo. Elliot Scott asistirá a este evento, si es que ya no está allí. En fin, el plan no es lo suficientemente elaborado (Que digo, si parece planeado por un niño de cinco años), pero al menos es aceptable.

El papel de Skay es el de novio tóxico.

El de Dylan, es más como reemplazo de Elliot.

Alexandre se hará cargo de "Calmar" a mi novio tóxico.

Y yo... Debo hacer el trabajo sucio, engatusar a Elliot y matarlo.

Ninguno de ellos puede hacer eso porque Scott no confiaría en sus intenciones, de lejos se les nota la mala vibra... En especial a Alexandre, su mirada de "Puedo descubrir tus más oscuros secretos" no es de mucha ayuda.

Aún no sé si en serio mataré a ese hombre, no sé siquiera quién es, sí tiene familia, sí ha matado personas o no, ¿Y si alguna persona depende de él?

- Mario Sallow, novio de Cassandra Mary e hijo de un magnate. – Afirma Skay con el fin de que nosotros sigamos.

- Cassandra Mary, hija de un mafioso y novia de Mario Sallow. – Murmuro lo suficientemente alto como para que me escuchen.

- Jeremy Woods, amigo de Mario y segundo al mando en una organización de narcotráfico. – Escucho a Dylan.

- Adrián Woods, mejor amigo de Mario y hermano de Jeremy. – Todos sacamos nuestras identificaciones falsas y nos preparamos para salir.

- ¿Están seguros de esto? – Cuestiona Alexandre. Dylan y yo le lanzamos una mirada agradecida y Skay resopla.

- Ya les dije que no se trata de algo que podamos escoger.

- Claro que sí, podemos escapar y volver a Filadelfia...

- ¿Para ir a la cárcel? – Me corta.

- Skay, ésta vez estoy de acuerdo con Cooper... - Secunda Alexandre.

- ¿Qué tengo que hacer para que lo entiendan? Yo tampoco quiero hacer esto, pero alguno de nosotros debe tener claro lo que es necesario, y ustedes no parecen saberlo. – Ninguno de los tres responde, bajamos en silencio hasta que estamos en la puerta del lugar. Skay entrelaza su brazo con el mío al entrar mientras Dylan y Alexandre nos siguen.

Deambulamos un rato por la fiesta para aparentar hasta que después de tener a Elliot en mi campo visual durante media hora, me acerco y empiezo a socializar con ellos. Son justo como los imaginé, "Mafiosos" excéntricos que se pasan la vida pensando en dinero, mujeres y más dinero.

- Y... ¿De qué se trata el juego? No entiendo nada - Le digo a Elliot mientras río. Obviamente sé cómo se juegan las cartas, pero Cassandra Mary nunca se ha interesado en cosas así, es más de ropa, maquillaje y de su "Maravilloso" novio, Mario.

Elliot pasea su mirada por mi cuerpo unos segundos y se detiene en mi rostro para luego sonreír y relatarme las distintas técnicas, metas y objetivos del juego.

-Mm, es algo difícil. – Digo haciendo una   mueca.

- Para ti, tal vez lo sea. – Sentencia y reprimo el impulso de llamarlo machista. En cambio, me acerco más a él colocando mi mano en su muslo.

- En ese caso, podría enseñarme otra cosa. – Sonrío coquetamente y paso mi dedo índice por su corbata y lo atraigo hacia mí mientras pienso "¿Qué estará esperando Mario para intervenir?", luego de unos segundos, me atrevo a acercar mi rostro al suyo y cuando estoy a punto de rozar sus labios con los míos, soy jalada del brazo.