Bitter Sweet ➸ GgukTae

026.

Un año después.

— ¡Papi! — la pequeña Sun hee gritó al ver a su papá llegar por ella.

Jeongguk una vez vio a su pequeña la tomó entre sus brazos y la lleno de besos.

— ¡Te extrañé muchoooooooo! — Sun hee se aferró al cuello del mayor.

— Yo también pequeña y no sabes cuanto te extrañe.

— ¿Por qué te fuiste por muchoooo tiempo?

Jeongguk jugó con el cabello de la pequeña — Bebé te dije que tenía trabajo.

— Si me lo dijiste, pero ¿por qué no llevaste a Sun hee? — dijo haciendo un tierno puchero.

— Cariño, en el hotel que me opede no se aceptaban niños.

— Pero dijiste niños, no dijiste niñas.

Jeongguk rodó los ojos al ver lo dramática que era su pequeña niña.

— ¿Y para mi no hay besito?

— ¡Tío NamNam! — gritó al ver al chico que le sonrió y dejando ver sus hermosos hoyuelos.

La pequeña se removió entre los brazos de Jeongguk para que este lo bajase. La puso en el piso y se lanzó a los brazos del pelimorado.

— ¿Cómo estás pequeña? — dijo y comenzó a llenarla de besós en toda la cara.

— ¡No, no, no! ¡Tioooooo me estas llenando baba!

Jeongguk miraba la escena tiernamente, giró su cabeza al ver como los demás pequeños eran recogidos por sus padres, saludando a todos cada vez que pasaban. Pero su vista se fijó en un hermoso pelirrojo con sonrisa cuadrada despidiéndose de los niños.

El menor llevaba puesto unos lentes, una chaqueta negra, una camisa blanca con puntos en ella. Unos pantalones que claramente tenían que ser Gucci ya que a este le encantaba usar esa marca.

Observó como este se metía al salón de clases, para hacer quien sabe que cosa, para luego salir. Sus ojos se conectaron y el pelirojo lo miró burlonamente, mordió su labio inferior y con eso comenzó a  caminar en dirección contraria y pudo ver como este caminaba moviendo ligeramente sus caderas.