Jungkook y Jungmi recorrían los pasillos del supermercado donde hacían sus compras semanalmente. Algunos hacían parar a Jungkook y le hablaba sobre el impresionante trabajo que hacía, otros y otras intentaban coquetear con él apoyándose en su hijo.Estaba cansado de siempre lo mismo. Utilizaban la excusa de ser también padres o madres solteros para intentar coquetear con el pelinegro, éste les rechazaba de la mejor manera.
Sin embargo, ahora estaba tan sumido en sus pensamientos que no notó en ningún momento que ahora eran tres y que Jungmi llevaba a una pequeña de la mano.
— Jung, cariño. —le llamó— ¿Quién es ella?
El chico miró a la niña y se encogió de hombros mientras seguían andando.
— Perdida. —habló la pequeña— Chim perdido.
— ¿Quieres que te ayude a buscar a tu papá? —Jungkook se arrodilló ante los niños y ella asintió eufóricamente.
— Amigo. —señaló la mano de Jungmi— Nene y Mingguk amigos.
— ¿Tu nombre es Mingguk? —asintió— Es un nombre muy bonito, yo soy Jungkook y él Jungmi.
— Kookie. —habló su hijo.
— Kookie. —repitió la pequeña.
— Kookie. Bien, ahora busquemos a tu papá.
Tendiendo una mano a cada lado, ambos pequeños se sostuvieron de sus manos y comenzaron a caminar en busca del padre de la más pequeña. Jeon miraba con el ceño fruncido a su alrededor cuando una voz se escuchó a lo lejos.
— ¡Mingguk! —gritó un chico con gorra y vestido de forma deportiva. Visualizó a los pequeños y corrió en su dirección— ¿Dónde estabas, pequeña? ¿Sabes el susto que me diste?
Mingguk se abrazó a su padre y señaló al pequeño.
— Jungmi. —volvió a señalar ahora más arriba— Kookie.
— ¿Kookie? —preguntó.
Alzó la mirada y lo que vio lo dejó sin palabras. Era como si todos los fantasmas del pasado se hubiesen reunido en medio de aquel pasillo de supermercado.
Jeon Jungkook estaba frente a Park Jimin por primera vez en años.
Jimin apartó inmediatamente la gorra de su cabeza y dejó libre su, ahora, pelo negro. Jungkook parecía estar dentro de una especie de trance sin dejar de ver al padre de su hijo frente a él. El más bajo no pudo evitar sonreír nostálgicamente y mirar al otro. Jeon no siquiera lo pensó cuando se abalanzó sobre Jimin para abrazarlo con todas las ganas que había guardado durante todo este tiempo.
Jimin, por primera vez en años se sintió en casa cuando el perfume de Jungkook llegó hasta sus fosas nasales y apretó el cuerpo del pelinegro con el suyo en busca de más contacto. Abrazando su cintura y escondiendo su rostro en el cuello contrario. Los pequeños estaban entretenidos con intentar meterse en el carro de la compra que Jimin había traído consigo.
— Jungkook... cuanto tiempo sin verte. —habló primero Park.
— Te fuiste sin avisarme siquiera, idiota. —golpeó levemente su pecho y miró a Mingguk— Veo que no perdiste el tiempo, ¿es tu hija? —rió.
— Tú tampoco. Y sí, si es mi hija. —señaló a Jungmi y rió— Porque... ¿él es tu hijo, no?
— Así es. —miró al niño y sonrió— Jeon Jungmi.
— Oh vamos, eso es nombre de chica. —se burló.
— Mingguk es nombre de chico y yo no te dije nada. —bufó Jungkook, Park rió.
— Tienes razón. Estoy muy feliz de haberte visto de nuevo y saber lo bien que te va la vida, Jungkook. —le miró con sinceridad— Volví para siempre, así que si en algún momento necesitas ayuda en algo, no dudes en llamarme, sigo utilizando el mismo número de teléfono.
— Queda anotado, Jimin. —cogió al pequeño— Dile adiós a Jimin, bebé.
— ¿Quién es?
La cara de Jungkook se cambió por completo.
— Un viejo amigo de papá. —explicó— Si ahora tú y Mingguk sois amigos podemos vernos más seguidos.
— ¡Si! —gritaron al unísono. La pequeña sonrió y Jungkook se detuvo a mirarla por unos instantes.
Mingguk se parecía realmente mucho a Jimin. Sus labios y su pequeña nariz era prácticamente idénticos a los de él, pero sus ojos reflejaban un brillo especial, más grandes que los de su padre y más curiosos.
Jungkook frunció el ceño ante ello, la pareja de Jimin debería tener unos ojos fascinantes para que su hija naciera así de hermosa.
— Jungmi se parece muchísimo a tí, Jungkook. —avisó Jimin— Es como una copia exacta, no sé quien es su padre o madre, pero es prácticamente igual a tí.
— Oh, no digas eso. Jungmi es mil veces más guapo que yo. —tocó la pequeña nariz de botón de su hijo y sonrió— ¿Verdad, príncipe?
— Tienes razón, es mucho más guapo que tú. —Jungkook fingió estar ofendido— Nos vemos otro día, Jungkook, Jungmi.
— Hasta otra, Jimin.
— Adiós, Jiminssi. —habló Jungmi con el dedo en la boca— MinMin.
— Adiós. —sonrió.
Ante una despedida de ambos pequeños con las manos, los mayores voltearon como si no hubiera pasado nada ahí mismo, como si sus corazones no hubieran saltado como locos dentro de sus pechos.
ESTÁS LEYENDO
Game Over ➶︎ Jikookmin AU
FanfictionDónde Jimin es un famoso bailarín que tiene de amante un sexy y atractivo tatuador a espaldas de su novia. ·Versátiles. ·La mayor parte son social media con fotos, aunque también hay narración. ·Mención de otros ships {Namjin, Vhope, Taegi}. ·Mpreg.