9| Sal conmigo

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C A P Í T U L O 9
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Una casa blanca gigante con las iniciales MKR se encuentra delante de nuestras narices, la cual está invadida por cientos de universitarios en el patio delantero. La música resuena en mis oídos, hay parejas recostadas sobre el césped y vasos rojos volando por todos lados.

Caminamos hacia el interior de la casa y el olor a alcohol inunda mis fosas nasales al estar dentro.

—Iré a buscar algo que hacer. —Denisse habla sobre mi oído y desaparece con Grayson por uno de los pasillos.

Miro incómoda a mi alrededor y definitivamente las fiestas que se hacían en mi antigua universidad no eran nada parecidas a estas. Volteo de un lado a otro y efectivamente, estoy en una fiesta de universidad como las que se ven en las películas estadounidenses. Gente bailando encima de las barras de la cocina, parejas besándose en cada esquina, música que retumba las ventanas y que puede ser escuchada a kilómetros de aquí, hay mesas de billar en la sala de estar, y áreas repletas de juegos de mesa, incluyendo beer pong y sobretodo; chicos tomando alcohol de todas las maneras posibles.

Siento un ligero apretón en mi brazo derecho y mis ojos se encuentran con los de Kyle.

—¿Estás bien? —susurra y siento su aliento fresco chocar contra mi oído.

Asiento y maldigo por venir; sin embargo, recuerdo que prometí venir en forma de agradecimiento hacia él por ayudar a quedarme y por escucharme. Han pasado algunos días desde que le conté una pequeña parte de mi pasado, el sacar lo que sentía dentro de mí fue un gran avance pues no había hablado de la pérdida de mi gemelo y de mi mejor amigo con nadie.

Busco con mi mirada algún espacio desocupado con la intención de no moverme el resto de la noche. Después de algunos segundos encuentro una esquina, busco la mirada del castaño para que me sigua hacia allá, él asiente y comienzo a caminar.

Tomo la correa de mi bolso con seguridad, recuerdo que mi madre siempre me decía...

Cuando salgas a un lugar con mucha gente, toma muy bien tu bolso... aunque no tengas dinero en él.

Río ante el pensamiento y continúo por mi travesía entre las personas para poder llegar a mi destino. Mi diminuto cuerpo choca con los chicos bailando y brincando pero eso no impide que me abra paso entre ellos.

—¡Hey! ¡Hey!  —Grayson mueve su mano de un lado a otro hasta llegar a nosotros—. Denisse y yo jugaremos un partido de beer pong y necesitamos otro equipo, ¿vienen? —Busco la mirada de Kyle implorando que nos salve de esto.

—No hay excusas —Kyle manifiesta al encogerse de hombros con una sonrisa dibujada en su rostro, estira su mano en busca de la mía y mi cuerpo se tensa ante tal acto.

—¿Ni aunque ruegue? —niega con la cabeza y derrotada acepto.

No me toma más de dos segundos entrelazar nuestros dedos para que pueda guiarme, una pequeña chispa de fuego recorre todo mi cuerpo acompañada de un toque de nerviosismo. Intento ignorar este pensamiento y pasarla bien aquí. Con él. Con Kyle.

Grayson guía el camino hacia la mesa en donde una pila en forma de triángulo nos espera con vasos rojos llenos de cerveza. Un chico se coloca en medio de ésta y comienza a dar las reglas del juego, hace los equipos y de un lado de la mesa está Denisse y Grayson y en el otro extremo estamos Kyle y yo.

A través de un beso © [En edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora