Capítulo 10

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 La muchacha estaba en su habitación con un pijama, recién salía de bañarse y necesitaba opinión de la persona más cercana, ya que esa noche tenía una cita muy importante con Oliver, la noche anterior fue la fiesta y ella al día siguiente había decidido dormir todo el día para recuperar energías, en ese momento se encontraba con un pijama a rayas y una toalla en forma de turbante en su cabeza.

 -¿Me veo gorda?-Preguntó Susan sacándose el turbante y dejando que su cabello húmedo cayera en sus hombros.

 -No-Contestó automáticamente Iggy.

 -¿Me veo cansada?

 -No.

 -¿Estoy bonita?

 -Sí.

 -¿Cuál vestido uso, el negro o el rojo?-Preguntó Susan caminando hacia el sillón.

 -Eh...eh...deberías preguntarle a Cassie.

 La rubia puso los vestidos sobre la cama y llamó la atención del chico chasqueando los dedos, Iggy quitó la vista del celular y miró a Susan sin entender lo que quería decir pero ella le explicó que estaban solos, Cassie no se encontraba con ellos, durante la fiesta ella habló con Lisa, explicando lo que sucedía, la rubia sabía que Lisa lo había entendido, Cassie estaba cambiando, demasiado.

 Tal vez era hora de que ella cambie también, lo estaba intentando y las personas a su alrededor la ayudaban a confiar un poco más en el mundo, había encontrado un chico que no la juzgaba y que tampoco desvalorizaba sus emociones y pensamientos, un chico que quería conocerla y contenerla, no como esos chicos que encontraba en fiestas, que sentía sus labios en su boca y no los volvía a ver.

 La rubia vio cómo el muchacho observaba detalladamente los vestidos y estaba perdiendo la paciencia porque para ella no había mucha ciencia, solo quería verse bien y saber cuál le sentaría mejor, el tiempo pasaba e Iggy veía y tocaba los vestidos como si tratara de descifrar algo pero esperó observando mientras comía papas de un paquete, la chica se sentó al lado de los vestidos mientras que él estaba al otro lado, aún decidiendo pero se detuvo cuando Susan aclaró su garganta pero ambos dirigieron su vista a la puerta cuando sonó el timbre y el rubio se levantó para ir, cuando volvió se puso a hablar y a explicarle al muchacho.

 -Todavía no estoy lista-Aclaró Susan.

 -Te espero-Dijo Oliver al otro lado de la puerta-La reserva es a las diez, tienes tiempo.

 -Oliver ¿Cuál es tu color favorito?

 -El azul.

 -Eso no me ayuda...si quisieras verme elegante ¿Te gustaría verme de rojo o de negro? Es importante.

 -De rojo, aunque creo que con cualquier color te verías bien, puedes ir con tu pijama rosado y yo estaría feliz-Comunicó Oliver.

 -No tengo un pijama rosado, es blanco.

 -Solo acepta el halago.

 Susan salió de su habitación vestida con un vestido rojo que le llegaba por encima de las rodillas luciéndose porque tenía unos zapatos del mismo color, su cabello suelto y maquillaje natural encontrándose sonrojada porque le encantaba la camisa negra del morocho, ambos se miraron y se sonrieron al verse, Oliver estaba con unos pantalones negros y la camisa con los primeros botones abiertos, mientras que el chico de ojos verdes estaba en el sillón comiendo palomitas de maíz, Susan miró al rubio y el chico le levantó el pulgar a ambos.

 -¿Vamos?-Preguntó Oliver con seriedad.

 -Vamos-Dijo Susan con una sonrisa coqueta.


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