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Vacaciones de invierno
SU PADRE NO ESTUVO MUY PRESENTE EN SUS VACACIONES, aunque siempre era muy puntual para la hora del almuerzo y cena, lo que hacía que se mantuviera un buen contacto con la familia. Sophia había hablado mucho con Susan, la hermosa mujer de piel morena y cabello rizado, que siempre la escuchaba atenta. Le hablo sobre los tontos merodesdores, y su pequeña excepción con Remus, le hablo sobre Lilyan y su desdicha con Lucius, e incluso su baile con Sirius. Todas esas historias adolescentes y problemas tontos, hacia que Susan sintiera nuevamente la juventud en ella, compartiendo sobre si Remus la merecía o no, si era un torpe por no darle más atención o incluso si ella debería asistir a Hogsmade ese fin de semana o luciría muy desesperada.
—Escribele, háblale de alguna tontería. Mejor aún, háblale sobre ese libro que te regaló, te responderá más rápido si están hablando de un tema que le interese, si él desea que vayas va a volver a mencionar que irá a Hogsmade, hazme caso, conozco a los chicos.
Hablo con sabiduría su madrastra, quien estaba sentada en la silla de su escritorio mientras pintaba sus uñas con un color morado.
—Yo coincido, y si no lo hace, iremos al día siguiente ambas.
Comentó la pelirroja, acostada a un lado de Sophia. Lilyan había llegado esa misma tarde y las tres mujeres se habían juntado para discutir ese importante tema. Aún así, la rubia decidió contarle el secreto de Lupin, solo a su madrasta, quizás a Prewett le daría miedo convivir con él y terminaría rompiendo el secreto.
Sophia se levantó de su cama, caminando con sus pies desnudos hasta el escritorio, donde saco uno de los pergaminos de hoja gruesa, muy costosa antes de apoyarla en el suelo, sin querer molestar a Susan. Con una pluma de plata en su mano pensó.
—"Querido Remus, antes que nada, quiero agradecer tu regalo de navidad, hoy mismo lo he terminado y consideré que estaría bien escribirte."
Acotó Lilyan al ver las intenciones de su amiga de la cual recibió una mueca inconforme con sus palabras.
—¿No crees que querido es mucho?
Dijo insegura antes de volver al papel y comenzó a escribir, fingiendo seguridad en sus palabras.
