XV parte 2

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La pelinaranja despertó a causa de su estúpida alarma. Sino fuera porque era su celular, ya la hubiese estampado contra la pared para dormir un poco más. Aunque ya había aplazado la alarma varias veces y, a pesar de que estaba llegando tarde, poco le importó.
Sentía como si un tren hubiese pasado por encima de ella millares de veces, tal vez esa estúpida diarrea la había consumido todo.

— ¿¡Ocho y media!? — gritó cuando finalmente vio la hora en su celular sin poder creerlo, sabia de sobra que era tarde, pero no pensó que podría ser tan tarde.
En su mente pasó la idea de faltar, pues el director y los profesores ya estaban al tanto de lo sucedido con ella y no tenía problema alguno con ello, si no fuera porque había faltado casi toda una semana y los trabajos de la universidad no se harían solos.

A paso veloz se dirigió al baño, se enjuagó los dientes solo con agua, ató su cabello en una coleta mal hecha, se puso lo primero que encontró; un pantalón muy desgastado que parecía pertenecer a un vagabundo junto con una sudadera más grande que ella y unas converse, desgastadas sucias y rotas. En fin, toda una pordiosera.
Agarró sus cosas de la universidad y salió disparada hacía su destino.

Ese día no era el suyo, pues cuando estuvo cerca de tomar su autobús, este se fue y tuvo que correr casi cuatro cuadras para alcanzarlo.
Estaba que segura de que había dejado sus pulmones en la mitad de la primera cuadra que corrió.








— Señorita Jones, ¿Llegando tarde? — preguntó un maldito profesor de fisica que parecía odiarla.

«No, llegué tan puntual que ustedes fueron los que llegaron mas temprano de lo normal.»

— Disculpe profesor Kim, no lo volveré a hacer. — hizo una reverencia tragando todo su orgullo.

El maestro rodó los ojos negando y le dio el permiso a la fémina de pasar.

Abbigail le agradeció al viejo decrépito y cuando iba a sentarse en su lugar se detuvo. Alguien había usurpado SU LUGAR. El tipo estaba en la típica posición en la que el alumno se hace el dormido para dejen de joderlo y con ese cabello pelirrojo era muy obvio que ese tipo era Jeon JungKook.

— Disculpa, estás en mi lugar. — dijo Abbigail tratando de no perder los pocos estribos que a esa altura tenía.

JungKook se levantó con la lentitud de un perezoso y la escaneo con sus ojos oscuros de arriba a abajo, arqueando una de sus cejas en el acto.

— Disculpada, pero te aviso, este no es un centro de refugiados. — ante esas palabras, la clase estalló en carcajadas y Abbigail suspiró para mantener a los jugadores de Rugby en su lugar, no quería armar una pelea cuando ella estaba colgando de un hilo.

Abbigail rió sin ganas y apoyó sus brazos en SU mesa.

— Escuchame tipo con menstruación en la cabeza, estoy teniendo un mal día desde que me levanté y creeme que no estoy de humor. Ahora mismo me estoy controlando para no dejarte inconsciente como la última vez que nos enfrentamos, maldito chino.

La clase hizo el tipo; Ohhhh y se escuchaban los murmullos de todos.

— Bien alumnos, será mejor que dejen las peleas para otro momento. — se quejó el maestro, sin embargo pasó de largo por los alumnos.

El rostro del pelirrojo se transformó, pero segundos después le regaló una sonrisa a la fémina.

— ¿Quieres sentarte? — preguntó burlón.

— Si no es mucha molestia.

— Entonces ven... — palmeo sus piernas y le guiño un ojo. — Mi entrepierna estará muy contenta de recibir un trasero extranjero como el tuyo, aunque sea de una vagabunda.

El maestro se aclaró la garganta.

— Señor Jeon, señorita Jones... — advirtió el mayor, pero aún así seguía siendo ignorado.

Abbigail ante lo dicho por JungKook tuvo ganas de golpearlo. Ahí iba otra vez ese estúpido xenófobo. Abbigail sonrió grandemente, a ese punto toda la clase estaba expectante a lo que pasaba entre esos dos, sin embargo poco le importó, el fue quien había empezado.
La peliranaranja tiró su mochila al lado del asiento, se lamió los labios para luego morderse y de un solo movimiento, terminó por sentarse en las piernas del pelirrojo sorprendiendo a todos, incluso a él.

— ¿Esta bien así? ¿O quieres que ponga a tu entrepierna feliz? — fingió inocencia mientras veía como toda la clase desencajaba la mandíbula y el maestro parecía ser un camaleón de todos los colores.

JungKook no dijo nada. Entonces la fémina se removió a propósito ganando un gemido del masculino, quien la había agarrado de la cintura para detenerla.

La clase entera rió de JungKook.

Bien, Abby había ganado esa batalla.

— ¡USTEDES DOS A DIRECCIÓN YA MISMO!

O tal vez no...




QUIERO PONER GIF E IMÁGENES PERO WATTPAD CULERO NO ME DEJAAAAAA!

A alguien más le pasa lo mismo??? :,v





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ҽՏҽ ղҽɾժ ▪pjm▪  GANADORA DE LOS "BTS AWARDS 2020" [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora