Sindrome de Estocolmo -YoonMin-

Cap. 9

|5 Mayo 2012|
[08:10 a.m]

"-Yo que tú me tranquilizó y comienzo a respirar profundo."

Esa voz.

Jimin abrió los ojos de par en par girando su rostro hacia la puerta de dónde venía el sonido, cuando entonces diviso la imagen recordó a la persona que en su momento recordaba haberla visto.

Esa voz ya la había escuchado. Era él señor de antes.

Yoongi pensaría que diciendo aquello el chico se calmaría pero todo empeoró aún más. Jimin comenzó a respirar aún más fuerte abriendo la boca intentando que entrara aún más oxígeno a sus pulmones, las manos le tiritaban y el dolor en el pecho se hacía más fuerte.

Jimin lo describía como estar ahogándose en una frasco lleno de algodón. Se asfixiaba y a la vez se sentía tan suave que no parecía algo peligroso. Pero en realidad era todo lo contrario.

Yoongi viendo el panorama comenzaba a pensar que debía hacer algo, ¿pero qué?.

Ni si quiera sabía que era lo que estaba pasando.

Algo nervioso se acercó al chico quien mantenía los ojos bien abiertos mientras intentaba respirar a grandes bocanadas de aire.

-Oye, no se que te está pasando. Podrías ayudarme, ¿no?..

Yoongi aún sin saber que hacer se sentó en la orilla de la cama, pero, ¿qué debía hacer? Trago en seco pensando.

¿Un ataque al corazón?

Ay no. Si era eso se quedaba sin dinero de seguro y la pena de cárcel se hacía aún más grande.

-Oye chico porfavor, anda, ¿q-qué necesitas?, Dime algo...

Jimin cerro lo ojos con el propósito de calmarse apretando las manos y respirando profundo. Bueno, intentando hacerlo.

-Hey...

Yoongi se asustó. ¡Se iba a morir y él no hacía nada!

¡Bum!

¿Ataque de pánico?

¡Cómo podría olvidarse de eso! Su hermano siempre las tenía cuando era pequeño debido al gran miedo a la oscuridad. Por un momento pensó que era un ataque al corazón, y llegó a pensar que el chico se moriría.

Yoongi reacciono lo más rápido que podía desatando la mano derecha del chico y poniéndola recta a su lado. Jimin se asustó pensando que le haría algo por lo que instintivamente se alejo aúnque YoonGi al saber la posible reacción solo le sujeto la mano.

-Tienes que tranquilizarte ¿si? Intenta respirar, no voy hacerte ningún tipo de daño.

Jimin cerro los ojos confiando por un minuto en aquellas palabras. Quizás le ayudarían de alguna manera a estar mejor. Yoongi le sujeto la mano derecha apretando un poco para intentar darle algún tipo de apoyo. Aunque no era mucho.

Generalmente a su hermano le abrazaba y le comenzaba a cantar algunas de esas canciones raras que a los niños tanto les gusta, incluso le daba pequeños besos en la cabeza para que se logrará tranquilizar pero en este caso no podía hacer aquello con un desconocido. Menos con el tipo que estaba secuestrando.

Al fin Jimin comenzó a bajar la respiración logrando llegar a un punto de tranquilización. El punto justo que necesitaba. Entonces empezó otra vez a respirar profundo, aún con los ojos cerrados. Estaba tan concentrado que había pasado por alto la pequeña presión que había en su mano derecha.

El tipo dijo que no le iba a hacer nada. ¿Debería de confiar?. Quizás así era. Ahora lo estaba ayudando. ¿Por qué una mala persona ayudaría a otra en medio de un ataque de pánico?

Poniendo su concentración en su mano derecha noto el frío que emanaba la mano contraria. ¿Era normal que estuviera tan fría?

-YoonGi te traje unas pap- ¿Que está pasando?.

Jimin abrió los ojos otra vez notando la otra presencia en la habitación. Un chico al parecer alto, que tenía un pote en sus manos y el pelo de un color bastante rojo. Demasiado rojo.

-A-ah, gracias HoSeok.

Yoongi se levantó de la cama notando que el chico ya se veía mejor volviendo a tomar la mano para dejarla atada, pero Jimin la alejo dejándola en su torso.

-¡P-porfavor no m-me aten! Les juro que no me escapó ni n-nada de eso. ¡L-lo juro!

Yoongi miro a HoSeok quien aún mantenía su mirada encima de él con una interrogación en su cabeza que pedía explicaciones.

-Ah, yo me encargo, tu come, luego hablamos.

HoSeok se acercó a la cama pasando el pote con papas fritas a su compañero quien aún no se movía. Luego de unos segundos reacciono recibiendo el envase para salir de la habitación sin poder evitar darle una última mirada de reojo al chico.

-Buenas, soy HoSeok, un gusto.

Jimin dejo de mirar al otro tipo para pasar su vista al que le sonría. ¿Era normal que se viera como una persona tan buena?

-Proablemente no sabes lo que está pasando pero te lo explico rápido. Estás secuestrado.

Jimin asintió con su cabeza aún extrañado.

-Verás, no puedo dejarte desatado porque intentarias de una u otra manera escaparte, yo entiendo tu situación pero debes de entender la nuestra. Si te quedas quieto quizás podría llegar a confiar en ti y desatarte. ¿Okey?.

Jimin trago en seco rogando a Dios que otro ataque de pánico no se hiciera presente.

-P-por favor no me hagan nada.

HoSeok tuvo pena del chico viendo lo débil que se notaba. Parecía un gatito recién nacido.

-No te preocupes, nosotros no tenemos nada en contra de ti, tu descansa, luego te traeremos algo de comer.

El alto hombre se fue dejando a Jimin confundido pero con una respuesta ya confirmada. Estaba secuestrado.

Ah, y no eran unos viejos hasta el momento, ni tampoco unas chicas.

Podría estar algo más tranquilo ahora.

Bueno, por ahora.