Game Over ➶︎ Jikookmin AU

46 - Oportunidad

Cinco meses más tarde

Si Jungkook hubiera dicho algo sobre los últimos meses, simplemente lo resumiría como un período de tiempo corto. Fue al psicólogo, volvió a ser feliz y disfrutar de las pocas cosas de la vida y aprendió a perdonar. Estaba listo para dar segundas oportunidades.

A Taehyung ya se le notaba bastante la tripa, y justo días anteriores los médicos le informaron sobre que el bebé que esperaba era un varón. Yoongi no pudo estar más contento con eso, además de que su álbum fuera un éxito rotundo. Hoseok y Rosé se dieron una nueva oportunidad para amar y aprendieron a hacerlo juntos.

Ahora, todos esperaban ansiosos a la pareja que llegaría en pocos minutos al altar para oficializar su enlace. Jungmi llevaba un pequeño traje de chaqueta a juego con su padre, quien lo sostenía en brazos. El pequeño fue el más feliz en cuanto se enteró de la noticia del bebé que Taehyung traería al mundo en pocos meses.

La clásica melodía abrió paso a los novios, ambos andando juntos y de la mano por el sendero de flores esparcidas por el suelo. Llegaron sonriendo, saludando con la cabeza a las pocas personas que se reunían en su enlace, hasta llegar al altar. Palabras más tarde de parte del encargado en unirlos, ambos sellaron su promesa de respetarse y amarse hasta que la muerte les separe con un dulce beso en sus labios y comenzó la verdadera fiesta.

Parecía todo tan bonito desde fuera, desde la perspectiva de Jungkook. Su mejor amigo y mejor amiga habían encontrado el amor, ambos estaban en una pareja estable desde hacía meses. Jungmi era un niño excelente y se portaba muy bien en la escuela. Todo estaba funcionando bien en la vida de Jeon. Pero para él faltaba lo más importante.

Por eso, cuando logró encontrarle entre la multitud, decidió encargar a su hijo con Taehyung e ir a saludarle.

Jimin estaba en aquella ceremonia.

Él había tratado de no mirar a Jungkook, y aunque se moría de ganas por decirle lo hermoso que estaba él y su hijo, no quería incomodarle. Se mantuvo alejado de todos ellos en toda la velada, hasta que la noche cayó y alcanzó a ver las estrellas en el balcón conjunto del salón de actos.

Se arrepentía de tantas cosas. Dos semanas después de su error, fue dado de alta en el hospital y respiró tranquilo. No volvería a hacerlo, nunca más. Jungmi le había reñido ese mismo día que le visitó con Hoseok, y Jimin se había sentido amado por su hijo, aunque en una mínima parte. Se preocupaba por él y le importaba, eso era más que suficiente. Acudió también al psicólogo y estaba listo para dejar ir los recuerdos. Ya no pertenecía ahí.

Unos suaves golpes en la madera del balcón lo despistaron de sus pensamientos y volvió la cabeza para deslumbrar a Jungkook apoyado en ella, mirándole. No lo iba a admitir, pero tembló al verlo tan cerca y tan precioso como se veía esa noche. Era la primera vez que se veían desde que el menor le echara de casa.

— ¿Puedo estar aquí también?

Jimin asintió volviendo su cabeza al frente. No podría contener las ganas de llorar por mucho tiempo, su mente era frágil y sus recuerdos le golpeaban cada vez con más ahínco. Jungkook se acercó hasta posicionarse a su lado y apoyarse en la baranda de metal, su mirada fija en él.

— Eres tan idiota. —Murmuró divertido—. No tienes algo mejor que hacer que decides intentar suicidarte, ¿no?

— Jungkook...

— ¿Hubieras dejado a Jungmi? ¿Me hubieras dejado solo de nuevo?

Jimin le miró por primera vez a los ojos en la noche.

— He aprendido a perdonar, Jimin. —Habló Jungkook—. He aprendido a dar nuevas oportunidades a pesar del dolor y del rencor, y sentía que si no te veía no podría cerrad este capítulo amargo de mi vida.

— ¿De qué estás hablando?

— Voy a darte una última oportunidad, y esta si será la última. —Giró su cuerpo hasta él—. Quiero creer que esta vez has cambiado y no cometerás errores.

Park alzó su mirada, sus ojos picaban por llorar y sus manos temblaban.

— ¿Estás seguro de lo que estás diciendo?

— Muy seguro. Solo necesito que empecemos de cero.

— Pero Jungkook... tenemos un hijo. —Murmuró.

— Bueno, de uno. Es evidente que no me puedo volver a meter a Jungmi. —Rió.

Jimin rió sinceramente y le dio la espalda por unos segundos a Jungkook. Jungkook alzó una ceja confundido antes de que el pelinegro se volteara y tendiera su mano.

— Park Jimin, ex-bailarín. —Sonrió coqueto—. Me encanta el traje que llevas. ¿Vienes de parte de Seokjin o Namjoon? No te había visto antes con ellos.

Entonces Jungkook entendió que Jimin aceptó que empezaran de cero. Sonrió de lado y le siguió el juego.

— Jeon Jungkook, tatuador. Y vengo por parte de Seokjin. —Habló con una sonrisa en sus labios—. También te queda bastante bien ese traje que llevas, pero si vas a coquetear conmigo procura saber antes que estoy comprometido con el deber de ser un padre ejemplar.

— Oh, Jeon Jungkook, no tengo problemas con eso. —Guiñó. Jungkook se sonrojó y miró al cielo estrellado. Jimin le acompañó segundos más tarde hasta susurrar—. Gracias.

[...]