DESTINY - Karmaland #Lazos1

25

2 Mes

- No me gusta esto de estar embarazado - dijo por quinta vez en la semana- No dejo de estar caliente por cualquier cosa y tú no me ayudas con eso...-

-Ya falta poco para que nazca- rió Samuel ante el puchero de su pareja- Cuando Venus esté con nosotros te voy a mimar mucho más de lo que ya hago- posó un suave beso en la frente del menor- Por cierto, te he traído las pinturas que me pediste- señaló una bolsa arriba de la mesa de café ubicada en la sala-

-¿Veg?- El alfa notó mucha angustia y duda emanando del omega- ¿Crees que seré capaz de ser un buen padre para ella?- preguntó tocando su barriga- Me aterra pensar que puedo fallar...- los ojos de Rubén se llenaron de lágrimas-

- Yo afirmo que lo serás, cuidarás de nuestra pequeña como un tesoro... - Samuel tomó el rostro del rubio entre sus manos- Uno no nace sabiendo, se aprende en el camino... Ya verás que serás el mejor-

3 mes

El cielo se pintaba con colores oscuros, carentes de vida... ¿Como era posible que algo tan bello como la existencia misma pudiese desaparecer como polvo? Las lágrimas no paraban de bajar por las mejillas de Rubius.

Ubicados en el cementerio, todos reunidos para despedir a un alma hermosa y una luz que brilló hasta que se apagó. La madre del omega acababa se fallecer.

Luzu abrazó fuertemente a su amigo intentando calmar su llanto, Auron miraba el cajón siendo enterrado en silencio, lleno de pena por no haber podido hacer mucho con su paciente... Samuel también estaba en silencio, siendo apoyado por Willy, su mejor amigo y unos cuantos más.

El corazón de Rubén se oprimía en dolor, su madre era su vida y ya no la tenía... Entonces recordó las sabias palabras que aquella mujer alguna vez le había recitado. Su vista se fijó en el gris de las nubes, aquellas insignificantes gaseosas que parecían saber de la pérdida fatal...

- "La vida no acaba, se transforma" - susurró para sí mismo- Te voy a extrañar muchísimo- le dedicó una sonrisa triste a aquella lápida de piedra- Algún día te traeré a mi pequeña para que la conozcas aunque... Prometiste que me acompañarías desde lejos-

Pequeñas gotas de lluvia comenzaron a descender del cielo, todos abrieron sus paraguas y miraron una última vez más el cementerio, dejando sus pesares y abandonando el lugar en donde los muertos se dedicarían a reposar... La mano de Vegetta tomó la de Rubius fuertemente, juntos dejaron el lugar prometiendo regresar seguido a visitar.

5 mes.

- ¡Es precioso! - Exclamó el omega al presenciar la frágil figura del bebé recién nacido- Luzu, que tu niño es bellísimo- le sonrió a su amigo quién reposaba en su camilla- Me sorprende viniendo de alguien tan feo como Auron- Rió de broma-

- Fred es mi pequeño muchachito - Sonrió con orgullo el omega castaño- y el de su padre... - Luzu rió con amor al ver a su pareja dormida a su lado-

Auron había pasado toda la noche velando por su hijo y su esposo, no pudo pegar ojo hasta que vio que todo estaba en su lugar... Él más que nadie estaba asustado pero al ver los hermosos ojos grises de su pequeño supo que aquello iba a salir bien, que a lo mejor ser padre no le iba mal...

- ¿Cuánto te falta a ti?- preguntó Luzu a su amigo- Debe de faltar poco viendo tu barriga-

-Unas semanas- sonrió Rubius aún con su vista en el recién nacido- Tengo muchos nervios por como va a salir todo... Estoy asustado de cojones pero Samu dice que todo va a ir bien-

-No puedo esperar a ver a la pequeña Venus, yo se que ella y Fred serán buenos amigos, ya lo verás- Ambos asintieron imaginando las figuras de los dos bebés jugando juntos-

La puerta de la habitación sonó y a continuación entró una enfermera para avisar que la hora de visitas estaba próxima a acabar... Rubén se despidió de Borja, del pequeño y abandonó el lugar para reencontrarse con su pareja....

Venus estaba en camino, su amigo estaba felíz con el pequeño que había tenido y su relación con Samuel iba perfectamente bien...

Parecía que todo iba en buen camino, salió al estacionamiento y miró al cielo, el sol se estaba ocultando en el horizonte, los pájaros volaban en el cielo y pequeños corrían por las calles mientras jugaban.

- No puedo esperar a conocerte -Le habló a su barriga, como muchas otras veces solía hacer- Tenerte en mis brazos- Tocó su abdomen ya hinchado-

-¡Cariño!- Saludó su alfa al verle- ¿Hablandole a la pequeña sin mi?- le hizo una pequeña escena de papá celoso pero a continuación ambos rieron ante aquello- Venga, vamos a casa-

[...]

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Fred 🥺