SECUESTRADA POR UN PSICÓPATA | 51

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___ Por tu lado. Dos días después, 2:55 p.m. ___

Según el reloj faltaban tan solo cinco minutos para que Jimin entrara por esa puerta y dejara una bandeja con comida sobre la cama y después saliera sin decir nada. Estaba nerviosa, miraba la puerta y después mis manos con frecuencia, desde hace algunos días que no hablamos y hablar con él si me toma por el pelo. Suspiré profundo hasta tranquilizarme, pero mi corazón se aceleró al momento de escuchar la puerta abrirse. Debo admitir que su comportamiento hacia mí me pone mal, me siento triste con su distanciamiento, siento que he hecho algo mal, y es motivo de que algunas noches no duerma pensando en eso, ¿cómo es posible que después de todo lo que ha pasado siga sintiendo algo por él?. Ese sentimiento no desaparece por más que lo intente, pero para desgracia, no es lo suficientemente fuerte como para cambiar de opinión...

Dejó la bandeja sobre la cama a mí costado y sin decir nada nuevamente, se fue directo a la puerta, no podía dejar que se fuera así porque si, lo llamé por su nombre, y a pesar de que el cuarto no era muy grande se detuvo en medio del camino, o del transcurso de la cama a la puerta. Empuñó una de sus manos y agachó la cabeza, y sin decir nada retomó su camino. Me levanté rápidamente y lo tomé de la muñeca evitando que pudiera dar un paso más. Ahora lo entiendo, se siente bien hacer esto, por eso Jimin siempre me tomaba por la muñeca, te sientes con poder, okay Tn concéntrate. Trató de zafarse de mi agarre pero ejercí más presión en él. 

Tú: Jimin... no me ignores. -dije suplicante- Por favor.

Jimin: Suéltame Tn. -dijo neutro-

Después de tanto tiempo... ok no. Después de varios días pude escuchar su voz. Era ronca, una voz gruesa, diferente a la de antes. Lo miré sorprendida, solo cuando estaba molesto o frustrado me llamaba por mi nombre. 

Tú: Jimin mírame. -me ignoró- Jimin. -volvió a ignorarme- Jimin te estoy hablando. -alcé un poco la voz, pero simplemente volvió a ignorarme- ¿Por qué me ignoras? -dije con un nudo en la garganta- No solo me ignoras a mí. -esta vez me miró confundido-

Tomé su mano con delicadeza y la llevé hasta mi vientre, bajó su mirada hasta este y observó melancólico. Veía como su futuro hijo de tan solo apenas unos dos meses en el vientre había crecido. Levantó su vista hacia mis ojos, hicimos contacto visual pero lo rompió inmediatamente.

Jimin: Lo siento. -se zafa de mi agarre y comienza a caminar-

Tú: ¿Ya no me amas acaso? -dije y paró en seco- ¿Ya no sientes nada por mí como solías decirlo?

Jimin: Es por eso que no te hablo Tn. No quiero ocasionarte más daño, es mejor así. -dijo dándome la espalda-

Tú: ¡Entonces déjame ir Jimin!, ¡si no quieres causarme más daño solo déjame ir!

Jimin: ¡No puedo Tn! -me mira- No puedo....

Tú: Si puedes pero no quieres. -me crucé de brazos- Tan fácil que es hacerlo.

Jimin: Si estuvieras en mi lugar no dirías lo mismo. -sale de la habitación-

___ Por otro lado. 5:20 p.m. ___

La chica esperaba con una copa de vino rojo en su mano izquierda. Ansiosa por lo que podría pensar su muy futuro aliado. Tenía un solo objetivo, no permitirle ser feliz, si ella no podía serlo, la otra tampoco lo sería. Dio un corto sorbo a la copa de vino y siguió esperando de piernas cruzadas sobre aquel sillón tan fino pero no muy costoso. El sonido de un auto al estacionarse hizo que se le formara una sonrisa de lado en el rostro. Venganza, era lo que quería, lo que soñaba, lo que más anhelaba. Las llaves de la casa provocaron un sonido para después la puerta ser abierta y mostrar a quien esperaba con ansias desde hace unos treinta minutos. Tal vez lo había perdido todo por la culpa de una persona en especial, pero las ganas de la venganza, el capricho, las ganas de tenerla, eran más grande que nada. A pesar de todo se había obsesionado y la quería justo a su lado. Como debió haber sido desde un principio, como debe ser. Quería arruinarle la vida a quien la apartó de su ser, y su más grande oportunidad estaba frente a él, las oportunidades solo pasan una vez en la vida, dicen. Así que no debía desaprovecharla esta vez.. Ya la conocía, ya habían hablado en reiteradas ocasiones, en el pasado, cuando Kim perdió lo que hacía el contrato entre las dos empresas, fue ahí, cuando se creó una estrategia, no estaba dicho, no había nada que lo asegurara, pero de algo estaba seguro, todo comenzaría desde ahora. 

Los dos buscaban lo mismo, uno buscaba arruinarle la vida a la persona que se lo arruinó primero, y el otro buscaba tener a su lado, lo que le arruinó la vida, lo que le quitó todo. Era un mismo objetivo, y la satisfacción sería para los dos. Tal vez una vez ganaron la batalla, pero la guerra es muy larga. Esto no había acabado, tan solo empezaba. Sonrió de lado y tomó asiento frente a la antes mencionada y tomó una de las copas puestas en la mesa. Las alzaron en brindis y dieron un sorbo a estas. Sonrieron con malicia, se decían todo con la mirada. Todo lo que pensaba haber construido y logrado su contrario se estaba por desmoronar.

Jonathan: Hola, señorita Kim.

___ Por tu lado. Narra Jimin, 10:47 p.m. ___

Jungkook: ¡Eres un imbécil! -grita molesto-

Jimin: Gracias, ya me lo dijo Taehyung también.

Jungkook: ¿¡Es que cómo pudiste Jimin!?, ¡es tu novia!

Jimin: Mi mujer.

Jungkook: ¡Peor aún!, ¡eres un completo idiota y de los bien hechos!

Jimin: No juzgues si no sabes lo que hice.

Jungkook: ¡Claro! -dijo entre dientes con una sonrisa completamente forzada- ¡Solamente te acostaste con la enemiga número uno de "tu mujer", la persona a la que supuestamente "amas" y que nunca "engañarías" o "traicionarías", porque no quieres causarle daño!. ¡Le fuiste infiel imbécil!

Jimin: No hubo sentimientos en eso Jungkook.

Jungkook: ¿¡Entonces, por qué carajo te acostaste con ella!? -dijo entre dientes con frustración-

Jimin: Debemos conocer a nuestros socios de los pies a la cabeza.

Jungkook: Ah si..... y cuando tienes sexo con ellos lees sus pensamientos ya que eres Visión de los Avengers, después de todo, tener sexo con ellos te ayuda a generar confianza y saber lo que piensan. Muy lógico. -dice sarcástico-

Jimin: En cierta parte tienes razón. Generas confianza, y logras sacar información. Solo fue una vez, y no volverá a pasar.

Jungkook: Una vez, una vez. De verdad que eres un sin vergüenza Jimin, esa vez, puede lastimar a Tn. Después de todo está esperando un hijo tuyo, cuyo hijo se formó debido al amor que se tienen, o tenían, porque después de todo lo que haz hecho no creo que te siga amando.

Jimin: ¿A si?, ¿y qué me recomiendas que haga? -dije molesto-

Jungkook: Que la dejes ir Jimin. -dice sincero-

Jimin: ¿Qué? -dije sorprendido-

Jungkook: Es hora de que la dejes hacer su vida de una vez por todas. De nada sirve que la tengas aquí si el sentimiento no es mutuo.

Jimin: No puedo dejarla ir Jungkook... -dije con la mirada borrosa-

Jungkook: Si puedes Jimin. Lo que pasa es que no quieres. Si de verdad la amas déjala, déjala ser feliz. Deja que rehaga su vida, su propia vida. Lo mejor es que te alejes de ella, para que sea feliz. Cuando amas a una persona su felicidad es la tuya.

Jimin: ¿Tú crees que sea lo correcto?

Jungkook: Si. Es hora de que la dejes libre Jimin.

PODEMOS FINGIR QUE NO NOS DUELE, PERO SABEMOS QUE HASTA LAS COSAS MÁS PEQUEÑAS PUEDEN DERRUMBARNOS. AHORA IMAGÍNATE PERDER LO QUE MÁS TE IMPORTA...

-Anónimo

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𝐒𝐞𝐜𝐮𝐞𝐬𝐭𝐫𝐚𝐝𝐚 𝐏𝐨𝐫 𝐔𝐧 𝐏𝐬𝐢𝐜ó𝐩𝐚𝐭𝐚. 𝐏𝐚𝐫𝐤 𝐉𝐢𝐦𝐢𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora