Iggy se encontraba en su departamento luchando con la soledad, era un chico que siempre era el abandonado, el dejado de lado fingiendo que no lo sabía porque a veces era consciente de eso pero otras veces simplemente trataba de ponerlo en la parte de atrás de su cerebro, solamente para no sentirse mal, fue abandonado por su padre decir que le dolía era poco porque también su antigua mejor amiga lo hizo, las muchachas con las que estaba lo abandonaban y él seguía adelante; frente a él, un rompecabezas para niños pero de varias piezas aun tratando de resolverlo y tenía que pasar la noche distrayéndose con algo.
El celular que había dejado a un costado del rompecabezas sobre la mesita ratona de la sala empezó a sonar y él contestó sin despegar la vista de su entretenimiento.
-Cassandra-Dijo Iggy sonriendo sabiendo lo que la joven diría-¿La estás pasando bien en Caretown?
-Primero, no me digas así y segundo, la estamos pasando bien, fuimos al cine nuevo de Caretown, tercero, Susan está algo loca y no volveremos hasta que ella no recupere su confianza en los hombres así que tú y Johnny, cuídense-Murmuró Cassie del otro lado observando la expresión seria de la rubia.
-¿Le avisaste a Lisa que estás en Caretown? Sabes que ella quería regresar a visitar a su familia.
-¿Cómo sabes eso?
-Ella me dijo.
-No le digas nada que estoy aquí, se enojará conmigo y además las cosas no están muy estables entre nosotras.
-Sí, también me dijo eso, pero seguro hablará contigo para solucionar todo.
-Esperaré, porque yo no puedo explicarle lo que me está sucediendo, ella no podría entenderme.
-Cassie, quiero ir a casa-Gritó Susan.
-Susie te llama, te dejaré pero solo sé paciente y no subestimes a tu novia porque Lisa es tan fuerte e inteligente como tú, solo explícale porque ella lo entenderá, debo seguir con mi rompecabezas, adiós-Dijo Iggy cortando mientras observaba el rompecabezas con una sonrisa de lado.
Los jóvenes caminaban por el pueblo, las chicas acompañaban a Duncan que vivía en la otra punta del pueblo, estaba viviendo en la casa de su madre con su hermano pero pronto tendría que volver a Melbourne, ya que al igual que la chica de ojos celestes no aguantaba a su madre; Duncan trataba de alcanzar emocionalmente a la rubia mientras que Kayla y Cassie caminaban detrás de ellos mientras hablaban, se ponían al día.
-Ya sé que nunca hablamos, pero...¿Te sucede algo?-Preguntó Duncan sacando otro cigarrillo.
-Solo creo que todos los hombres son idiotas-Dijo Susan en un tono sensual.
-¿Es por algo que te pasó con un chico?
-Él dijo que soy una distracción.
-No es cierto, ella no lo dejó hablar-Interrumpió Cassie-Y además ella está loca por Oliver.
-Si estás loca por él, entonces creo que deberías dejarlo hablar, en mi experiencia creo que es mejor escuchar antes de salir a pensar todas las cosas negativas posibles-Dijo Duncan con un aire de sabiduría.
-¿Tú estás loco por alguien?
-No estamos hablando de mí, estamos hablando de Susan.
-¿Qué hay de Gabrielle?-Preguntó Kayla divertida.
-Oh, miren...ya estamos en mi casa, debo irme-Dijo saludando a cada chica-Recuerda Susan lo que dije...adiós-Agregó el chico entrando a su casa.
La rubia iba caminando en el medio de las dos chicas mientras repetía las palabras de Duncan en su mente, la noche estaba cálida con una brisa pegajosa, cuando llegaron a la residencia Hickling las tres chicas entraron y subieron las escaleras tratando de no despertar a nadie, ya que ya era de madrugada, sus padres se encontraban durmiendo y los demás hermanos ya estaban en casa, en sus habitaciones, Cassie entró a la habitación de Susan mientras que la rubia estaba por entrar cuando su hermana la detuvo sosteniéndola del brazo.
ESTÁS LEYENDO
Ningún Chico
Teen FictionSusan ha pasado por mucho, tratando de avanzar sin fantasmas del pasado, pero la siguen atormentando, en su forma de ser y de comportarse, un chico nuevo llega a su vida, un chico que no promete salvarla, un chico que promete ayudarla a que siga apr...