The Royal Academy || Larry Stylinson

𝐯ɪ. 𝐂𝐚𝐮𝐭𝐢𝐯𝐨

-Todo está bien, todo está jodidamente bien.

Louis había despertado de pésimo humor gracias a los interminables ruidos que empezaron a sonar del otro lado de su puerta. Aún dormido, Louis notó que al parecer alguien había llegado al piso y no tuvo mejor idea que hacer ruido un sábado. Por lo que ahora el castaño estaba en su cama cubriendo sus oídos con un par de almohadas, pero no sirvió de nada ya que al parecer, el ruido no tenía intenciones de detenerse.

-Es el maldito día libre.- Dijo entredientes.

Se levantó sin dejar de soltar insultos para sí, se sentó sobre su cama tomándose unos segundos para despertar. Al cabo de un instante, Louis cayó en cuenta que el ruido no provenía de algún lugar del piso, sino de su propia sala.

-Jodida mierda.

Desde que llegó estuvo agradecido de que no le asignen un compañero de habitación. Les llamaban habitaciones pero eran en realidad pequeños departamentos que habitaban tres alumnos, tenían tres dormitorios, tres camas, una pequeña sala de estar y un baño compartido. Pero a Louis le gustaba estar solo. No limpiaba a menos de que él lo decidiera, podía pasar días sin dormir y otros, dormía todo el día. No le gustaba tener extraños ocupando su espacio personal o comiéndose su comida.

Abrió la puerta de su dormitorio sin pensarlo, y abrió la boca sin dejar escapar su asombro al presenciar la imagen que estaba frente a él. Un tipo extraño estaba haciendo huecos en su pared para colgar cuadros en ella.

-¿Qué haces aquí?

-Tú debes ser Louis.- El chico moreno y lleno de tatuajes lo miró divertido extendiendo su mano.- Soy Zayn Malik. 

-No te pregunté quién eres, te pregunté qué haces aquí.- El ánimo del castaño estaba empeorando a medida que los segundos pasaban.

-Pues.- Dijo soltando el cuadro que tenía en sus manos, acomodándose en el sofá.- La terraza de este piso tiene la mejor vista así que pedí un cambio de habitación. La Rectora dijo que tal vez necesitabas compañía para adecuarte, así que aquí estoy.

-Entonces puedes decirle que no necesito compañía, ahora volveré a dormir porque ya me despertaste un jodido sábado en la mañana.-Louis dio media vuelta sin esperar respuesta.

-Traigo cervezas y pizza.

Louis giró sobre sí al instante, no vio eso venir. Pensó que nadie comprendería su necesidad de comida chatarra en una academia en la que solo vendían verduras en el menú.

-Continúa.- Dijo con una ceja levantada.

-Estudio música, no danza, así que no te preocupes por las formalidades y la disciplina. Fuera de la academia, somos dos más. Tú eres Louis, yo soy Zayn.- el morocho levantó sus hombros y miró al chico frente a él. 

-No me gusta limpiar.

-Paguemos el servicio de limpieza, eres de familia monarca y yo soy hijo del musulmanes. No preguntes cómo obtenemos el dinero.- Susurró guiñándole al ojiazul que lo miraba con una media sonrisa.

 -Me convenciste.- Esta vez Louis extendió su mano.- Pero que sea la última vez que haces ruido en la mañana.

-Y le diremos a la Rectora que usaremos el cuarto que sobra para crear un estudio, así evitamos que alguien más sea asignado.- Dijo Zayn sosteniendo la mano de su compañero.

-Empiezas a caerme bien, Malik.

Y así pasaron las siguientes horas. Louis ayudó a su nuevo compañero a desempacar sus cosas de las cajas e instalarse en uno de los dormitorios. Zayn colgó dos cuadros en la sala que en realidad, incluso le agradaron al castaño. Tenían símbolos extraños que no comprendía. El morocho era misterioso y eso le gradaba.