No sabía si pronunciar palabra o dejar que ellos hablaran. Debido a que ninguno habló, me dispuse a hacerlo:
- Harry,¿ te imporatía acompañarme fuera?
Sin siquiera mirarme se levantó y andó hacia fuera, dubitativa miré de reojo a Zayn quien tenía clavados sus ojos en la espalda de Harry. Casi había llegado a la puerta por lo que andé deprisa, se estaba girando a encararme desde el pasillo en el momento en que estaba cerrando la puerta del dormitorio de Zayn. Le observé, tenía la mandíbula totalmente rígida, su cuerpo en tensión y sus nudillos comenzaban a ponerse blancos por segundos debido a la fuerza ejercida de sus manos en puños.
- Harry yo..
- Alice, me has hecho quedar como un imbécil, y, lo peor de todo es que la culpa es mía.
- ¿Qué?
- Me has utilizado para acércate a Zayn.
- ¿Qué? No harry eso no es así.
- No, claro, ¿por eso me pediste que me lo llevará para salvarlo a él? ¿Yo te importaba un comino? Eres como todas las jodidas putas de este lugar.
No podía creer lo que acababa de pronunciar, las lágrimas quemaban trás mis ojos.
- Eres un mierda. ¿Te crees que no quería salvar tu vida también? ¿Qué no me has importado? Pues te equivocas. - me acerqué a él - Y que sea la última vez que me llamas puta o juro por dios que
- ¿Qué? - me miro hecho una furia y se acercó aún más a mí -
- Arg, vete a la mierda.
Me giré y en el instante en el que estuve dándole la espalda las lágrimas surcaron mis mejillas hasta caer por la cascada de mi mandíbula. No podía creerlo, que piense que soy una jodida puta, o sea me ha llamado puta, increíble. ¿Quién se ha creído qué es? Necesito salir de aquí, o voy a pegarle a alguién, dios necesito... necesito... ¡eso es! buscaré un gimnasio, pegarle a un saco de boxeo me hará quitarme esta rabia y perder un cuantos kilos. Dos pájaros de un tiro. Corrí escaleras abajo, irrumpí en mi habitación, rápidamente cogí mi cartera y las llaves de mi camioneta. Cerré la puerta y eché a correr hacia el aparcamiento.
Me hallaba en el pueblo buscando aparcamiento, mirando de un lado a otro mientras tarareaba escuchando la radio. Entonces al fin encontré uno. Trás aparcar, anduve en busca de una tienda para comprar ropa deportiva y una vez realizada la compra pregunté por un gimnasio a la dependienta quien amable me indicó uno que no estaba a mas de 500 metros. Tras tres minutos andando lo encontré, en la fachada se encontraba un cartel negro con letras blancas que decia 'gimnasio mixto' vaya, tendré que aguantar ver más tios, quienes son unos idiotas inaguantables. Entré decidida y me tope con una recepcionista alojada en un mesa pequeña.
- Buenos días, ¿en que puedo ayudarle?
- Buenos días, me preguntaba si tendrías sacos para boxear y pudiera practicar un poco.
La chica me miro un poco extrañada pero me respondió:
- Si, pero para realizar cualquier actividad en nuestras instalaciones tendrás que abonar la cuota mensual de 32,45 euros mensuales. Tenemos a disposición entrenadores personales para cualquier actividad que entra en dicho precio y duchas con vestuario.
Le sonreí y le entregué mi tarjeta de crédito proporcionada por Travis. ¡Oh, Travis! Una vez que me relaje un poco volveré para hablar con él. En el transcurso de mis pensamientos ella terminó su labor, me entregó la tarjeta y formularió para rellenar con mis datos personales. Lo rellené y lo entregué.
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Eres la elegida {Zayn Malik}
Fanfiction¿Te atreves a adentrarte en esta historia de romance mezclada con suspense, terror en algunas circunstancías y dolor? ¿Saldrás ilesa de ella tras haberla leído? ¿O volverás a la realidad con un toque de ella? Compruebalo. Te invinto a averiguarlo...