Elliot se encuentra revisando el resto de instalaciones de la nave. Al parecer el tamaño de la misma es algo engañoso, ya que hay mucho más por dentro de lo que parece.
Tina por su parte parece concentrada en la consola de comandos, y Lunafreya la está observando.
- ¿Qué haces, cariño? - Le pregunta Lunafreya a Tina en un tono maternal.
- Estoy coordinandome con el sistema de asistencia de la nave. - Le responde, sin mucho ánimo.
- Te siento algo mal ¿Te pasa algo?
- Nada, sólo son éstas condenadas emociones jugando con mi cabeza otra vez. En serio ¿Cómo hace la gente para vivir con ésto?
- Es algo difícil. ¿Pero como te sientes exactamente? Yo supuse que estarías feliz.
- Y lo estoy... O más bien... Quiero estarlo - afirma Tina - pero hay algo que no me deja y no puedo pensar con claridad. Ahora que papá va a poder buscar a su verdadera familia yo... Tengo miedo de ser reemplazada.
- Pero no te va a reemplazar, corazón. - Lunafreya la intenta consolar con un tono tierno y amable. - A ver, estuvimos trabajando en tu esfera emocional, pero volvamos a lo básico ¿Si? ¿Cuál fue la primera lección que te enseñé?
- Los wyvern pueden ser muy pequeños pero son increíblemente veloces.
- Con respecto al manejo de tus emociones.
- ¡Ah! Oye, tienes que aclarar esas cosas. - Dice Tina. - Me dijiste que "La posibilidad de sentirte mal es tan sólo un pequeño precio a pagar por tener la capacidad de sentirte bien."
- Bien, muy bien. Ahora compara todos los recuerdos felices que creaste, todas las aventuras que viviste, con cómo te sientes ahora.
- Está bien. - Dice Tina entre sollozos.
Tina gradualmente empieza a dejar de llorar, pero cuando parece que va a terminar, desborda en un llanto aún más intenso.
- Ya, ya, pequeña. - Dice Lunafreya, cambiando su forma a la de una dragona blanca, de a penas más de dos metros de altura, tan sólo para cubrirla con una de sus alas. Ésto parece calmarla.
- No estoy hecha para ésto - Dice Tina aún sollozando un poco, y dejándose cubrir por el ala en lo que Lunafreya se va echando en el piso, con ambos pares de patas flexionadas, su cuello retraído hacia atrás, y su cola enroscada sobre sí misma. Mientras ella hace ésto, Tina se va echando en el suelo a su lado, colocándose bajo su ala en posición fetal a seguir llorando.
Elliot llega de repente y ve la escena. Gracias a su sentido agudo del oído lleva escuchando ya un rato, preocupado por su hija decide entrar, pero al hacerlo, la dragona le clava una mirada tal que lo hace recular y dar media vuelta para regresar a inspeccionar el resto de la nave.
Lunafreya piensa - No es bueno que se acerque en éste momento. Será mejor que se mantenga al margen hasta que logre estabilizarla un poco. Luego podrán ponerse al día.
Mientras tanto la pequeña sigue echada en el suelo, pero tras un rato, aún llorando, se levanta, empujando suavemente el ala para indicar a la dragona divina que desea salir de debajo de la misma. Sin mediar palabra, ella lo hace, permitiendo que la joven se levante para ir saliendo lentamente. Cuando finalmente lo hace, se dirige nuevamente a la consola central.
Tina comienza a teclear comandos mientras los dice en voz alta. - Sincronizar datos... Módulo de asistencia general a Módulo central de procesamiento de la unidad auxiliar, y viceversa.
- ¿Qué haces? - Le pregunta nuevamente Lunafreya.
- Me doy a mi misma la permisos de administradora en la nave. - Dice aún hablando entre ligeros sollozos, pero más normalmente. - Es lo que hacía antes y es lo que voy a seguir haciendo, así seguiré siendo útil y no podrán desecharme.
- Tus acciones reflejan inseguridad. - El tono de voz de Lunafreya refleja preocupación. - Será mejor que lo próximo que te enseñe sea a controlar eso. Pero por ahora, tu esfera emocional ha hecho demasiado progreso en muy poco tiempo. Calculo que necesitas un respiro.
- Si tú lo dices...
Pero entonces suena un ruido estruendoso y grave cómo el de la bocina de un gigantesco buque de carga. Tras el sonido, se escucha una voz neutra proveniente de los altoparlantes de la propia nave.
- Wanderer 5, ahora mismo se encuentra obstaculizando la salida de la nave Skylancer 8, por favor, inicie su despegue de inmediato.
Al momento del aviso, Elliot llega al puente. - Tenemos que salir de aquí o nos vamos a meter en problemas.
- Estoy de acuerdo. - Dice Lunafreya.
- Tina, toma el control de la nave y sacanos de aquí. - Indica el capitán, a sabiendas de que Tina ya había hecho lo primero.
La nave despega con urgencia sin dar a sus tripulantes tiempo de que se acomoden en los asientos reductores de inercia, aunque no hace falta, ya que lo único que hace es retirarse del hangar a través de la barrera invisible del mismo, y luego asciende verticalmente para dar espacio a que las demás naves se retiren.
- Bueno, ahora supongo que tenemos que ir a nuestro sector asignado. - Señala Lunafreya. - ¿Nos dirigimos primero a la delegación que nos corresponde?
- De hecho. - Comenta Tina - Creo que lo mejor será ir directamente a la misión que ya tenemos asignada.
Los dos adultos la miran.
- La nave acaba de recibir un correo. En resumidas cuentas nos asigna ir al universo 591-KDG-W02, galaxia 31415, Sección Delta 3 Phy 7. Un planeta Tierra ubicado temporalmente en el siglo XXI.
- Típico. - Dice Elliot. - ¿Qué está sucediendo?
- Lo estoy analizando ahora mismo. - Señala Tina. - Al parecer hay una especie de nación emergente en una isla artificial del pacifico. La línea temporal indica que esta nación es la causante de varios desastres a escala global en un futuro no muy lejano.
- ¿Cómo se llama ésta nación? - Pregunta Lunafreya.
- Tecnocracia de Kinder Woods. - Responde Tina.
- No me suena de nada. - Dice Lunafreya, pero el rostro de mala sorpresa de Elliot transmite el mensaje totalmente opuesto.
- Luna, Tina, a sus lugares. ¡Ya! Tina, cuando estemos listos, despega. ¿Me oyes?
- Entendido.
Elliot toma el asiento del capitán y tanto Tina cómo Luna toman posiciones. Tras abrochar sus bandas de seguridad, la nave parte doblando el espacio y el tiempo para salir inmediatamente al espacio multiversal.
Tina entonces recupera su sonrisa y piensa para sí. - Se siente bien estar de vuelta.

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El Protectorado del Multiverso
Science FictionEn el más alto sistema de justicia, seres extraordinarios de todas las formas de vida conocidas cooperan para traer la paz a todos los universos. Elliot Onion, oriundo del territorio de Lightwhere, hará lo posible para demostrar que está a la altura...