Despierta Ángel [Libro 2] |H.S|

Capítulo 7: Corazón latiendo

Abrí los ojos mientras sentí como las lágrimas de aquel recuerdo volvían a brotar de mis ojos, retrocedí al instante cuando me vi en aquella orilla y la muerte susurraba "solo es un paso más"

—¡Era él!, siempre ha sido el— me dije a mi misma mientras me abrazaba e intentaba consolarme

Me levanté después de unos minutos, mire mi anillo y después sujete mi collar con fuerza, quería arrancarlo de mi cuello, romperlo y tirarlo a la basura, pero era evidente que jamás lo haría. Tome el celular y busque rápido su número, no dude siquiera en marcar y deje que su voz se hiciera presente

—Hope— escuché del otro lado apenas en un susurro mi nombre, sentí como mi corazón latía con fuerza, estaba molesta, exaltada y obviamente no tenia la mínima idea de lo que sucedía

—Vamos por un café— fue lo único que dije, no tardó en contestarme y colgué, anoté la dirección en un papel rosado y comencé a desvestirme...

Estaba por pasar solo el labial por mis labios cuando tres golpes se escucharon en la ventana, pero ni siquiera volteé, solo ignore aquellos golpes y terminé con mi maquillaje, tome el celular de nuevo no sin antes ver la hora y sentir aquel miedo imaginando lo que pasaría. El sonido de mi celular me hizo detener antes de salir de la habitación

—Bueno— dije casi enseguida, había demasiada interferencia, pero logré escucharla

—Hope ya voy para allá, no tardo— su voz paso de ser lo suficientemente fuerte como para escucharla sin el celular a una apenas audible

—¡Pero mamá!, ¿dónde estás? — apenas dije aquello la llamada se cortó, marqué de nuevo angustiada y con los dedos completamente inútiles, la línea ya no parecía estar en zona.

Camine por mi habitación temiendo lo peor, mi celular no tenía mucha carga y yo tenia que pensar en algo que me llevara a mamá, pero no era lo único que me preocupaba, pues por el otro lado se encontraba Harry. Sin pensarlo mas tome mi bolso mas grande, metí mi celular, mi billetera y algo de ropa, sostuve en mis manos aquella pequeña navaja que me había regalado mi padre y la guarde en el bolso de mi chaqueta, me gire intentando salir, pero apenas toque aquella perilla algo pareció hacerme retroceder, no grite, no me moví, solo escuche la respiración que se encontraba detrás de mí y que hacía latir mi corazón desesperadamente

En minutos la sensación de que fuera Harry se desvaneció, pues no sentía que fuera el, ya que el miedo bailaba sobre mi piel y recorría toda la habitación

—¿A dónde vas Hope? — aquel susurro me dejó helada, voltee a todas partes viendo como todo se hacía oscuro, la luz comenzó a parpadear, hasta que se apagó, ahora podía sentir aquel respiro justo enfrente de mi

—Serás mía— deje caer mi bolsa apenas pronuncio esas palabras, recorrí mi vista por la habitación, pero fue inútil, no se veía mas que la leve luz que traspasaba por la ventana y retrocedí hasta sentir la pared detrás de mi

—Hope— escuchar de nuevo su voz me hizo dirigir hacia la esquina a lado de la ventana, justo ahí, donde la oscuridad se mostraba mas penetrante pude ver dos luces iguales a las de Harry, sin embargo, me detuve y decidí llamarlo

—Harry...— susurré más para mí que para aquello que parecía mirarme

—Si cariño, aquí estoy abrázame—sentí como el miedo abandono mi cuerpo un segundo, pero a unos centímetros de aquel cuerpo me detuve, no era el

—Ay Hope, tan tonta— su voz cambio en un segundo y su sombra creció conforme el latido de mi corazón se aceleraba. Sentí escalofríos cuando escuche el sonido de sus pisadas acercándose, pero esta vez no retrocedí, me quede en medio de aquella vaga luz de la luna hasta que sentí el aroma a cigarrillo enfrente de mi