El destino insistía en unirnos, pero el camino estaba plagado de obstáculos.
Una historia de amor y pasión (+18🔥)
¿Qué dicen, me acompañan? Es mi primer historia 🤧 aaaah.
No se aceptan copias ni adaptaciones.
07:05hs (am) Me despertó el sonido de una alarma (era de Ashley). Miré que hora era en mi celular y decidí que dormiría sólo un poco más, o eso pensé. Ella entró al cuarto de una manera muy ruidosa, chocando una de mis maletas, sólo para decirme que se iba a trabajar y que había una copia de las llaves en la maseta del girasol que estaba al lado de la puerta, del lado de afuera.
08:30hs (am) Salí a tomar café en el balcón. Observando lo bello que es Seúl. Mientras disfruto de una suave brisa de aire fresco, que de a ratos roza mi rostro con delicadeza y frescura. Tanta belleza me inspiró a querer tomar algunas fotos, ya mañana buscaría un empleo, hoy sólo quiero recorrer la ciudad y tomar muchas fotos bonitas. Para mi buena suerte, a unas pocas cuadras del departamento de Ashley, hay un bonito parque que quiero recorrer.
09:00hs (am) Buscó algo cómodo para ponerme y me decido por unos jeans claritos, de tiro alto. Unas botas cortas de color negras, que tienen un muy bonito tacón. Un top blanco de mangas largas con un saco no muy largo, de color rosa potente.
Me cuelgo mi cámara al cuello, y de salida me llevo también mi mochila de charol negra, con mi celular dentro y algo de dinero. Nunca se sabe cuando te va a dar hambre.
09:30hs (am) Por fin llegué al parque y me tuve que comprar una botella de agua porque moría de sed. Me senté en una banca exhausta, al parecer el parque no estaba tan cerca como creí, por lo que tuve que caminar un poco más de lo que pensé, pero no me importó. Valió la pena, es un parque de ensueño, hay muchos árboles y vi que hay una parte dónde sólo hay árboles de cerezos, y yo amo ese tono rosado que tienen.
Me puse a caminar e iba tomando fotos, el sol estaba en su mejor punto, dando unos tonos de luz muy bonitos, ideales para tomar unas muy buenas fotos. En eso, veo un grupo de chicos riéndose, por el lente de la cámara, ellos parecen muy cercanos y verlos me hace pensar en que si tendría que usar una foto para representar lo que es la amistad, definitivamente mostraría esta hermosa foto que les acabo de tomar.
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Me pongo un poco tensa cuando siento a alguien detrás de mí, tocando mi hombro.
—¿Qué haces?—su tono de voz no era para nada cálido.
—Na-nada—tartamudeo—, sólo tomaba una foto.—viré y me encontré con un chico mucho más alto que yo. Bueno, todos son más altos que yo. En fin, tenía una expresión neutra, que de igual forma infundía algo de miedo. Su piel parecía porcelana, tan blanca como la mismísima nieve. Sus ojos eran más bien pequeños y rasgados. Su cabello era de un tono menta claro y su voz era fría. Por su ropa parecía un rapero, iba todo de negro.
—¿Umm?...¿Y, por qué tomas fotos de extraños sin pedir permiso? ¿No sabes qué es de mala educación, y que existen personas que realmente se molestan por esté tipo de cosas?—su mirada estaba fija en mis ojos.
—L-lo siento, sólo quería que fuera una foto espontánea, si preguntaba iba a perder ese perfecto momento.—vi que los otros seis chicos, que antes estaban riendo, ahora se dirigían hacia acá. Eso aumentó mis nervios, no vine a buscar problemas.
