Martin es un chico de 18 años, tímido, brillante y con un secreto, desde la secundaria está enamorado de su amigo Samir, un chico extrovertido, carismático, futbolista y mujeriego. Todo un cliché!
"El despierta mis más oscuros deseos y ciertamente...
Esta historia comenzó cuando estaba en primer semestre de publicidad, 18 años, virgen, y temeroso de afrontar mi sexualidad públicamente.
En la misma Universidad pero en otra carrera estudiaba Samir, de 19 años un chico que conozco desde el último año de bachillerato, hermoso, varonil, con carisma y por supuesto con gran éxito entre las mujeres.
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El despertaba mis más oscuros deseos y ciertamente son incontables las veces que me masturbe pensando en él. Sin embargo, yo me las arreglaba para disimular lo mucho que me gustaba.
Siempre me las ingenié para estar en su grupo de amigos, para hablarle, ver su sonrisa, sentir su aroma y así alimentar las fantasías donde él me deseaba tanto como yo a él.
Mi nombre es Martin y así fue como me convertí en el esclavo de mi fantasía.
Un viernes en la tarde nuestro grupo se reuniría para hacer una fiesta; fin de semana y rumba!. Justo antes de salir de la universidad vi a Samir y me pregunto,
—Iras a la fiesta?— Y contestándole que sí, inmediatamente él se ofreció para llevarme, pero aclarando que primero pasaríamos por su casa a cambiarse de ropa.
En el camino, (siempre con su actitud de varón y seguro de sí mismo) me estaba contando que se vería en la fiesta con Inés, (Una de las chicas más hermosas de la universidad, con fama de fácil pero sólo con galanes como Samir) a la que también invito a pasar la noche con él ya que su casa estaría sola.
Él vivía con su papá, un reconocido médico y esa noche estaría haciendo guardia. Yo le seguía el juego de machos pero sentía una tremenda envidia hacia Inés.
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Al llegar a su casa entramos a su cuarto donde me dijo con voz alegre y pícara:
—Si quieres prendes el TV o la computadora mientras me baño, porque este de aquí ...culea hoy!
Tristemente se metió al baño vestido y cerró la puerta, pero aún tenía esperanzas de verlo sin camisa al salir de la ducha.
Embriagado por el aroma de su habitación veía su cama imaginando cuantas putas se lo habían gozado allí.
En el último año de secundaria Samir embarazo a una chica, cuyo bebé al nacer murió por complicaciones, esa historia unido a su carisma y físico quizás por morbosidad o no sé qué cosa, lo convertían en un hombre muy deseado!
Finalmente llegó el momento... cierra la ducha, pasan unos minutos, luego abre la puerta ... y fue entonces cuando ese monumento de piel dorada salió con una toalla azul a la cintura, el torso mojado, su cabello castaño aun goteando y esa sonrisa que me derretía.
Podía ver un gran bulto en su entrepierna, una sutil línea de vellos recorrer su marcado abdomen, además que al desfilar frente a mi cuando se dirigía al closet, pude apreciar su gran espalda en V, terminando en su hermoso trasero, formado por dos trozos de carne firmes y que parecían imanes para mis manos.
No podía creerlo! Tenía más de dos años conociéndolo y nunca la había visto sin camisa y ahora lo tengo en toalla frente a mi!. Ni en mis fantasías lo había imaginado tan delicioso y atlético, me tenía muy excitado!
Cuando salió de mi rango visual, me quede viendo el TV para disimular el morbo en mis ojos, o eso intentaba. Y me decía a mi mismo,
—Hoy me masturbo riquísimo!
Luego al terminar de arreglarse y quedar como un muñeco me dice,
—Listo, disculpa la demora, ahora si ya vámonos de rumba!
