Celos, Lan Wang Ji estaba hirviendo de celos. Wei Ying abrazaba con mucha fuerza al líder de la secta Yunmeng Jiang.
Honestamente, fue solo una coincidencia que ellos se encontraran.
Nuevamente en la ciudad, esta vez los jóvenes discípulos de la secta acompañaban al segundo jade junto con el pequeño Wei Ying. Y los polos opuestos se atraen, Jin Ling había estado usando la excusa de salir de cacería junto con Hada para acercarse lo más posible a la secta Gusu Lan para obtener noticias de los que consideraba sus amigos y por supuesto de su tío Wei Ying.
Hada, al ser un guía espiritual, lo había llevado hasta Wei Ying. Al principio, Jin Ling estaba consternado al ver Si Zhui y Jing Yi junto a un niño pequeño vestido de ropas blancas como la de ellos pero sin llevar una cinta en la frente. Y no había creído que era el maestro Wei Ying por más que ellos se dirigieran al niño de esa forma. No fue hasta que Hada se acercó al bebé y le dio un susto de muerte, al pasarle la lengua por la cara, que lo confirmó.
El infante asustado hasta la raíz del pelo, gritó tan fuerte y luego, como si de una fuente se tratara, comenzó a llorar. Si Zhui tomó al joven maestro en brazos pero el niño estaba tan asustado que temblaba frenéticamente mientras lloraba escandalosamente.
—¡Hada, regresa! —fue la instrucción del dueño, pero el perro simplemente decidió ignorarlo y seguir observando al niño llorar, se paró en dos patas con intenciones de volver a lamerlo para calmarlo, pero una sombra lo detuvo. Un hombre apuesto se paró detrás de Si Zhui y observó al perro quién por prudencia, se retiró huyendo.
—¡Tío! —gritó Jin Ling corriendo hasta él. Al igual que su sobrino, él había visto a Wei Ying como un niño y no lo había podido creer hasta que observó su reacción ante el perro de su sobrino. Y como el llanto le pareció molesto, o eso era lo que se decía así mismo mientras se acercaba para averiguar qué rayos había pasado con Wei Ying para estar en esa forma, fue a espantar al perro desobediente.
Como mágicamente el ser más temido por Wei Ying desapareció gracias a la presencia del hombre vestido de púrpura, en el corazón de Wei Ying, la gratitud nació naturalmente e hizo lo imposible por acercarse a su salvador, Lan Si Zhui incapaz de contener al pequeño en sus brazos, no tuvo más opción que dejarlo ir a los brazos de su hermano.
Jiang Chen, no supo reaccionar muy bien del todo, de pronto tenía un niño aferrado a él, riendo cerca de su oreja, Wei Ying estaba agradecido, así que parloteaba:—Atias, atias —después de repetir esas palabras lo abrazó.
Y justamente, fue esa escena la que había presenciado Hanguang Jun.
El segundo jade se acercó hasta ellos, y cuando repararon en su presencia exigió con tan solo una mirada helada, una explicación.
Wei Ying no se despegaba de Jiang Chen y los jóvenes sentían un aura asesina proveniente del mayor de la secta Lan. Sin embargo, Lan Wang Ji era todo modales sin importar cuán enojado estuviese.
Jiang Chen también exigió una explicación sobre el por qué el estúpido de Wei Ying había acabado de esa forma. En una batalla de comentarios ácidos, ambos reclamaban explicaciones sobre por qué Wei Ying se metía en problemas por culpa del otro.
Wei Ying pronto se sintió atraído por las voces de los jóvenes que jugaban con él y del nuevo personaje vestido de amarillo. Así que finalmente se fue a donde estaban los adolescentes.
El tiempo pasó y entre el segundo jade y el líder de la secta Yunmeng Jiang terminaron su no tan amena charla gracias a que el primer jade había llegado. Así, los tres fueron a buscar a los más chicos para encontrarlos en una situación absurda. Wei Ying tenía la apariencia de un niño de tres años pero eran los jóvenes quienes actuaban infantilmente.
—Te estoy diciendo que no: Wei Ying prefiere la secta Lan —alzaba la voz Lan Jing Yi.
—Por supuesto que no, entre la secta de mi tío y la suya, Wei Ying prefiere la de mi tío —respondió igual de acalorado Jin Ling.
—Eso es imposible —Decía más calmado Si Zhui pero, poco dispuesto a aceptar dicho comentario.
Luego los tres jóvenes pusieron a prueba al niño que los miraba divertido. Los jóvenes pusieron tres objetos que representaban a la diferentes sectas: Gusu Lan, Yunmeng Jiang y Lanling Jin, está última porque Jin Ling secretamente quería competir también por la atención de su otro tío. Todos los que observaban la escena estaban atentos a las acciones del niño, incluído cierto par de adultos vestidos de blanco y violeta respectivamente.
Inesperadamente, Wei Ying tomó la campana que representaba la secta Yunmeng Jiang. Jin Ling celebró su victoria pero, Lan Si Zhui no se daba por vencido y le dijo a Wei Ying:
—Eso no significa nada. Maestro Wei, ¿quién te gusta más: Hanguang Jun o el líder de la secta Jiang?
—Wei Ying... —inclinó un poco su cabeza, como si pensara la importancia de esa pregunta—, Wei Ying guta muto Lan Tan —fue lo que respondió antes de meterse a la boca la campana que previamente había escogido.
Ese día, se dieron cuenta que en el corazón de Wei Ying, todo era de un suave color lila, como resultado de la combinación del blanco y el violeta.-----------------------------------
Diganme que no soy la única que murió de ternura... En todo caso, me encantó este cap porque amo con todo mi corazón la relación de hermanos entre Wei Ying y Jiang Chen así que les di su momento. Porque siento que en la novela ellos debieron reconciliarse mejor. T.T crying in Spanish
Me encanta que esta historia sea ligera de escribir, no sabía que escribir así me podía hacer tan feliz. ¡Gracias por su apoyo!
Besitos
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Los problemas del segundo jade [WangXian]
Acak¿Cuánto está dispuesto a tolerar Lan Wang Ji? Wei Wu Xian convertido en un niño de tres años. Criar a un niño, especialmente si es Wei Wu Xian no es para nada fácil. Capítulos cortos.