Bitter Sweet ➸ GgukTae

027.

Después del gran besuqueo que Jeongguk le dió a Taehyung decidieron salir del aula tomados de manos, caminaron por los pasillos, que aún se encontraba repleta de personas que es el caso de mamás y maestras.

Taehyung pudo sentir la mirada de todas éstas, algunas de ira y enojo. Y otras que eran de cariño y ternura. Este sentía como algunas ya lo habían asesinado varías veces en sus pensamientos. Pero eso le importó.

¿Por qué?

Porque Jeongguk era suyo.

Era su novio.

Sonrió con orgullo, al ver como esas mamás y maestras le miraban con envidia, por tener una pareja realmente sexy.

Jeongguk por su parte también sintió nuevamente las miradas y lo que hizo fue mejor abrazar la cintura de Taehyung para pegarlo a su cuerpo de forma posesiva.

El pelirrojo mentiría si les dijera que no le gustaba esa parte de Jeongguk siendo muy posesivo con él. Le encantaba las facetas de celos que le daba su novio.

Todavía recordaba esa escena de celos que le dió cuando se reencontró con un viejo amigo de la universidad en una cafetería, ese día los dos decidieron ir a buscar algo rico que comer y beber así que fueron al lugar más cercano.

FLASHBACK.

La pareja se encontraba llegando al establecimiento, llegaron tomados de las manos sin importar que la gente los mirara, a ellos les valía mierda lo que pensaran.

Total eran ellos.

La puerta fue abierta y la campanilla sonó avisando.

— Bien — dijo el pelinegro — ¿Por qué no vas a buscar un lugar para comer mientras yo voy al mostrador?

Taehyung alzo una ceja.

— ¿Seguro que sabrás escoger lo que quiero?

Jeongguk lo mira arrogante.

— Con quien estas hablando querido — y le dió una sonrisa ladina.

— Con un idiota.

Jeongguk gruño.

— Mentira cariño — y Taehyung se puso de puntitas y le dio un besó esquimal — Ve a pedir yo iré a buscar una mesa ¿vale?

Jeongguk asintió pero sin antes darle un beso en la comisura de sus labios.

Una vez el pelinegro se alejo, Taehyung fijó su vista en las mesas buscando un lugar vacío, pero no encontró, así que decidió ir a la rechaza, pero sin antes avisarle a su novio. Cuando llegó arriba rápidamente encontró un lugar vacío cerca de los barandales. Caminó a paso lento hasta llegar a él y tomar asiento y esperar a su novio.

El pelirrojo miró el cielo, este se encontraba de un color naranja hermoso, ya que estaba atardeciendo. Pero una vez regresó su vista pudo ver como un chico de unas mesas delante de el no quedaba viendo. Así que sólo frunció el ceño y saco su celular para mandarle mensaje a Jeongguk que ya había encontrado un lugar.