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Lecciones

La sensación del agua tibia cayendo por su cara como un río le dio cierto consuelo por el día de hoy

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La sensación del agua tibia cayendo por su cara como un río le dio cierto consuelo por el día de hoy. Sólo un par de salpicaduras la hicieron sentir reconforta y tranquila, por no hablar de que le aliviaba un poco el moretón en su mejilla izquierda, aunque fue una bofetada, a Lilly siempre se le producían moretones fácilmente, ella pensaba que era genético.

Después de que Lilly cerró el agua que corría del fregadero del baño, se miró a sí misma en el espejo. Parecía cansada, hoy no era el mejor día teniendo en cuenta lo que pasó en la tarde. Pero Lenora se aseguró de consolarla y animarla antes de volver con su padre.

Lilly tuvo que ducharse en casa de Emma ya que la yema y la harina que llevó sobre ella durante tanto tiempo se empezó a poner un poco pegajosa. Las mujeres tuvieron que ayudarla a sacarlo todo del cabello. Arvin todavía tenía que quitarle un poco de la cara, el cuello y las manos, pero no le importaba.

Salió apagando la luz del baño y fue hacia el pasillo, el suelo de madera crujía ligeramente con cada paso que daba. La casa estaba muy tranquila, por no mencionar que también muy oscura, le recordaba una película de terror. Su padre y madrastra ya deberían de estar dormidos, así que era el turno de Lilly de por fin tomar sus 7 horas de descanso. Bueno, para este punto eran más bien como cinco.

Al entrar en la habitación se aseguró de cerrar la puerta detrás de ella, pero mantuvo sus acciones en silencio. La única luz que estaba encendida era la de su pequeña lámpara, no le gustaba dormir en total oscuridad, le recordaba cuando estaba en el cobertizo. Sin duda no quería que esos recuerdos volvieran a inundarle, sobre todo cuando estaba a punto de descansar.

Ya en su pijama azul, ella movió la sábanas y ajustó su almohada antes de acostarse. Una vez que su cuerpo cayó sobre el colchón, dejó salir un suspiro contenido, con sus ojos mirando directamente hacia el techo. Un bostezo escapó de su boca no mucho después de ladearse hacia un lado acurrucándose en la cálida manta que la cubría.

Ya con los ojos cerrados estaba lista para un nuevo día mañana, ojalá fuera mejor que el que tuvo hoy. "Clack" Lilly escuchó haciendo que sus ojos se abrieran. Miró a su alrededor viendo cualquier cosa que pudiera hacer un ruido así, nunca le había ocurrido antes. El "Clack" volvió a escucharse una y otra vez.

Ahora sabía de dónde venía, la ventana. "¿Qué carajo...?" Lilly se dijo a sí misma cuando salió de la cama para ver que estaba pasando exactamente. Sin cuidado abrió la ventana y miró hacia abajo. "¿Arvin? ¿Qué haces aquí?" Ella susurro un gritó al chico que la miró desde abajo.

"Ven aquí abajo." Dijo con un gesto corto y rápido. "¿Para qué?" Ella preguntó rápidamente, Arvin no escuchó pero afortunadamente él pudo entender lo que ella le decía "Solo ven aquí." Repitió una vez más siendo cauteloso de no decirlo demasiado alto. Cualquier padre encontraría esto sospechoso, sobre todo el predicador.

The Devil All The Time / Pecadores >> Arvin R.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora