Sacha (Detenida Indefinidamente Y +18)

20 (Sacha)

Les dejo, aquí... No puedo torturarlos con dos capítulos a la semana, así que regresamos a cada que yo tenga inspiración para la historia publicaré... No se enojen jajaja.

Disfruten...

-Buenos días, señores.

-Buenos días, Halcón-saluda el principal seguidor de Lobo.

Mejor conocido como Beta.

-Dinos que misión nos tienes-les sonrió antes de acercarme a ellos.

-Quiero que busquen a esta mujer-les paso la fotografía que tengo.

Todos se la pasan entre ellos, hasta que el último la termina de revisar.

-Esa mujer es una loca en bombas y quiero hacer un trato con ella-la quiero explotando un par de cosas en África-. Necesito que la busquen y la traigan con vida. Sus enemigos le dicen Polilla, y no es muy sociable, además de que tiene una gran lengua.

-Sociable-dice Lua.

-De las mejore Lua. Encuéntrenla-asienten cuando se los digo-. Y su Alfa será quien los guíe.

Axel se encoje de hombros con ese traje negro que tiene puesto, Elisa niega antes de que él me responda.

-Ni de chiste se irá a una misión-se queja Elisa.

-Elisa, no quiero discutir-digo con calma o cualquier cosa que diga la hará enfadar-. Axel tiene que hacerlo como parte del trato.

-Elisa... No quiero que te metas-gruñe Axel.

-¡Te está mandando a una misión!-me alejo de ellos un poco-Axel hablamos de que pueden pasar meses antes de tenerte de regreso.

-Eso no importa, Elisa... He pasado mucho sin hacer nada. Es justo que lo haga.

-¿Y sí te matan?-esto ya es mucho para...-¿Dejarías a tu hijo sin padre?-el silencio se hace inmediato.

-¿De... De que hablas?

Elisa suspira antes de hablar. Su vista cae a uno de mis pequeños y una mirada que conozco bien se pone en su cara.

No mandaré a Axel si eso de verdad está pasando. Quitó a Axel y le doy un abrazo aunque duda al principio pero termina dándomelo.

-No mandaré a buscar a Polilla.

-Gracias Sacha-me separó de ella y acomodó un mechón de su cabello.

-No me agradezcas... Elisa. Le diré a Pulga que consiga el material para lo que necesites-me abraza de nueva cuenta.

Es como una hermana. No le quitaré lo que es importante para ella, y más con un hijo próximo en su vientre. Axel atrás de nosotras nos hace preguntaste sobre de que día los hablamos su pareja y yo. Me río despacio antes de darme la vuelta y responderle.

-Que cambiarás pañales en menos de siete meses-digo calmada.

-Elisa... ¿Estás...?

-Dos meses y medio.

Axel se abalanza sobre ella quitandola de mi agarre, la levanta antes de besarla los presentes sólo niegan al ver su Alfa contento por el nuevo bebé que espera.

Doy nuevas órdenes, no mandaré a Axel a buscar a Polilla, sólo irán ellos. Y la quiero con vida porque haré volar un par de cosas en África y otras en diferentes lugares del mundo.

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Bajo del avión a eso de las cuatro de la madrugada, extrañaba el clima de Manhattan. Tan frío y a la vez cálido, mi trabajador ya me espera con la camioneta negra que me llevará al departamento donde viví varios meses antes de irme a México.