Naruto - Maestro del control

[1] Naruto Uzumaki

Bestia/Invocación hablando: Te voy a comer humano.

Pensamientos:¡Quiero comerme a mi abuela!

Flashback o suceso anterior: El Kyubi atacó Konoha, pero el Yondaime Hokage lo detuvo.

Disclaimer: La mayoría de personajes de este fanfic no me pertenecen, son de Masashi Kishimoto.

Capítulo 1. Naruto Uzumaki.

Ubicación: Konoha, Mansión Namikaze. Siete años después del ataque del Kyubi.

-¡Naru-chan el desayuno está listo!- Llamó Kushina, despertando al rubio de inmediato.

-¡Ya voy!- Respondió casi instantáneamente, bajando de su habitación, llegando al comedor, donde estaba su padre, su madre y su hermano menor por un año, Menma Uzumaki, quien aún seguía adormilado. Tenía el pelo rojo corto, alborotado y los ojos violeta, tenía una camisa blanca con un remolino detrás y un pantalón corto negro. -¡Hola Oni-Chan!- Saludó, viendo a su hermano frotándose los ojos. Los ojos de Menma se iluminaron y saltó a abrazar a Naruto quien sonrió y le revolvió el pelo.

-¡Hola Naruto!- Devolvió el saludo antes de volver a su lugar.

-Ya pueden comer, niños. Naruto no demores mucho, tienes que ir a la academia.- Avisó Kushina mirando a su hijo mayor mientras decía la última parte.

-Lo sé mamá pero la Academia es de lo peor, dattebayo.- Dijo Naruto cruzándose de brazos.

-Bueno, Naruto, si quieres ser un Hokage que supere a todos los anteriores debes pasar obligatoriamente por la academia.- Dijo Minato dándole a su hijo una mirada divertida. Naruto se puso blanco antes de ponerse a comer, ignorando las risas de su familia.

Ubicación: x-x-x

-Ya tiene suficiente edad para recibir su herencia. Esta noche, antes de que te vayas a dormir, recibirás lo que es tuyo... Naruto Uzumaki.- Dijo Anken, observando al Uzumaki. Ryuuji observaba todo en silencio desde una esquina de la habitación.

Ubicación: Mansión Namikaze.

Naruto estaba en su cama, leyendo un libro sobre la historia de Konoha, pero antes de terminarlo, recibió una increíble ola de sueño, así que dejó el libro y se fue a dormir. Segundos después abrió los ojos con sorpresa, al notar que estaba en un inmenso palacio, increíblemente más grande que su casa. Frente a él había un camino rojo que decía "sigue adelante". Naruto no sabía porque, pero algo le decía que siguiera el camino y así lo hizo.

-Naruto Uzumaki. Bienvenido seas al Templo espiritual.- Una voz serena e imponente se hizo presente en todo el templo. Naruto observó a la persona frente a él con algo de temor.

-¿Quién eres tú?- Preguntó Naruto temblando un poco.

-Mi nombre es Anken Sylei. Iré directamente al grano, puedo ver que no te encuentras seguro en este lugar.- Dijo, sin liberar su mirada del Uzumaki.

-Bueno, intuyo que es normal que no esté seguro, me secuestran mientras duermo, me llevan a un palacio y se me presenta un extraño, confirmo, es normal que esté inseguro.- Respondió Naruto cruzándose de brazos.

Anken dió un suspiro antes de volver a hablar. -Naruto Uzumaki, estás aquí porque tú mereces recibir mi herencia.-

-¿Herencia? ¿Qué herencia?- Preguntó Naruto con curiosidad.

-Yo te daré un Kekkei Genkai único, que solo yo lo tengo.- Respondió Anken.

-¿Por qué yo? ¿Además, por qué quieres darme un Kekkei Genkai? Eso suena como algo que diría un secuestrador- Dijo Naruto después de preguntar. Seriamente esa persona frente a él le estaba empezando a asustar.