1| El regreso a clases

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La vuelta al colegio, sinonimó de regresar al infierno. Odio tanto el colegio y a toda la gente que va. Siempre observo a los grupitos y me dan ganas de vomitarles a algunos en el medio de la frente. Por ejemplo.

Estan las populares, obvio. Son un grano en el culo, literalmente siempre buscan la manera de provocarme y termino peliando con alguna de esas rubias mal teñidas de vez en cuando.

Despues tenemos a los emos o punks, como les quieran llamar. No son tan malos pero su rarez tiene que tener un limite. Recuerdo en primer año que los encontraron haciendo un ritual en el baño de las mujeres, osea WHAT!?, si estan mal.

Despues los "play boys" así se hacen llamar los idiotas. Se creen basicamente Brad Pitt y son más feos que pisar caca. En fin, la hípocrecia.

Y despues estan los grupitos solitarios que ahi entro yo. Y algo que amo es estar sola, en realidad tengo amigos pero no dentro del colegio, ellos van a otros. Mejor.

Bueno regresando a la realidad, estoy acostada en mi habitación. Ya preparada, bañada y con mis dientes limpios. Tengo que bajar a desayunar pero no tengo muchas ganas. Mi mamá nunca esta asi que no se puede enterar que no lo hice.

Miró el reloj de la habitación y son las 7:38 de la mañana. Mi colegio es de jornada extendida. Asi que estoy desde las 8 de la mañana, hasta las 5 de la tarde. Es muy agotador e abrumador. Pero en realidad me gusta la rutina, estar muy sola aveces puede hacer mal.

*******

Estoy en mi camioneta llendo al colegio, la verdad es que no quiero ir pero tendria que empezar a esforzarme para terminar el año.
Mi camioneta es una Jeep, color negra. Es un regalo de mi madre que trata de "compensar" el tiempo que me deja sola. La verdad no me molesta estar sola, así que con gusto me siga compensando.

Despues de diez minutos llego, me estaciono en un lugar libre, y antes de bajar arreglo mi uniforme.
La verdad es que mi uniforme me encanta. Es una camisa blanca, con una pollera negra y una chaqueta negra.(imagen en multimedia).
Cuando bajo lo primero que mis ojos ven son a las rubias pelo quemado. No posta, parecen que les queman en pelo en la peluqueria y tambien las pocas neuronas que tienen.

Aprieto mi bolso que esta sobre mi hombro y empiezo a caminar rumbo a la primera clase. Voy caminando por el pasillo, hay tanto alboroto y ruido.
Una que otra persona me asiente en forma de saludo y otras me saludan. Aunque no sea muy social hay gente que le caigo bien y ellas también a mi. Pero no hasta el grado de decirnos amigos.

Entro a mi aula y voy hasta el fondo, me siento en mi silla poniendo mi bolso en la silla de al lado, nadie se sienta conmigo nunca asi que cero preocupaciones. De a poco se va llenando el salon y veo muy pocas caras nuevas, aunque sinceramente me da igual. Es el ultimo año asi que nada puede arruinarmelo.

—Buenos días alumnos— dice entrando el profesor de literatura.

Todos le devolvemos el saludo perezosamente. Y nos mira y niega con la cabeza, y acomoda sus cosas.

— bien alumnos, abran sus libretas.. hoy como es el primer día vamos a empezar hablando sobre la comunic— no termina de hablar por qué se escuchan dos golpes desde la puerta.

El profesor camina pesadamente y con mala cara abre.

—Hola. El director me mandó aca— habló una voz de hombre desconocida.

— La proxima decile al director, que no pueden llegar tarde a mi clase ¿ok? —abre la puerta completamente — Pasa. Y sientate al lado de la señorita Kopelioff.

El chico desconocido entra, y se pueden escuchar todos los suspiros y grititos ahogados que sueltan todas la chicas, sobre todo las quemadas.

Yo bajo la vista hasta mi cuaderno y copio la fecha.

— Kopelioff.—dice el profesor.

Levanto levemente mi cabeza y miró me sorprendo a ver un chico lindo al lado del profesor. Con razón tantos suspiros, aunque exageran.

—¿Si? — le pregunte levantando una ceja.

— El señor Bernasconi sera su nuevo compañero de asiento. Saque sus cosas de ahi.— le dió un empujon al chico para que se valla a sentar en el asiento que esta a mi lado.

Yo pongo mi bolso a un costado mio y miró al pizarrón. El chico nuevo acomoda sus cosas y se sienta.

El profesor comienza con la primera clase. Escucho atenta lo que dice y anoto todo lo que creo que me sirviria.
Miró a mi costado y el chico nuevo me mira tambien. Veo sus hermosos ojos color avellana, tiene la cara totalmente moldeada y unas cejas muy pobladas. Tiene una expresión de aburrimiento en su cara, y cuando nota que lo miró mucho levanta una ceja. Yo reboleó los ojos y concentro mi vista al frente, aunque siento la penetrante mirada del chico desconocido que esta sentado a mi lado.

Jamás creí en el amor..-AGUSLINADonde viven las historias. Descúbrelo ahora