• Last Candle • [ Afterdeath ]

10

— Reaper

Ugh...Geno, pensar en ese chico de bufanda carmesí era cómo pensar en el no de una mujer, a veces significa si, otras resulta que en verdad era un no ¡Dios, es tan confuso!

¿Por qué? ¿Por qué?

Solo debería preguntarle

¿¡Qué tan difícil es ser directo!?

— Reaper...

¿Qué es lo que había hecho bien está vez para no desencadenar el desagrado de Geno?

¡Más importante aún!

¿Qué hizo que le gustará tanto al menos unos segundos?

— ¡Reaper!

— ¡E-ese soy yo!

— Por supuesto que eres tú, idiota.

— Ink, eso es cruel.

— ¿Cruel? Cruel es estar aquí parado, hablando como estúpido mientras tu me ignoras.

Bueno, tiene su punto.

Al menos su ánimo ya no está por los suelos, es más, podría decir que se sentía feliz y confundido.

— ¡Lo siento! Solo estaba pensando un poco...

— ¿Geno?

— ¿Quizá? ¿Es muy obvio?

— Tu no piensas Reaper, es Geno o drogas y prefiero la primera opción.

— ¡Ink!

— Lo siento, influencia de Error. Entonces, ¿Qué pasa con él?

— Yo...creo que empiezo a agradarle-

— ¡Genial! Ahora vamos a comer, trato de hacerlo desde hace veinte minutos.

Siendo arrastrado por Ink, Reaper no tuvo mucha más opción que aceptar. Rodó los ojos un tanto rendido, obviamente a Ink no le interesa escuchar algo sobre el, quizá a nadie le interesaba en verdad.

Y mientras toma asiento en la mesa, siente el peso de la culpa ¿Cuántas personas habría molestado contando sobre si mismo?

— ¿No comerás algo?

— Lo siento Dream, supongo que un buen desayuno te llena hasta los huesos.

La cara de confusión en el otro solo hizo más sonora la rosa de Ink, Blue por otra parte solo pudo fingir con amabilidad que toleraba los chistes.

Era divertido, pero realmente se sentía alejado de la conversación que tenían sus amigos, como si estuviera fuera de lugar; incómodo, Reaper desvío ligeramente la mirada, recorriendo todo el salón de la cafetería.

Oh, vaya, está mirándolo fijamente. Tan fijamente sin ni una pizca de vergüenza.

¡Dios! Justo ahora se siente tan juzgado, ¿Qué ha hecho mal?

No puede evitar que una sonrisa nerviosa se haga en él. Tranquilo, solo respira, quizá vea algo atrás tuyo.

Estúpidamente Reaper volteó hacia atrás. ¡No hay una mierda trás suyo!

Ansiedad. ¿Y qué si lo está evaluando?

¿Evaluando para qué? ¿Para ser su pareja?

Eso no suena mal, pero el siempre ha sido tan malo en los exámenes ¡Sus nervios lo traicionaban!

— Reaper. Solo ve y habla con el, Dream está preocupado, cree que te vas a desmayar en cualquier momento.

Le dijo Ink mientras colocaba una mano en su hombro como una muestra de apoyo silenciosa.

— ¡Solo mira lo pálido que está!

Reaper levantó la vista, era tan mal amigo preocupando a los demás.

Nuevamente, la sensación de ser observado hizo que mirara a Geno, su expresión cambio casi al instante. 

¿Estaba molesto? Lo parecía. Sus manos jugando temblorosamente, su corazón desbocado.

— Tal vez Geno consiga que coma algo.

Escuchó decir a Blue, pero la preocupación ahora era más grande. ¿Estaba bien acercarse cuando había hecho algo mal?

Ugh... imaginar que tipo de rechazó recibiría está vez solo aumentaba las ganas de desaparecer de su vista.

Con un empujón suave Berry le animó a acercarse, Reaper solo pudo dar una risa nerviosa para caminar hacia ese chico de bufanda roja.

Qué curioso, la simetría de las figuras en el piso no callaban la ganas de llorar que pesaban en él, ni mucho menos la necesidad de huir.

— Yo, uhm...

— Está bien, siéntate.

Reaper podrían describir como una gran parte de ustedes pensamientos negativos se convertían estrepitosamente en altos niveles de serotonina, en otras palabras, estaba feliz.

Pero allí seguía el miedo, incluso cuando le dió permiso de estar cerca, Reaper mantuvo su distancia y simplemente observó a Geno rebuscar algo en su mochila.

— No has comido nada. Ten esto.

Más que una muestra de amabilidad a Reaper le pareció un poco gracioso que esto pareciera más una orden. Miró curioso el taper frente a él y luego a Geno.

— ¿En serio? ¿Lo hiciste para mí?

Las ideas son más rápidas que su razonamiento lógico, aún así, no le importaba en absoluto, no cuando se instalaba un sentimiento especial.

¿Realmente estaba bien hacerse la idea de ser correspondido?

— No. Error nunca come lo que prepara Fresh, cree que tratará de envenenarlo o algo así después de que accidentalmente romper sus lentes.

Mientras que Geno contaba esto con monotonía, Reaper se cuestionaba seriamente el hecho de tragar o no el mordisco que ya le había dado al sandwich. De todas formas estaba delicioso, aunque no fuera para el.

Poco después de terminar, está vez con más confianza Reaper quería saber, saber ¿Por qué estaba siendo tan amable?

— Yo, uh... Geno ¿Por qué no me haz rechazado hoy?

Con un suspiro rendido, Geno cerró el libro que antes leía y miró a Reaper, su rostro con expresión neutral.

— Porque, no siempre puedes hacerle eso al príncipe de las chicas, me mataran en cualquier momento.

Ah, creo que el sonido de que algo está siendo rasgado viene de él. Pero aún así le devolvió la sonrisa a Geno.

Desde el borde de sus cuencas siente las lágrimas picar, jugar con sus manos no es la mejor manera de huir, pero es lo que tiene.

— Y, si no puedo deshacerme de este estúpido chillido en mi cabeza alejándote, voy a deshacerme de el manteniéndote cerca.

Eso está bien, si él puede ayudarlo con eso está bien.

Una mano de Geno se acercó a su rostro, levantando con delicadeza para darle espacio suficiente a acurrucarse en el hombro de Reaper.

— De cualquier modo, te ves tan bonito.

El aliento caliente chocando en sus vértebras cervicales y sintiendo las falanges de Geno amansar suavemente en su cadera, mareado Reaper simplemente puede pensar que la única estrella que le queda, es la más grande, la que ilumina sus días, su sol.