EWAN
No puedo creer lo que escuche de la boca de mi esposa, pero tiene razón si fuera cualquier mujer no le creería, pero es el general del ejército más temible de estas tierras. Siempre he notado que el general defiende cuando decimos que lo mejor es exterminar al Rey Antonio. Él busca como defenderlo. Entre reuniones y tonterías han pasado dos semanas no he podido convivir mucho con mi esposa. Suspiro cansado entre la posible guerra y mis sentimientos encontrado por mi esposa se me consume parte de mis pensamientos, la he notado un poco triste en los últimos días las pocas veces que la logre verla.
Había prometido llevarla siempre que quiera ver a su hermano, pero con la amenaza de la guerra no ha querido exponerle. ¡Suspiro para luego levantarme tomar un baño para ir a visitar a mi esposa, mis siervos me ayudan con las vestimentas en silencio como de costumbre, tengo que ir a ver los entrenamientos, pero primero voy a ver a la Reina me desvió y entro, pero solo veo a las damas de compañía-Alteza!
— ¿Dónde la reina?
—La reina, alteza se despertó temprano dijo que iría a los jardines de palacio —gracias. Salgo de los aposentos y me dirijo hacia los jardines, la busco, pero no la veo, busco en los pasillos hasta el harem, pero no la encuentro le pregunto algunos guardias, pero no saben nada. Estoy comenzando a desesperarme. ¿Dónde podría estar la Reina? Se me ilumina los pensamientos, donde más si no es en el patio de entrenamientos. Camino apresurado hacia mi destino, y la veo con la mirada perdida hacia los guerreros que entrenan, pero ella no está prestando atención a los entrenamientos, más bien, está perdida en sus pensamientos.
Me acerco y llamo su atención -Esposa mía, daría el reino completo para saber sus pensamientos. Se voltea y sonríe, pero su sonrisa no es genuina.
—Esposo, no te sentí llegar. —Me acerco y la beso en los labios y la abrazo
—He notado que has estado triste en estos días, extrañas a tu hermano. Ella aparta la vista avergonzada.
— Disculpe alteza, es que nunca he estado separada tanto tiempo separada de mi rey, ni y cuando iba a la guerra. Siento que me falta algo —dice triste. Sonrió por la devoción que siente hacia su hermano.
—-No he querido salir contigo por lo de la guerra, pero he decidido que te voy a llevar a ver a tu hermano, pero solo iremos seis tú y yo y cuatro guardias nos haremos pasar por viajeros comunes. En dos días iremos a ver a tu hermano. Veo como sus ojos tienen un brillo especial.
—Gracias alteza, —dice para abrazarme. La beso he de reconocer que estoy enamorado de la mujer más influyente y peligrosa de toda Escocia.
Después de hablar con mi esposa y dejar en claro que será en secreto que iremos al el reino de Cameron camino hacia la sala del trono para tratar asuntos del reino. Entre discusiones y conclusiones finalizó el día, todos se retiran a sus casas, tenía la intención de ir a pasar tiempo con la reina, pero ya casi es hora de la cena así que lo mejor es ir a tomar un baño para relajarme, entro a mis aposentos tomo mi me visto, para luego salir a los comedores reales, entro y no hay más que personas del servicio me siento a esperar, al pasar unos cuantos minutos escucho a mis padres — Hijo, llegaste temprano.
—Si tenía que decirle que iré al reino de Cameron con mi esposa. Antes de que digan algo, iremos como viajantes normales, nada de decirle a nadie dónde iremos.
—Claro hijo como tú digas. Habla madre comprensible escuche la carcajada de mi padre. — ¿Sabes? Cuándo me case con tu madre hice algo parecido. Lo que hace un hombre cuando está enamorado. —Me pongo nervioso
— - Yo...
—Buenas noches— me levanto rápido, mis padres hacen lo propio al entrar la reina -Buena noche, Alteza. Nos sentamos la cena pasa sin contratiempo puedo ver que mi esposa se ve más animada. Luego de terminar mi padre y yo nos quedamos solos para tomar un poco
—He notado como la miras estás enamorado hijo mío- — habla mi padre—¿Y eso es malo? Estoy aterrado Padre.—Depende hijo, no es tan malo como crees. Ella también te quiere.
—No padre no lo creo su única devoción es su hermano. Lo veo sonreír.
—Hijo no te has puesto a pensar que si ella quisiera ir a ver a su hermano no necesita tu autorización, pero ella no se ha ido a esperado a que tú le des tu autorización, porque te respeta y quiere que tú vayas con ella. Porque si ella quisiera puede ir tiene a un ejército más grande que el nuestro dentro de las murallas. Ewan hijo mío ella te ama y de eso no hay duda. Dice poniendo su mano sobre mi hombro, para luego retirarse. —Ah hijo deberían de consumar su matrimonio el consejo está preguntando cuando la reina dará a luz a un heredero.
—Si la Reina se entera de que el consejo habla a sus espaldas volarían cabeza —digo riendo.
Camino hacia los aposentos de mi esposa, toco escucho el pase entro y la veo mirándose en el espejo — Te ves hermosa reina mía — le dijo mientras me acerca a ella. Trae un camisón de seda blanco y su pelo está suelto, de verdad no sé ¿Por qué no se lo deja así todo el tiempo?
La tome de las manos ella sonríe y si ya me parecía hermosa ahora parece una diosa. — ¿Qué sucede Ewan? Respiro hondo porque cuando estoy cerca de ella siento que no puedo respirar bien.
— ¿Es que no puedo venir a visitar a mi esposa en una noche fría?—No. No es eso, es que te quedas mirándome
— ¿Cómo la provocó?—Extraño mi lord. —Sonrió con malicia, su inocencia es fascinante- mi Reina hoy no creo que para mañana continúes siendo casta —le digo para que quede pegada a mí cuando vino a reaccionar ya la estaba besando, sentía como mi cuerpo comenzaba a calentarse me separo de Mackenzie, dejo escapar aire tratando de bloquear mi deseo, su rostro está sonrojado y sus labios hinchado invitándome, gruño de repente acercándome a ella. Mackenzie parpadea varias veces seguidas buscando aire.
—Ewan...
—Solo quiero que te dejes llevar. La beso —Ewan ... — jadea mientras la beso por el cuello voy descendiendo hasta sus pechos, la tome desprevenida la cargo y la colocó en la cama, la beso en sus pechos los reclamos mientras ella gime sus gemidos es la cosa más hermosa que he escuchado. Voy descendiendo ciento como ella separa sus piernas invitando con su cuerpo a que la posea, la miro y en sus ojos están oscurecidos, está tan excitada igual a mí la desnude por completo, i ropa desapareció en segundos miró su cuerpo sus pezones están rojos por mi asalto, sin aire me inclino en su estómago dejando besos húmedos en su piel siento como tiembla al sentir mi aliento en su piel. Llegó a su punto del placer, y el aroma de Mackenzie me vuelve loco. La boca mía se me hizo agua estaba loco por estar en su sexo, pase mis dedos por su sexo arqueo la espalda y gimió
—Ewan...— La bese sentí como tembló de placer la lamí, chupe daba leves mordidas, se estaba resistiéndose agarre sus caderas gemía mientras me agarraba por los hombros sus caderas tomaron vida propia con movimientos sensuales cuando escucho que gritó su nombre la chupo con fuerza supo que había llegado al orgasmo. Al escucharla casi si corre por sus gemidos tan sensuales. La dejo de torturar y la miró estaba sudada. — Ven aquí te voy a hacer mía —su mano choca con mi pene —Joder mujer vas a matarme. —Ella me mira y toca mi pene pasa su dedo en la punta de mi pene y siento que todas las fuerzas abandonan mi cuerpo.
-—Por los dioses —gimo al sentir su toque con la mirada voraz y hambrienta de deseo - separa las piernas reina mía. Hablo excitado ella hace lo que le dije estoy temblando me acerco a ella si no la penetro ahora creo que me voy a volver loco. Gateo y me coloco sobre ella si soltar mi peso sobre ella. Cuando nuestros sexos se juntan todo mi cuerpo tiembla voy entrando mi grueso miembro.
Siento como se tensa al llegar a la barrera, la miro ella asiente de manera tierna, la penetro siento como solloza por la intromisión, sus músculos se aferran con fuerza a mí. Se quedó unos minutos respirando con dificultad. Después de segundos me muevo ella me sostiene con fuerza. Su interior es caliente joder, no voy a durar mucho me deslizo de adentro afuera
—Ewan no puedo más... al escuchar mi nombre salir de sus labios mi cuerpo se sacude con violencia
-Tengo que decirte algo que me está matando Mackenzie - vamos a corrernos juntos después de esto. -Te amo. Joder Mackenzie te amo — córrete —su cuerpo tiembla mientras me araña la espalda ella alcanza su placer
-— Yo también te amo Ewan. —Al escucharla decir eso mi cuerpo sufre una descarga mi corro con fuerza - Por freyja! Digo para caer encima de mi esposa respirando con dificultad nuestros cuerpos están temblando por la emoción del momento. Me acuesto a su lado y la abrazo ella se acurruca pone su cabeza en mi pecho. Suspiro feliz por el hecho de que ella me ama.
— ¿Ewan en verdad me amas? Pregunta. — Con toda mi alma mi Reina, la beso dejando ese juramento que solo el cielo y las estrellas son testigo
hola, mis amores
voten y comenten
Gracias a todas estas personas que se han convertido en mis seguidores. No le he podido dar la bienvenida como sé hacerlo.
Pero, bienvenidos
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La Legítima Reina De Escocia (Errores)Saga Reinas Del Clan Cameron #1
RomanceImperios han caído bajo el filo de mi espada, los he reducido a cenizas, he puesto a pueblos entero de rodillas, reyes me han suplicado clemencia por su vida. He ganado incontables batallas para beneficio de mi reino, he demostrado que lo que se dic...