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Ciertamente Annie no fue la única mujer qué visitó y besó a Armin en los meses del coma... La familia Ackerman igual pasó por el hospital para animar a los Arlet, después de todo aún mantenían una relación de amistad. Y, con ello Mikasa se escabullía cuanto podía para sujetar su mano y besarle. 

  Mikasa y Annie llegaron a encontrarse en la misma habitación—con los padres de Armin—, lo cual era realmente incómodo. Ninguna de las dos, llegó a cruzar palabra con la otra. En aquellas visitas incómodas igual apareció Mina y Cynthia. 

 Annie sentía incomodidad, pero ciertamente era la única qué podía sujetar su mano con todo el derecho del mundo. 

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Armin mantenía su vista perdida entre su pie enyesado, veía como sus dedos tenían raspones, y heridas qué le provocaban comenzón. Pero en realidad se mantenía distraído para digerir con todo lo que ocurría, o había ocurrido. Cuando escuchó la puerta abrirse, se giro para mirar está, y ahí se encontraba Hitch, el cabello le había crecido. 

    —Al menos no tienes una cicatriz profunda en el rostro—, dijo mientras caminaba hasta él. 

    —Creo qué las grandes cicatrices quedarán en mis partes enyesadas—, respondió Armin tranquilo.—Me retirarán el yeso en unos días, después tendré una cirugía en la rodilla. 

  Hitch se sentó en el asiento desocupado.

    —Annie nos dijo qué habías despertado.—Sonrío—Reiner y yo vinimos a visitarte en el coma; ambos nos alegramos. 

    —Gracias.—Bajo la vista un momento:—Hitch, ciertamente eres la única persona qué podrá decirme lo que nadie quiere decirme. 

    —¿Y Annie?—frunció el seño.

    —No quise preguntarle a ella. No quiero qué se preocupe. 

    —¿Qué sucede?—, sacó un cigarrillo.

    —¿Cómo murió Marco?

    —Murió un día después de ser ingresado al hospital, un derrame cerebral.—Volvió a guardar el cigarrillo en su bolso negro.—Una semana después fue su funeral. Asistieron algunos compañeros de la universidad, Annie y yo fuimos por respeto, y vimos a Hange. El bebé qué lleva no es de Marco, es de Levi. Marco ya lo sabía, por ello fue a ese bar, aquella noche—, bajo la vista.

  Hitch sentía realmente tristeza por lo sucedido, sin embargo nunca conoció a Marco, por lo qué en realidad no podía sentirse dolida del todo. Aquella le hacía sentir mal.       

   Armin no dijo nada, se quedó en silencio. Hitch igual. 

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Después de un mes por aquella conversación que Armin tuvo con Hitch, salió del hospital para descansar en su casa. El yeso se retiro de su pie y brazo, ahora se recostaba en su cama. La cirugía le dejó cicatrices en su rodilla y parte de su brazo. Armin comenzaba a caminar de nuevo con trabajo, y las jaquecas le impedían algunas veces dormir por las noches; aunque realmente ya no deseaba dormir después de saber qué estuvo soñando por tres meses. 

  Se mantuvo en casa otro mes, hasta qué al fin pudo volver a la universidad. 

  Nuevamente Armin tomó el autobús de la escuela, los días ya no eran nublados, ahora tenían un poco de sol,  las nubes eran blancas. Y, sin embargo él ya no se detenía a mirarlas. 

Él soñador y la chica de la mirada vacía.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora