Los muertos ꞤO sienten

COMIENDO EL CEREBRO DE...

Cuando por fin entre a lo que una vez fue KFC, Kai se estaba comiendo a una chica que se encontraba bajo la puerta, el no quiso desperdiciar sus fuerzas en entrar y posiblemente morir, si es que se puede llamar asi. Arrastro el cuerpo de la chica hasta llevarla a la orilla de la calle, mientras otros lo seguían. Los muertos que venían con nosotros estan tratando de subir a unos juegos infantiles para alcanzar a dos humanos, por el ruido de las balas habían atraído a más e intentaban acceder por las ventanas golpeándolas una y otra vez. Mire de reojo cuantos humanos habia, mi vista viajo desde la chica pelirroja quien estaba junto a un chico rubio, un chico cerca de la puerta y dos un poco más alejados casi por el mostrador.

Al final de todos los golpes las ventanas se rompieron y dejaron entrar a unos cuantos más muertos, asi que me apresure para poder ver conseguir algo de comida. Oler la sangre derramada y escuchar como los huesos se rompían me excitaba demasido, arrastraron al chico rubio hacia al suelo y comenzaron a azotar su cabeza y morder sus piernas y brazos. Di marcha hacia ellos, pero entonces vi al chico de cabello castaño disparar hacia los otros y me detuve, no porque tuviese miedo de por fin morir en ese momento, si no por el hecho de observar su delgada figura y manejar a la perfección una arma de tal calibre. Sus mechones de cabello estaban pegados su frente debido al sudor, podía escuchar su corazon acelerarse demasiado rápido pero aun si no se detenía, sus finas manos cargan balas y apretaban el gatillo como si esto fuese una especie de instrumento musical. No podía resistirme, dentro de todo mi cuerpo sentí algo en el pecho que me alentó a caminar hacia él, quería deslizar mis ásperos dedos sobre su piel, oler su aroma, acariciar su cabello, incluso decirle algo pero alguien más me disparo en el hombro por la parte de atrás y eso me molesto demasiado, haciéndome girar.

Tomo las piernas del chico que estaba arriba de la mesa, y cae al suelo, trata de levantarse pero jalo su cabello y la cabeza golpea contra el azulejo hasta dejarlo inconsciente y romper su cráneo. No me siento satisfecho con lo que hago, una parte de mi tiene culpa porque sabe que esto es incorrecto, pero son ellos o nosotros, en mundo es asi ahora, ambos sabemos que solo un "equipo" saldrá de pie de este sitio.

Cuando porfin se rompe su cráneo, tomo un pedazo de su cerebro y meto a mi boca, desperdicio todo el cuerpo solo para poder tener ese órgano, lo cual las personas deberían estar agradecidas, no van a levantarse y convertirse en un monstro como yo. Mientras mastico, puedo sentir sus emociones, sus gustos y miedos, pequeños fragmentos de su vida ahora puedo experimentarlo, "Lucas" era su nombre. Veo como esta con sus padres y muchas personas cantando "feliz cumpleaños" frente a un pastel de color azul y una vela con el número 7. Tambien como llora al perder a su perro, y el consuelo que recibe por parte de su padre, siento sus nervios al mirar al chico frente a él en un escenario mientras canta. "Hola, Soy Byun Baekhyun" se presenta el más pequeño y le da su mano regalándole una sonrisa. Tambien los castos besos que le da al chico de cabello castaño, las peleas y discusiones, incluso golpes, "Eres un idiota Lucas" le grita una vez más "¿Estas tratando de matarnos? ¡Como planeas decirle a su madre que murió en su primer dia fuera de este muro!" "No funciona, esto se acabó" "Baek porfavor... porfavor" Puedo sentir su dolor, su pena, no me siento mal ahora, en definitiva el chico era un completo imbécil pero aun asi me siento agradecido por experimentar estos sentimientos, sentir su felicidad, su arrogancia, una pequeña tristeza, gracias por hacerme sentir más miserable... gracias... por darme un poco vida joven Lucas, descansa en paz... tu batalla ha terminado.