Capitulo 27

7.6K 412 6
                                    

—Te imaginas que tus padres llegaran y nos encontraran asi.—Me dijo riendo al separarse de mis labios.

—Creo que mi madre se desmallaria, mi padre se quedaria en shock y Anna se reiria.—Le dije imaginando la escena.—Pero...Estan a kilometros de aqui... Asi que no hay nada de que preocuparse.—Le dije mordiendo mi labio inferior.

—Eso me gusta.—Dijo picaramente atacando mis labios, yo le cojia de la nuca para dar mayor intensidad al beso y que no pudiera alejarse de mi, aunque estaba al cien por ciento segura de que alejarse no estaba entre sus planes.

Se tumbo encima mio, con el cuidado de no aplastarme. Nuestros cuerpos se acoplaban perfectamente, tal como dos pirzas de rompecabezas. Mientras el deleitsnte roce de nuestros labios seguia, comence a jugar con eo borde de su camiseta, hasta que decida introduje mis manos por debajo de esta y asi poder tocar su suave y tibia puel. El no tardo en hacer lo mismo, sus manos paseaban de mi cintura a mi abdomen. Nuestras respiraciones comenzaban a acelerarse, su pecho se contraia a causa de la dificultosa situacion. El beso cada vez era mas salvaje, empece a subir su camiseta, queria deshacerme de ella y poder sentir su piel en contacto con la mia. Tuvo piedad de mi,  y se separo de mis labios para sacarse el cacho de tela -A estas alturas bastante incomoda- y la tiro a un lado. Aproveche para cargar mis pulmones nuevamente con ese aire vital que el beso me habia robado. Su lengua recorria toda mi cavidad bucal dejando ese delicioso sabor, por donde quiera que pasara. Empece a levantarme, sin separarme de sus labios, para sentarme en la cama y poder cambiar de lugar con Abraham. Cuando logre que estuviera tumbado, me sente sobre su cadera y sonrei victoriosa al verlo en el estado en el cual estaba, su pecho se contraia rapidamente y me miraba expectamente.

Devore de nuevo esos labios que ahora habia adquirido un intenso color rojo y un grosor mas antojable de lo comun.

Subia mi camiseta al mismo tiempo de que acariciaba mi piel que poco a poco iba siendo descubierta, deje de subirla hasta que llego al inicio de mi pecho, asi que me separe de el y saque mi camiseta para lanzarla al mismo lugar donde estaba la de Abraham.

Su mirada paseaba por mi torso semidesnudo, sonrojada me recoste sobre su pecho, solo que ahora mi victima no fueron sus labios, si no su cuello. Lo besaba persimoniosamente haciendolo estremecer (Algo parecido a los escalofrios pero con mas intensidad, Para el que no sepa que es estremecer)

Paseaba mi lengua e hincaba mis dientes, provocandolo soltar pequeños y sensuales gemidos, que me incitaban a continuar con mi labor. Baje dejando un rastro de besos, hasta su clavicula, donde en lugar de dar un beso, succione su piel para dejarle marca, mientras que con mis manos acariciaba todo su torso. Escuche su risa mientras que me abrazaba pegando aun mas nuestros cuerpos, era totalmente increible sentir su tersa piel  en contacto con la mia, giro haciendome quedar nuevente sobre debajo de el.

—Sabes que soy tuyo...No necesitas dejarme marcas.—Dijo sensualmente en mis labios.

—Lo se, pero me gusta hacerlo.—Le dije girando mi cabeza para hacer otra en su cuello y luego regresar la mirada hacia la suya.

—Me encantas.—Me dijo mordiendo su labio inferior acentuando mas el color rojo de estos.

—No hables...—Le dije sonriente atrayendolo de nuevo a mis labios.

Los besos, caricias iban perdiendo inocencia, cada vez eram mas intensas y extasiantes. Fue dejando un rastro de besos por mi mejilla y cuello.

Se entretuvo un buen rato en la loma de mis pechos y luego bajo hasta mi abdomen, pasaba su lengua con una lentitud que me hacia estremecer, yo permanecia con los ojos cerrados y mi espalda se encorvaba al sentirlo jugar con la boca quitando los cordones de mi short. Fijo su mirada a la mia, mientras comenxaba a sacar el short, cuando este no cubria mas mi piel, me hinque en la cama tal y como el lo estaba, avance hacia el, paso una mano por mi cintura y asi unirme lo mas posible a su cuerpo. Volvio a besarme de esa forma tan unica, que me vuelve completamente loca. Saque mis brazos de su cuello y los diriji a mi espalda, donde desabroche mi sujetador. Sin alejarse de mis labios comenzo a jugar con los tirantes, los bajaba lentamente acariciando mi piel y luego los volvia a poner en su lugar, hasta que los dejo abajo. Me aleje un poco y asi pude lanzarlo junto con nuestra demas ropa. Me miraba sin pudor alguno, pero ami me intimidaba un poco, asi que lo atraje una vez mas a mis labios, mientras me tumbaba poco a poco, con una mano me cojia de la nuca y otra se encontraba en mi entrepierna, esta ultima fue reptando por mi cadera, pasando por mi cintura hasta llegar a mi pecho donde se apodero de una de las partes as sensibles de mi cuerpo. Masajeaba mis pechos de una increible manera, baso sus beos hasta estos, mientras que con su otra mano jugaba con uno. Hasta que introdujo uno a su boca, inundandome de una gran cantidad de placer, la cual tenia que salir de mi cuerpo de una forma u otra. Fue aqui cuando agradeci que estuvieramos solos, asi no tenia que reter los los gemidos que Abraham me producia.

Senti como comemzaba a bajar la ultima prenda que cubria mi cuerpo.

—..........

~Mi Niñero~ (Abraham Mateo Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora