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Puta

Hoy era la noche de la estúpida bola de pureza, era alrededor de las 9pm y se celebraría en la iglesia

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Hoy era la noche de la estúpida bola de pureza, era alrededor de las 9pm y se celebraría en la iglesia. Lilly definitivamente no estaba deseosa de estar alrededor de un grupo de padres que pensaban que el sexo era malo. Es normal, y francamente más si lo haces con tus propios términos y con la persona que quieras. Mientras dieran su consentimiento obviamente. Claro que no quería hacer esto, y realmente no pasaba tiempo con su padre por amabilidad en su corazón, solo quería un auto. Ahora que Arvin y ella no estaban juntos, tenía que caminar a todas partes y se estaba volviendo molesto.

"Oh, que linda estás. ¿Te gustó el vestido?" Mildred le preguntó mientras la miraba a través del espejo. No. Pensó en su cabeza, pero no quería ser una zorra. "Sí, me encanta." Dijo con una pequeña sonrisa que estaba fingiendo, sonaba demasiado triste y muy tonta, pero realmente si estaba triste. Muy triste. Sentían que todos sus días se estaban convirtiendo en un bucle de nunca acabar. Por supuesto que había experimentado la tristeza antes, todo el mundo lo había hecho. A ella le gustaba dividirlo en dos, como si se sintiera angustiada cuando su madre muriera, absolutamente afligida por el dolor. Pero entonces hubo este tipo de tristeza. Una que no pudo describir. Estos dos eran muy diferentes. Cuando perdió a su madre, sabía que nadie podía hacer nada al respecto y pronto se puso en paz con el hecho de que ya no estaba aquí.

Pero esto era algo totalmente diferente, ni siquiera sabía si era específicamente tristeza, tal vez un primo lejano. Ella sentía que su felicidad estaba ahí mismo, literalmente delante de ella, pero aún así ella no podía alcanzarla. Antes de Arvin su vida era algo aburrida y tenía poco sentido, pero él hizo lo mejor de ella. Si, su padre y su madrastra eran aburridos como el infierno, y ella podría ser lo contrario. Era feliz y burbujeante todo el tiempo, casi como su madre. Sin Arvin volvió a pensar que volvería a ser así, pero nunca podría ser lo mismo. Jamás.

Sinceramente era feliz antes de conocerlo, era una feliz normal, no estaba triste ni enfadada. Luego, cuando ella estaba con él, la hizo sentir un tipo diferente de felicidad, completa y totalmente feliz y amada, querida, la lista podía seguir y seguir. Se sintió todo con él, se sentía a salvo y en casa. Ese sentimiento era algo que había estado buscando toda su vida. Cuando la dejó, el mundo se volvió de repente más tranquilo. Ahora no se sentía segura en su propia cabeza.

Era un poco lo mismo con Arvin, seguro que tenía amigos pero ninguno como Lilly. Es muy reservado con sus emociones, de alguna manera no confiaba en la gente, pero confiaba en ella más que en nada. Sabía que ella también confiaba en él, pero rompió esa confianza y la dejó sola, por lo que se odiaba a sí mismo. A veces pasaba por allí y casi se paraba para ver lo que ella estaba haciendo, tal vez para hablar con ella, posiblemente para recuperar su corazón. Estuvo muy cerca de hacer eso varias veces. Casi.

Algunos días se sentía asfixiado, como si no pudiera respirar. Por supuesto que era muy bueno para ocultarlo, a diferencia de ella era un maestro en poner una máscara sobre sus emociones. La mayor parte del tiempo, si lo mirabas, probablemente asumirías y dirías que había superado la ruptura y que estaba bien. En realidad estaba sumido en sufrimiento casi todo el tiempo, anhelándola a ella. Anhelaba oír su risa, ver su sonrisa, escuchar su voz, ser testigo de una de las muchas tonterías que hacía porque es demasiado hiperactiva y solo sentir su toque.

The Devil All The Time / Pecadores >> Arvin R.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora