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COMO SOPHIA HABÍA PROMETIDO, CADA LUNA LLENA ESTUVO AHI, cuando el sol salía ella ya se encontraba presente en la casa de los gritos para cuidar y mimar un poco a Remus. Lo cubría con su capa y acariciaba su cabello hasta que despertaba. Con los meses ambos se habían acostumbrado a esa extraña rutina. Sophia los fines de semana iba a Hogsmade para comprar los ingredientes para las pociones nutritivas y había comenzado a indagar en las curativas, especialmente para el dolor, aunque no se lo había mencionado a Remus, posiblemente si lo hacía, él entraría en una de sus crisis dónde siente que no vale la pena tanto esfuerzo y ella no quería escucharlo insultarse a si mismo. Él ya se había acostumbrado a verla con sus cabellos revueltos, que finalmente se transformaron en una coleta alta y mal hecha, a su ropa casual y cómoda, con zapatos planos. Lo cual por si solo era lo suficientemente raro, el hombre lobo ya se había acostumbrado a la estatura de la rubia, quien le llegaba hasta la altura de sus ojos, claro que nunca había tomado realmente en cuenta, que sus pies siempre estaban sobre tacones que con tanga agilidad había aprendido a usar desde que era una niña. Sin esa altura extra, su mentón podía apoyarse fácilmente en su cabeza.
—Te estás transformando en un poste de luz, no es por mis tacones.
Él soltó una pequeña risa antes de quejarse adolorido. Ambos estaban en la enfermería, como ya era costumbre. Remis también había sentido ese repentino crecimiento en su cuerpo, en solo cuatro meses de ingresar a la escuela, sus pantalones y ropas le comenzaban a quedar chicos, incluso ya había pasado a Sirius, quien siempre fue el más alto del grupo.
Con una pequeña sonrisa, ella decidió que era hora de dejarlo dormir un rato, como siempre sus amigos eran los encargados de recogerlo y llevarlo a su cuarto. Esa había sido la respuesta de la chica cuando se lo mencionó varios días antes.
Sophia ingreso a su clase de pociones, con el profesor Slughrn. Tomo asiento junto a Andrómeda, había pensado en sentarse junto a Severus, pero si normalmente era irritante, en la clase de pociones no iba a dejar que ni siquiera tocará los ingredientes.
—Hoy aprenderemos a crear la esencia de mutlap. Es un remedio casero para cortes, con propiedades curativas y con un efecto adormecente. Tiene ingredientes muy fáciles de conseguir por eso es una buena opción para hacer en casa, aunque es realmente muy compleja de realizar y recordar.
