28. Pensando en el final

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Capítulo veintiocho:

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Capítulo veintiocho:

Pensando en el final.

Pensando en el final

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Damian, parado frente a uno de los ventanales, miraba como caía la nieve en el piso y como se endurecía al contacto con este. Era Nochebuena y no podía dejar de recordar cómo había cambiado tanto su vida en cuestión de un año. Antes se sentía bendecido y afortunado de contar con una familia como lo eran los Cullen, pero había una parte de él que no se sentía cómodo del todo; ahora se sentía con la fuerza suficiente para hacer todo lo necesario para que no fueran arrebatados de su lado.

El mediodía había llegado y como lo acordaron, Erick estaba en la puerta de su casa para conocer a Alexander. Leah, quien estaba ahí a petición de Damian, abre la puerta. La mujer loba mira con odio puro al rumano y lo deja pasar.— Dile a tu...— el vampiro está apunto de decir una ofensa en contra de la metamorfa cuando Edward sale de la cocina con Alexander en brazos,

— ¿Papá, por qué está el señor Erick en la casa?— pregunta el niño bajando de los brazos de su padre adoptivo. Alex había crecido bastante en los últimos días, algo que todos los testigos habían presenciado claramente dando la razón a los Cullen, Alex no era un niño inmortal.

— El señor Erick conoció a tu mami, campeón— responde Edward sonriendo y peinando el cabello de Alex. El niño mira emocionado al milenario vampiro y camina hasta él.

— ¿Conociste a mi madre?— Erick asiente a la pregunta, Alex vuelve a preguntar.— ¿Cómo era ella?

Damian se siente morir al ver a su pequeño tan interesado en la mujer que le dió la vida pero lo entiende, él lo había vivido en carne propia. Odiaba a Erick Volkov, lo odiaba porque mientras él existiera siempre tendría el miedo de que apareciera y pudiera llevarse a su hijo de buenas a primeras.

Leah miró a su amigo y tomó su mano, desdoblando el puño del vampiro quien no se había percatado de lo tenso que estaba hasta que sintió la calidez de la chica. Ambos se sonrieron y el joven inmortal agradeció a los ancestros Quileutes por poner a Leah Clearwater en su camino; la amaba igual que amaba a sus hermanas, pues se había convertido en una.

𝗟𝗜𝗢𝗡 𝗛𝗘𝗔𝗥𝗧 ━ Edward Cullen ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora