Game Over ➶︎ Jikookmin AU

13

Taehyung dejó la cámara a un lado, mirando por la ventana y suspirando. No obstante, cuando percató la silueta de Jimin entrando a la estancia, casi deja caer el instrumento de sus manos.

Miró a Jungkook con temor, pero éste estaba entretenido mientras hablaba con Seokjin y Hoseok. Namjoon se acercó a Taehyung y posó su mano en el hombro de éste.

-Hiciste muy buen trabajo, Kim. -sonrió, éste seguía en otra dimensión- ¿Te encuentras bien? Parece como si hubieras visto un fantasma.

-J-jimin... viene Jimin.

Namjoon abrió los ojos en demasía y se asintió, habían hablado durante la sección sobre el tema de estos dos y harían lo posible para acabar con el dolor de Jungkook.

-Me pareces una persona genial, Kook. -admitió Hoseok- Eres todo lo bueno que debe haber en el mundo.

-Jeon. -llamó su atención Namjoon- ¿Puedes ir a cambiarte? Querría hablar contigo para unas citas sobre tatuajes.

-Oh sí, claro. -sonrió- En seguida vuelvo, hyung.

Desapareciendo de la visión de todos, se acercó a su camerino, cerrando tras él y desabrochando la camisa que llevaba.

Dos segundos duró su paz cuando la abierta fue abierta de golpe y se volvió con la camisa en sus manos.

-Taehyung, no tie-

-¿Qué haces en mi camerino? -se quedó fijo mirando a Jimin sin expresión.

-¿Qué haces tú aquí? -masculló- Te advertí que no quería verte.

-Solo venía a recoger mi reloj, lo dejé el otro día. -se acercó al mueble que apoyaba el espejo y lo colocó en su muñeca luego de encontrarlo- Y me encuentro contigo aquí, no lo hice intencionadamente.

Jungkook bufó.

-Sabías que tenía un proyecto con Namjoon.

-Pero no sabía cuando. -se encogió de hombros.

-¿Por qué siempre vuelves a mí, Park? Cuando estoy tratando de dejarte ir siempre vuelves.

Jimin se giró para enfrentarle y se acercó a la puerta cerrándola con pestillo.

-¿Y tú por qué estás dispuesto siempre a recibirme? -le miró- ¿Por qué te quedas donde más daño te hacen?

-Por que no puedo alejarme. -murmuró- No soy capaz de dejarte ir, no puedo.

Jimin asintió.

-Estamos jodidos.

-Estoy jodido. -rectificó Jungkook.

-Estamos. Estoy tan jodido como tú. -sacó su teléfono y mostró su salva pantallas- Tan jodido que te llevo de fondo. Tan jodido que me molesta que te relaciones y te beses con alguien más. Tan jodido que no puedo tocar a mi novia sin pensar en tí. -se acercó y tocó su pecho con su índice- Tan jodido que no sé que has hecho para meterte en lo más profundo de mi mente. Y sé que no soy el único.

En cuanto las últimas palabras de Jimin abandonaron su boca, Jungkook se abalanzó a sus labios como depredador a su presa, besándolo lento y con fuerza. Como si quisiera demostrarle todo lo que había añorado con escuchar esas palabras saliendo de esa bonita boca que le volvía loco.

Empujó a Jimin con su cuerpo mientras sus lenguas danzaban al compás y bajó sus manos hasta los muslos del rubio para levantarlo y sentarlo sobre el mueble del espejo. Sin despegar sus labios, Park deslizó por completo la camisa de Jungkook e intentó bajar la cremallera de sus pantalones mientras Jungkook trataba de desnudar al rubio por su parte delantera.

-No te preocupes por las paredes, son más gruesas de lo que parecen. -susurró Jimin cuando Jeon descendió a su cuello y lo dejó completamene desnudo frente a él.

La mano del pelinegro bajó hasta el miembro del mayor y enroscó sus dedos en él para comenzar un vaivén lento que hacía voltear los ojos al más bajo.

-Bájate y date la vuelta.

Ante la orden, Jimin hizo lo que le mandaban y Jungkook proporcionó una nalgada que se escuchó por toda la habitación. Jadeó ante el golpe y calló cuando la mano del menor tapó su boca a la vez que se colocaba un condón y entraba de golpe en él.

-Uhm j-jungkook... -gimió, entre dolor y placer sobre su mano.

-Eso es nene, gime mi nombre. Solo el mío. -ordenó tras una embestida por cada frase- Solo yo te puedo poner así, ¿entiendes?

No hubo respuesta, Jungkook proporcionó una nueva nalgada y Park gimió en respuesta, sin parar las embestidas.

-Te hice una pregunta, Park.

-S-si, si... d-dios si...

-Nadie nunca te va a tocar como yo, ¿lo sabes? -Jimin asintió apoyándose más sobre el mueble y empinando más su trasero para tomar todo de Jeon- Oh, joder, me recibes tan bien, cariño. Todo esto solo por y para mí.

Cuando sintieron las voces fuera en señal de personas de cerca, Jungkook aceleró las embestidas, golpeando repetidas veces el punto dulce del chico bajo él y éste se deshacía en gemidos y jadeos incontrolables.

-Nene, amo escucharte gemir, pero no grites tanto, pueden haber espectadores y solo yo soy digno de escucharte de este modo. -jadeó.

Ese ronco susurro sobre su oreja provocó un escalofrío en Park y todo su cuerpo se tensó dejando ir su semilla y arqueando la espalda cuando sintió como Jeon se iba también dentro del condón.

-Uhm... J-jungkook... -jadeó ante la sensación de vacío- Ha sido un infierno estas semanas sin tí.

Jungkook acercó su ropa para vestirse y pasarle la suya a Jimin. Cuando ambos estuvieron preparados y el rubio se acercó a abrir la puerta, Jungkook lo volteó y le miró con mirada apenada.

-Déjala, Jimin.