Santi entre humanos

Capítulo 27: Un Vejestorio Detestable.

¡Hoooola a todos!

¡Una semana para regresar a mi universidad!

Admito que tengo nervios, pero bueno, voy con todos los animos.

¡Quiero darle a la bienvenida a los lectores de Inglaterra!

United Kingdom, ¡Welcome to My Book!

Espero les guste mucho la obra y no descepcionarlos :D

No es nada mas por hoy, los vere la otra semana ( Se viene algo bueno, muuuy bueno )

Espero lo lean, voten, comenten, pero aun mas importante, Disfruten... Esperen, lo mas importante es que lean, que sea lo que sea que lean, lo disfrutaran :D

PD: Necesito que me hagan un favor, miren aqui al ladito derecho, en el cuadrito, cual es el lugar que ocupa el libro en la categoria de vampiros, ayer la podia ver ( #299 ), pero por alguna razon, hoy no me aparece :s . Si logran verlo, por favor, diganme que lugar ocupa, me gusta saberlo :D

Gracias y disfruten que pronto vendra algo nuevo ;)

¡Paaaaaaz!

¡Zayonaraaa!

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Capítulo 27: Un Vejestorio Detestable.

Los tiburones estaban a nuestro alrededor, cubriendo cualquier posible salida, ninguno de nosotros sabía como salir de esto, ni siquiera Augustus y sus amigos, todos estábamos temerosos y con nuestras mentes en blanco ante el inminente final que nos esperaba, me sentía frustrado, enojado, mis amigos y familia estaban a punto de morir y yo no podía evitarlo, desde lo más profundo de mi corazón deseaba que todo parara, que se nos escuchara, deseaba liberarme, deseaba gritar: — ¡ALTOOOOOOO!

Mi grito creo inmensas ondas de agua en el salón, empujando a todos hacia la parte de atrás de sus asientos. Simus, quedo son su barba un poco desordenada, pero no se movió ni un poco, supongo que ser el gran rey, le daba cierto poder sobre las ondas del mar y como fluían a través de él.

Los tiburones, salieron empujados por el techo de la sala, la fuerza de las ondas, los habían impulsado con una increíble rapidez fuera de la sala y al parecer no pensaban volver.

—¿Quién eres? – Pregunto Simus, perplejo por lo que acababa de presenciar.

— Soy Santiago Vans, Humano de crecimiento pero Vampiro de nacimiento. Yo, Gran Rey, Soy El Elegido de Katteri— Respondí con toda la determinación del caso.

— ¡Es imposible! Todos te daban por muerto – Dijo asombrado de verme frente a él.

— Lo sé, pero estoy más vivo que nunca, ahora quiero que me escuche – Dije mientras me acercaba lentamente al cubículo donde se encontraba sentado el rey, inmóvil como si viera un fantasma.

— ¿Qué haces con este traidor? – Pregunto señalando a su hijo, de forma inquisitoria.

— A él, lo encontramos durante la búsqueda, ha ayudado a algunos vampiros a evitar posibles invasiones Vampirex, es amigo de una agente encubierta de la resistencia o lo era hasta llegar aquí – Dije mientras veía el rostro decepcionado de Isabelle.

— ¿De que te podría ser útil esa basura con aletas? – Dijo en su tono más molesto.

— Recuerda que si yo soy una basura, tú eres la basura mayor vejestorio, soy tu hijo ¿Lo olvidas? – Dijo Augustus defendiéndose ante la ofensa.