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Inesperado

Inesperado

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"Aquí." Lilly dijo acercándose a Gene dándole 5 dólares, no era mucho, pero era algo. "¿Para qué es esto?" Gene le preguntó mirando el dinero y tomándolo, asegurándose de ponerlo en su bolsillo. "Es por dejarme quedarme en tu casa el fin de semana, no somos amigos, por eso te doy el dinero." Dijo rodando los ojos, normalmente Lilly no haría esto, nunca le daría su dinero a Gene Dinwoodie, ni siquiera 5 dólares.

Lo pensó un momento y giró sus ojos "¿Estás high? ¿ahora mismo?" Él le preguntó mirando alrededor para ver si alguien había oído. "Solo un poco." Informó haciendo un pequeño gesto con la mano. "Cool, no me metas en un puto problema." Él le advirtió señalándola con un dedo. "No te preocupes por eso. Esto está bien. Estoy bien y todos somos fantásticos y geniales. Voy a tener un buen día. Todo el mundo va a tener un buen día." Ella se rió con una pequeña carcajada.

A lo largo del fin de semana se les destrozó el sábado y el domingo, pero se encargaron para limpiar la casa antes de que sus padres volviera hoy. Lilly no recordó limpiar la casa, Gene tampoco lo recordaba. Los dos acaban de despertarse desde la centésima vez que se desmayaron y boom, estaba limpio. Lilly no era ladrona, pero se llevó la botella con ella antes de irse esa noche.

Ni siquiera sabía como había llegado a su casa, pero lo hizo y cuando se despertó estaba un poco risueña y de buen humor. Había planeado ir a la escuela sin nada en su sistema, pero habían pasado unas 8 horas sin el y le hizo sentir miedo, como ansiedad. La asustó un poco, tomarlo dos días seguidos cada 2 horas realmente pasó factura en ella, pero estaba muy jodida para verlo.

Hablando de casa, su padre no le dijo ni una palabra, ni su madrastra. Sabía que estaban locos, tenían que molestarse si no la encerraban en el cobertizo. Sinceramente, no se dio cuenta, solo estaba en su pequeño mundo en donde era la persona más feliz del planeta. No era tan notable saber que estaba en eso, seguro que actuó un poco hiperactiva, pero así es como era su yo normal. Esto la hizo sentir más relajada. Le hizo sentir tan despierta, pero al mismo tiempo le hizo sentir como si se echara una siesta en el suelo.

Gene la miró como si estuviera loca, pero a él no le importaba la verdad, no era su problema mientras no lo involucraran ni lo descubrieran. No veía que lo que había empezado el viernes por la noche era un gran problema. No fue necesariamente culpa suya, fueron faltas de los dos. La diferencia entre Gene es que no dejó que la droga se apoderara de él como lo hizo Lilly. Ella se aferró a la sensación que le estaba dando y no quería que se fuera, como queriendo que Arvin no se fuera.

Gene no se dio cuenta de que esto era muy adictivo, aveces quería un poco, pero sabía que no ceder. Lilly pensó que sí, esta mañana se había dicho que no, pero se sintió tan infeliz. Aún así se dijo que no, pero entonces su corazón empezó a latir muy rápido, sus manos empezaron a temblar como si tuviera espasmos entonces se sentía como si alguien más estuviera allí, o algo así. Por supuesto, la agitación no estaba solo en su cabeza, en realidad su cuerpo y cerebro suplicaban por más. Así que mezcló unos 2 mililitros con una taza pequeña de coca y la bebió. Ni siquiera 10 minutos después se sintió mejor, mucho mejor.

The Devil All The Time / Pecadores >> Arvin R.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora