Black Clover: Guerra de demonios.

Parte III | La despedida

Capitán Yami, ¿de verdad podremos combatir contra los magos de otros reinos?-Preguntó el ingenuo de Asta, quien aún tenía lejana la idea de pelear en una próxima guerra mágica.

Así es mocoso, era de esperarse, el reino del trébol tiene muchos enemigos como el reino del diamante, creo que la relación diplomática más amistosa que tenemos es con la gente extraña del reino del corazón y es gracias a que el rey de allí es todo un personaje excéntrico.-Suspiró el pelinegro mientras montaba el hombro del gran animal cuadrúpedo. (El león mágico de fuego.)

Entonces tendremos que ser más fuertes para ganar a nuestros enemigos, ¡QUE EMOCIÓN!-Exclamó el chico con todos los ánimos subidos a la cabeza.-

Cálmate enano, no es del todo seguro que podamos aguantar, somos fuertes pero lo que nos espera es algo como nunca lo habíamos visto, posiblemente arriesgaremos nuestra vida a todo momento.-Yami acariciaba el lomo del animal peludo mientras hablaba.-

Suena a algo peligroso.-Asta estaba entendiendo la situación.

Si, ¿al menos ya entiendes cual será tu papel?-Preguntó Yami.-

Así es, amo este lugar y de ser necesario seré la espada de este reino... ¡Prometo protegerlo capitán con todo mi esfuerzo!-Asta temerariamente tomó una decisión firme y se bajó del lomo del animal.-

¿A dónde vas mocoso?-Preguntó Yami con cierto recelo.-

Regresaré a Hage, ya tengo una idea de lo que haré para ser mucho mucho mucho más fuerte capitán.-Gritaba Asta desde el suelo.-

Te ves muy convencido, está bien, solo sorpréndeme chico, confiaré en ti, ¿Es esta una despedida verdad?-Yami apagó su cigarrillo con las almohadillas de sus dedos.-

No lo diga así pero, si, no nos veremos por un tiempo, será algo difícil.-Asta comenzaba a rascar su cabeza.-

Bueno, es tu decisión, lo tomaré como tu huida ya que no quieres lavar la ropa.-El pelinegro reía con ánimos y con sarcasmo.-

Supongo-El chico comenzó a reír y luego su semblante comenzó a cambiar.-¡Nos vemos luego capitán, despídase también de los chicos de mi parte, los extrañaré... Y dígale a Noelle que tome mis labores en la base!-Asta con su cuerpo hizo una reverencia de respeto hacía su capitán, inclinado su cuerpo y cerrando los ojos.-

Muy bien mocoso, me encargaré de decirles, tu solo no pierdas tu objetivo y no dejes que otro animal gigante te coma, te estaré esperando.-Yami siguió su camino hacia la base montado en el león, dejando a su compañero atrás una vez despedido.-

¡MUCHAS GRACIAS!-Asta nuevamente hizo reverencias de agradecimiento seguidas, hasta que el capitán Yami se fue.- ¡Muy bien! ¡Es hora de regresar a casa! Pero, ¿Cuál es el camino que debo tomar a Hage?-Asta estaba confundido en que ruta tomar.- No importa, me esforzare para llegar corriendo.

-Mientras que desde la distancia y en su lejanía estaba el capitán Yami pensando en lo que había sucedido anteriormente, estaba algo impresionado por la decisión tan conflictiva de su subordinado de orden.-

Cielos, tendré que ser más duro con ellos... ¿Las despedidas siempre han sido tan molestas?-El toro negro estaba pensando mientras tenía en su mente la risa y la voluntad que tenía su compañero de antimagia.-Madura tu poder chico, posiblemente tengas que ser la espada de este reino.-Y así Yami partió hacía su base, con la intención de dar la primicia a sus compañeros de orden y tomar las riendas a una preparación total de medio año.-

¿Qué será del resto de toros negros y cómo influirá la decisión de Asta en sus amigos?