Recuerden que sus comentarios le dan vida a esta historia.
*
Ese día las nubes habían tomado un tono más oscuro, el viento era frio y Mei Ling se despedía de Wei Ying y sus hermanos. Hoy Wei Ying saldría con los jóvenes discípulos a una cacería a las afueras de Gusu Lan, iba a ser una cacería grande la de ese día, así que sus padres tomaron la decisión de que uno de ellos cuidaría de la niña de seis años, y ese era Lan Wangji.
-Lan Zhan hoy te quedaras y cuidaras de Mei Ling –Le había dicho Wei Ying mientras se abrazaba a su cuello- Ustedes dos no pasan mucho tiempo juntos, así que hoy será solo para ustedes dos.
Mei Ling estaba realmente emocionada, estaría un día completo con su padre, podrían jugar juntos, leer juntos, comer juntos, harían muchas cosas juntos.
-Hm –
-Bien, ya nos vamos –Wei Ying le dio un rápido beso a Lan Wangji y fue hasta Mei Ling- A-Ling, no le causes problemas a tu papá, ¿de acuerdo? –Mei Ling asintió repetidamente y fue a pararse al lado de Lan Wangji- Buena niña. Nos vemos en la noche.
Wei Ying se fue junto a los demás discípulos, Lan Wangji vio a la pequeña niña a su lado y le tendió la mano, Mei Ling sonrió y tomo aquella mano, yendo los dos a comenzar su día.
Mei Ling disfrutaba pasar tiempo con su padre, y amaba pasar tiempo con su tío Xichen, y ahora que estaban los dos juntos tomando el té y platicando entre ellos, Mei Ling no podía sentirse más alegre, un rato se sentaba en las piernas de su padre, y al otro iba y se sentaba en las piernas de su tío recibiendo mimos por parte de ambos. Sus ojos de color negro observaban al par de hombres de rasgos idénticos, el cabello de ambos volaba suavemente por la fresca brisa, Mei Ling los observo un par de veces y sonrió.
-¿Puedo peinarlos? –Los hermanos observaron a Mei Ling un momento, la pequeña los observaba con un pequeño brillo en sus ojos y una suave sonrisa en sus rosados labios.
Algo en los corazones de los hermanos Lan crujió al observar aquellos suplicantes ojos, y sin más, no pudieron negarse al pequeño pedido de la niña. Mei Ling sonrió de oreja a oreja y corrió olvidando la regla que le prohibía no hacerlo, fue hasta el Jingshi y tomo un par de colas y lazos y un lindo peine que había sido un regalo de su tío Jiang Cheng.
Media hora después Lan Qiren salió en búsqueda de Lan Xichen para platicar algunas cosas sobre las nuevas construcciones en el nicho de las nubes, cuando lo encontró las palabras se estancaron en su estómago, Lan Wangji bebía tranquilamente su té ignorando completamente el par de colas con lazos en su cabeza, Lan Xichen elogiaba a la pequeña Mei Ling por el buen trabajo que había hecho en la trenza con flores que ella le había hecho.
-Tío Qiren –Mei Ling sonrió y fue hacia él, abrazándolo. Lan Qiren coloco su mano en la coronilla del cabello de Mei Ling y le dio suaves palmaditas haciéndola reír.
El par de hermanos observaban a su tío esperando algún tipo de regaño o comentario negativo.
-No diré nada –Dijo Lan Qiren- Xichen, te espero en el Hall, necesitamos acordar algunas cosas.
-Voy enseguida –Lan Qiren asintió y se despidió de Mei Ling con un pequeño y suave apretón en su rosada mejilla, Mei Ling sonrió ante el pequeño afecto de su tío y acaricio su mejilla con felicidad- Es mejor que valla caminando –Lan Xichen se levantó y palmeo su túnica- nos vemos luego.
Mei Ling se despidió de su tío y observo a su padre. La mañana ya había terminado a una velocidad increíble, después del almuerzo Mei Ling y Lan Wangji fueron al Jingshi, Mei Ling se sentó en el suelo y comenzó a dibujar las cosas que había ocurrido en la mañana, desde el cielo oscurecido, la pequeña merienda con su padre y su tío, los lindos peinados que le había hecho a cada uno, dibujo a su tío Qiren pellizcándole la mejilla, todos lindos recuerdos que ella amaba y deseaba preservar para siempre.
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Paternidad-MoDaoZuShi (Re-publicando)
Fanfic¿Que ocurriría, si dos de los mas grandes cultivadores comienzan con la tarea de la paternidad?. Lan Wangji y Wei Wuxian se encargaran del cuidado de una pequeña bebe que afectara su calmada vida, no simplemente por el llanto y los cambios de paña...