Susurrale al viento.

Capítulo VII - Es solo un mal sueño, vuelve a dormir

Antes de leer el capítulo, les recomiendo ver primero el vídeo musical , por si no conocen la canción o por si no han traducido la letra de la misma, este será un buen momento para saberla. Luego les aconsejo que la repitan en toda la lectura, pues esta canción es la voz de Remus y su historia.

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Capítulo VII - Es solo un mal sueño, vuelve a dormir.

Remus siempre se consideró una persona paciente, y solo los dioses sabían que así era, pero en este momento, en este preciso instante, sentado enfrente de la oficina de madame Bones, su paciencia era nula, quería tirar la puerta y entrar, preguntar porque demoraban tanto y cuando podría verle. Había esperado tanto tiempo esa maldita reunión, que sin que nadie lo viera o notare, se pellizcaba su pierna para recordarse que no era un sueño, que realmente las cosas estaban pasando, al fin poseería en sus manos la hoja de la libertad de Sirius, al fin podría ir por él y sacarlo de ahí. El tiempo estaba pasando tan lento que cada segundo que pasaba sentado en esa silla enfrente de la puerta, podía sentirse casi como si otro año más tendría que pasar para esperar la respuesta de su liberación.

Cuando vio el reloj de su muñeca para comprobar que no habían pasado más de cinco minutos desde que Severus y Lucius habían entrado en la oficina de Madame Bones, para aclarar los últimos detalles de la liberación de Sirius, es cuando Remus, tomando una gran bocanada de aire por la nariz y expulsándola por la boca, logró con los segundos siguientes, calmar un poco su ansiedad; fue en esos momentos, entre inhalaciones y exhalaciones, que Remus se dio un tiempo para despejar su mente del nerviosismos que sentía, fue ahí más bien en que empezó a recordar cómo llegó hasta donde estaba, como logró tener más de lo que su infantil corazón alguna vez deseó.

Remus John Lupin, actualmente tiene muchos secretos, a pesar de que siempre trata de decir la verdad y odia las mentiras, es un hipócrita por eso y muy bien lo sabe él, pero a veces, la carga de estos secretos es muy justificada para llevar una vida relativamente mejor; uno de eso secretos, el más doloroso, es un secreto que solo Lily Evans y Severus Snape pudieron descubrir.

A pesar de que Remus, compartía casi todo con los miembros de sus dos improvisadas manadas, y ya no le daba miedo decir lo que pensaba, un secreto en específico nunca salió a la luz y lo estaba cumpliendo muy bien pues lo lleva cargando desde hace más de 20 años y aún no se atreve a decirlo, ni ahora ni nunca, morirá dignamente con ese secreto en su corazón.

Remus recordó también, que desde niño fue tratado como un monstruo hasta por sus propios padres durante el tiempo que vivió con ellos, eso era debido a aquella sangre que corre por sus venas a razón de una mordedura maldita, hasta su propio cuerpo rechaza esa sangre que cada luna llena logra hacerle daño; con un suspiro fuerte, Remus recordó que él fue criado hasta los cuatro años con amor, como cualquier otro niño deseado, pero a los cinco años luego de ser mordido, el regalo de sus padres fue un bozal y cadenas, siempre había cadenas cuando la luna llena se acercaba, él lo entendía, aún con su infantil mente, sabía qué hacía daño si no se colocaban aquellas restricciones para él y siempre que miraba a su padre con la mitad de su cara con una inmensa cicatriz de garra, le recordaba que tenía que comportarse y obedecer.

Fue ese el primer gran secreto que guardó y que pocos saben, él había sido mordido por un hombre lobo y ahora compartía esa condición; luego se acumuló otro secreto que fue la culpa, sus padres ya no sabían qué hacer con él, ya no toleraban la carga y estaban física y emocionalmente cansados por eso, y si no hubiera sido por Albus Dumbledore, lo más probable es que lo hayan entregado a una manada de lobos sin siquiera darles el tiempo para comprender porque sus padres ya no lo querían a su lado.