One Shot's BTS

Todo Por Ellos!

Un niño de 6 años hablaba y reía de alguna cosas con su padre, era un hermoso momento padre e hijo, después de todo sólo se tenían ellos dos, pues su madre había desparecido ella solo se había ido de casa sin decir nada, cuando el joven apenas era un niño de 2 años, pero eso era lo de menos para el niño, él tenía a su padre después de todo, no necesitaba a nadie más.

????: Sí, entonces Kurumi se levantó diciendo "Esa dona es mía!!! Nadie la toca" pero no era una dona y resultaba ser de la maestra- ríe- Cuando Jisoo intentó quitársela, se tropezó con el pie de otro compañero y ambos cayeron al piso, pero Jisoo terminó besando a Jennie y las dos se pusieron más rojas que un tomate, la maestra entró justo cuando se vio el beso y dijo "estamos en la escuela niños maleducados!! Dejen sus besos y esas cosas para cuando salgan, a la dirección ahora" entonces Jisoo y Jennie tuvieron que ir a la dirección, explicando que fue un accidente, pues Jisoo se había caído, pasaron una vergüenza- ríe

Padre: ríe- Es bueno que te diviertas en clase Jin.. Oye Jin... Tu madre...-

Jn: para de reír- Papá... Yo- suspira- Sabes que... Cuando tenia 2 o 3 años tal vez te haya preguntado por ella, el por qué nos dejó? Sólo se fue sin avisar, pero... Ahora me es un tema completamente irrelevante, no la odio, no puedo odiar a alguien que no conozco pero... Simplemente no me importa, ella me es un tema completamente indiferente, te tengo a ti y es lo único que importa papá, no necesito de ella, tu me sacaste adelante todo este tiempo, tu me aliméntaste, me enseñaste, me cuidaste, tú y solamente tú, no ella, ni otra persona, lo hiciste tú- sonríe mirando el cielo- eres lo único que necesito para estar bien-

P/Jn: Gracias Jin... Por comprenderlo y no odiar a tu madre, gracias por creer que soy lo que necesitas en tu vida y gracias por no cerrar te y dejarme ver lo que sientes- lo abraza.

Jin y su padre siguieron conversando, hasta que se hizo un poco más tarde y los tonos naranjas comenzaban a pintar el cielo, decidieron volver a casa, una hermosa casa.

Era grande y llegaba a ser solitaria para el niño cuando este se quedaba solo debido a que su padre trabajaba, pero aún así era su dulce hogar o el lugar al que podia llamar hogar.

Jin se puso a ver una película al lado de su padre, eran pocos los momentos en los que podían estar juntos como padre e hijo, el pequeño Jin se quedó dormido en los brazos de su padre sin siquiera terminar la película.

Jin abrió los ojos al sentir los rayos del sol pegarle en la cara, al estar más despierto, miró a su alrededor y talló un poco sus ojos para ver con más claridad, encontrando que estaba en su habitación, seguro su padre lo había llevado, Jin se aseo y cambió, listo para irse a la escuela, pero un olor a quemado llego a su nariz mientras caminaba para llegar a la cocina.

Jin: con los ojos cerrados- Madre, no deberías cocinar, eres un desastre en la cocina, por eso papá se encarga de...-

Jin abrió los ojos sorprendido cuando reaccionó y pensó en lo que había dicho, su madre los había dejado cuando el tenía 2 años, pero recordaba perfectamente que su madre era un desastre en la cocina y por eso su padre siempre hacía el desayuno, pero a esa hora el desayuno ya debería de estar en el mesa y su padre estar a punto de irse a trabajar o si ya era tarde, debería de ya no estar su padre y el estar solo en casa...
Mientras analizaba la situación con si cabeza trabajando a mil por hora, un miedo como nunca lo invadió, se asustó y su corazón latía a mil por hora, como si hubiera corrido un maratón, su respiración se agitó, corrió a la cocina pensando en miles de situaciones, pero solo vio a su padre con un sartén y lo que parecía ser un pan quemado, se sintió aliviado por eso, pero intrigado.