Hola hermosuras espero se encuentre bien ❤️
Después de tanto tiempo al fin les traigo un nuevo capítulo espero lo disfruten y sea de su agrado 🌻
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Al llegar al salón principal la mayoría ahí presentes quedaron prendados de su belleza, aunque sólo fuese superficialmente, pues sólo sintieron deseo por ese ser tan hermoso, incluso más de uno ahí ya lo desnudaba con la mirada.
El primero en levantarse fue hades y se encaminó a saga quedando frente a él — a ti no podría olvidarte, ni aún qué te dejará de ver por una eternidad —su voz profunda y grave tan cautivadora y alusinogena le puso la piel chinita a saga pies ahora al ser más pequeño que los demás, los veía de manera imponente y se sentía frágil —aún recuerdo aquella vez que los reviví a ti y a los otros esa primera vez que te vi, y te veías tan hermoso como ahora —tomo una de las manos del más pequeño y la beso.
Siglos atrás nunca jamás se hubiese visto a hades rindiendole tal honor a un humano, pero ahora se prendo de esa belleza que tenía enfrente, todos estaban incrédulos ante lo que veían, un fuerte sonrojo se hizo presente en la cara de saga.
—señor hades, yo no se que decirle —respondió cuando recobro su postura sería.
—no tienes que preocuparte por ello, quiero que vengas al inframundo como mi consorte —la Declaración y propuesta dejo a todos con la boca abierta, unos que estaban tomando vino casi se atragantan y otros casi lo escupen, pero de lo que estaban seguros es que no dejarían ir a saga.
—un momento señor hades, mi hermano no irá con usted a ninguna parte —el gemelo menor fue el primero en reaccionar, con enojo, nadie le quitaría a su presioso hermano.
—¿no cres que es el quien debe responder? —se defendió el dios —y bien saga ¿que dices? —volvió la vista al menor.
—lo siento, pero no puedo —le quito su mano de entre las contrarias —además usted tiene a persefone como consorte ¿o lo olvido?.
—eso se puede arreglar fácilmente —puso una mano en la cintura delgada y la otra en su espalda alta, para tenerlo cerca —solo es cuestión de una palabra tuya.
Quería seguir insistiendo pero los caballeros dorados no lo permitirían, aioros le arrebato de los brazos a saga y lo puso tras de si —señor hades, nosotros lo respetamos, pero hay cosas que no se pueden permitir.
La tensión estaba a flote, todos estaban de pie con el ceño fruncido, el ver a saga de esa forma los hizo prendarse de él, incluso ideas se les vino a la mente de cada uno.
—vamos señores, no es para que se pongan así, cada uno tendrá su oportunidad —sonrió, para intentar calmar los ánimos —todos pueden hacer su mejor esfuerzo para ganarse su amor, claro jugando limpiamente —aclaró y se acercó a saga lo tomó del brazo para guiarlo a su asiento —ahora tomen sus alimentos en paz.
Así lo hicieron acordaron que jugarían limpiamente, durante la merienda nadie dijo nada, todo estaba tan tranquilo al finalizar solo se escucho la voz de shion.
—por cierto lo olvidaba, saga pasará un día en cada templo del zodiaco, se que había acordado que serían 3 pero debido a ciertas circunstancias es mejor solo uno —comentó tranquilo, algunos tenían la esperanza de en poco tiempo conquistar a tal belleza —empezando desde manaña, ahora pueden retirarse.
Todos abandonaron sus asientos, unos con el interés de invitar a saga a salir, las propuestas llovieron de a montones, pero siempre estaba ahí kanon para recordarles que protegería a su gemelo, no dejándoles otra opción todos se retiraron incluso los dioses se fueron a descansar.
Una vez estando solos, el patriarca y los gemelos, el silencio volvió pero no por mucho tiempo —te exijo shion que me regreses mi apariencia, no quiero esto, incluso soy más bajito que los demás, me veo frágil, y yo no soy así incluso me quitaste mi cosmos, ¿cómo demonios me defenderé si alguno de ellos trata de propasarse conmigo eh como? —apretaba sus puños con gran fuerza y aguantando las ganas de llorar de impotencia.
Kanon por su parte estaba que no lo calentaba ni el sol, oír que su hermano no tenía su poder lo alertó y enfureció —acompañaré a saga a cada templo me oyes shion, no permitiré que lo lastimen —habló con furia.
—basta los dos, soy el patriarca, la máxima autoridad y ambos deben obedecerme —estaba al límite de su paciencia —saga debe expiar sus culpas y es mi última palabra —sentenció, luego se dio la vuelta y se dirigió a su biblioteca personal.
Kanon utilizando su triangulo dorado los teletransportó a geminis, lo tenía entre sus brazos, lo sentía tan débil, indefenso, que sabía que tenía que protegerlo, cuidarlo en todo momento y no le importaba tener que arriesgar su vida por el.
—saga, tranquilo, todo estará bien— trataba de darle esa confianza para que se sintiera seguro, y no le temiera a nada.
—gracias kanon, se que puedo confiar en ti para todo —ya calmado le ofreció una dulce sonrisa sincera cargada de ternura.
Aunque las cosas no irían del todo bien, tenía que aguantar a tantos hombres que parecían estar en celo, suspiro desanimado empezaría con aries al día siguiente.
—veo que ya están aquí —escucharon esa voz a sus espaldas —que les parece si salimos el día esta increíble —su sonrisa tenía un toque cínico.
—lo siento emperador —hablo saga —yo no tengo deseos de salir, pero eso no impide nada, si usted gusta puede hacerlo.
—Julián, no estoy de ánimos, tu puedes salir con algún general marino —lo corto tajante, kanon jamás le guardo algún tipo de respeto, al ser un humano muy caprichoso, lo cual es diferente con el verdadero poseídon, el dios y kanon tenían cosas en común.
—pues en vista de eso, estaré en la sala leyendo algún libro —desganado y con un toque de enojo se encaminó a la sala del templo.
Ambos gemelos se fueron a sus respectivas habitaciones, kanon a tomar un baño, con la idea de después conversar con saga, Julián vio su oportunidad de oro y camino a la habitación del gemelo mayor , entrando sin autorización pues no estaba acostumbrado a tocar las puertas o pedir permiso.
Al entrar vio a saga a punto de quitarse lo único que le cubría su túnica, exponiendo sus hombros, este al darse cuenta rápido se la volvió a poner.
—¿puedo ayudarlo en algo? —cuestionó molesto, si hay algo que realmente le moleste es que invadan su privacidad.
—oh pero claro! —su voz era sarcástica —lo que quiero es que te alejes de kanon, se sobre sus sentimientos por ti, y te advierto, kanon es solo mio—en su voz ahora se notaba la furia.
—¡¿Porque debería de hacerlo?!,kanon es mi gemelo, y usted no vendrá a decirme que o no hacer, después de todo, no eres el emperador poseídon, si no únicamente Julián solo—en esta ocasión tenía razón Julián apretó la mandíbula con gran fuerza.
—desde hace tiempo yo estoy enamorado de él, y puedo ofrecerle la tranquilidad, que tu no podrías, y eso es por la razón que no tendría que pelear con nadie —sentía que llevaba la delantera con sus comentarios al ver el rostro lleno de temor.
saga sabía que eso es cierto, el no puede darle paz a su hermano con los problemas que ahora tiene —es cierto, pero aun así, no puedes controlarlo tu.....
—hay por favor, conmigo no tendrá que cargar con tantos problemas, como pelear con lobos, o con un trastorno de doble personalidad, o simplemente con la sombra del pasado, eres de lo peor—cada palabra que decía se clavaba en el alma del gemelo, y cada una la soltaba con cierto toque de sorna —dime saga que podrías ofrecerle a kanon.
—lo que puede ofrecerme es su amor —ambos voltearon a la entrada y vieron a kanon con el ceño fruncido, es obvio que estaba furioso —precisamente por ello estoy dispuesto a soportarlo todo con tal de tener su amor.
El gemelo menor, después de tomar su baño fue a la alcoba contigua y se encontró con tal escena alcanzando a oír lo anterior, sacó a Julián prometiendo después tener una larga conversación con el, el resto del día lo pasaron ambos gemelos juntos, entre pláticas y risas, Almenos por ese día, pues el siguiente empezaría el castigo de saga.............
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🔱EL CASTIGO DE SAGA 🔱
RandomLa llegada de una era de paz que reynaba en el santuario pero el gran patriarca tenía cuentas pendientes con cierto caballero dorado..... La corte Dorada tiene planes...... Kanon no permitirá que dañen lo que más quiere El amor azotara no sólo el s...