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– Son las nueve de la mañana y aun no llega

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– Son las nueve de la mañana y aun no llega... – Dijo un Georgi decaído, de tanta prisa que traía por llegar temprano para evitar los regaños del omega, se saltó el desayuno, ahora su pobre estomago exigía comida y el aun no podía ir a la cafetería a comprar algo porque Yuuri podía llegar en cualquier momento y debía estar presente en la oficina.

– ¿Sera que se murió? – Pregunto divertido Chris, mientras jugaba Among Us es su teléfono.

– ¿Qué opinas de tu omega estrella ahora, YAKOV? Seguramente se atrasó con algún alfa con el que paso la noche – Viktor estaba furioso e indignado ¿Cómo se atrevía ese insípido omega a hacerlo esperar tanto tiempo?

El mayor solo se limitó a ignorar las estupideces de Viktor, sabía que Yuuri tendría una verdadera y justificable razón para llegar tarde.

Otabek no le quitaba la mirada de encima a Viktor. Realmente Yuuri tenía razón al decir que era un incompetente, de su boca solo salían cosas sin sentido – Cuida tus palabras, Nikiforov. Es de Yuuri quien hablas, él no se atrevería a tomar comportamientos tuyos y ponerlos en práctica – Después de la casi amenaza de Otabek, ambos alfas se miraron fijamente y sumamente molestos.

La tensión empezaba a sentirse, feromonas territoriales brotaban de ambos alfas, dispuestos a demostrar su superioridad. En eso, unos pasos rápidos se escucharon, seguido de unas palabras poco entendibles como "Perdón" "Compermiso" "Llego tarde, abran paso". A los segundos, un agitado omega con el cabello revuelto se deshacía en reverencias y disculpas hacia Yakov por su retraso.

– Deténgase, Sr. Katsuki, por favor – Decía Yakov con voz tranquila – Lo importante es que ya ha llegado, pare con las reverencias, por favor.

– Mis más sinceras disculpas, Sr. Yakov – Dijo Yuuri de último, levantándose y tomando la mano que se le era extendida, mientras sonreía sutilmente con las mejillas sonrojadas por la vergüenza.

Al ver el rostro inmaculado y tierno del omega, 3 de los 5 alfas ahí presente tuvieron un sentimiento de calidez en su pecho. Chris, Viktor y Georgi apartaron la mirada discretamente para que el omega no presenciara el sonrojo que atravesaba sus mejillas.

Mientras tanto Otabek... Él solo tenía una sonrisa burlona en su rostro, sabia como Yuuri encantaba a los alfas sin intención de hacerlo. Era más que obvio, a pesar de ser como su hermano, él estaba muy consciente de la belleza que deslumbraba el omega, aunque este intentara evitar eso vistiéndose como alfa.

Los alfas fingieron estar distraídos en otras cosas, Chris volvió a su juego, Georgi fingió leer algo y Viktor se miraba las uñas de manera muy diva.

Yuuri, al verlos aquí, enfureció completamente.

– Bola de imbéciles – Dijo susurrando lo suficientemente fuerte para que los alfas escucharan – ¿¡Qué diablos hacen aquí!? ¡Les dije que a primera hora debían estar entrenando, este yo aquí o no!

★Mi Sexy Detective★ [Viktuuri/Yuri!!! On Ice]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora