31- Dos Enamorados

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Varios días pasaron, matándo el tiempo en las vidas de Monkey D Luffy y Nico (T/N), quiénes se mostrában cada vez más el amor mutuo que se traían de diferentes maneras.

Cada vez pasaban más tiempo juntos, al igual que la peli-(c/c) ansiába por la llegada del bebé que su hermana estaba esperándo.

Esa misma tarde, la pareja estában juntos, comiéndo en una cafeteria.

--Luffy-- Llamó la menor, tratándo de captar la atención del nombrado, pero éste estaba muy concentrado en su helado, hasta que la chica le volvió a llamar. --, si tuviésemos un bebé, ¿cómo lo llamarías?

--¿Niña? ¿O niño?

--A ver, ¿cómo llamarías a nuestra hija?-- Aclaró la oji-(c/o), viendo la expresion del moreno.

--No sé. Yo... ¡Quiero una araña de seis patas cómo mascota!

--Por Dios, Luffy, déja de actuar cómo un niño.-- Le reclamó (T/N), carcajeándo divertida. --Ye hemos hablado de que no tendremos ninguna araña de seis patas cómo mascota. Ahora estamos hablando de cuando tengamos hijos.

--¿Tener hijos es obligatorio?-- Cuestionó el varón, alzándo una ceja.

--Doflamingo me enseñó que en el ciclo de la vida hay cuatro etapas. Nacer, crecer, reproducirse y morir. Significa que tener hijos no ea obligatorio, pero si quieres mantener tú sangre aún en el mundo, sería lo mejor.-- Explicó la de cabellos (c/c).

--Oh, bueno, entonces te dejaría a ti escoger el nombre. Ya sea niño o niña.-- Concluyó Luffy, avergonzado, pués no tenía ni idea de nada sobre eso.

--Vale, no pasa nada. Tengo varios nombres pensados. Muero por hacerme más grande para tener hijos, ahora tengo diecisiete años asi que no es muy... muy bueno que tenga hijos a ésta edad.-- Declaró la oji-(c/o), sonriéndo con tan sólo pensar en tener hijos.

--Parece que si quieres tener hijos de verdad.-- Comentó Luffy, también sonriente.

--¿Tú no quieres?

--No me veo siendo padre.-- Dijo sincero, sonriéndo incómodo. --Aunque por ti, no me molestaría ser papá.

(T/N) sonrió, comenzándo a imaginarse una vida junto a Luffy.

--Eres el mejor, en verdad... No sabes lo mucho que te amo.-- Balbuceó la de cabellos (c/c), pero el moreno logró escuchar perfectamente. --Luffy... ¿Cómo te puedo amar tanto?

--No sé, no tengo nada en especial.-- Dijo con sencillez.

Fué cuando esa hermosa sonrisa de oreja a oreja se formó en sus labios, mostrándo sus brillantes dientes, obligándose a cerrar sus ojos.

Esa sonrisa le había cautivado desde la primera vez que la vió.

Esa sonrisa la sonrojó.

Esa sonrisa le hizo sentir algo.

Esa sonrisa la enamoró perdidamente.

--Si que tienes. Muchas y muchas, pero diría que la que más me gústa, es tú sonrisa.-- Confundido, Luffy borró esa sonrisa. --Me encanta tú sonrisa, Luffy... Desde la primera vez que la vi, me enamoró.

--¿Mi sonrisa? Pero si yo... solamente es algo...

--Involuntario, lo sé, y es lo que la hace especial. Cualquier chica se enamoraría de tu hermosa sonrisa.

--Pero a mi no me importa enamorar a otras chicas, yo quiero enamorarte a ti, cada vez más y más, para que me ames, y para que me hagas muy feliz.

--Me tienes loca por ti, Luffy.-- Dijo sincera, aún con ese rubor tan bello en sus mejillas. --Y quiero ser la única a la que traigas de esa manera.

--Aunque si hubiesen más chicas, yo sólo vería a la estrella que me hace brillar.-- Añadió el moreno. --A quién me hace sentir grande, maravilloso, aofrtunado, cómo un rey, amaría a quién me hace feliz... A ti.

--Eres tan lindo.

--Y tú tan dulce.

--Eres hermoso.

--Y tú bella.

--Maravilloso.

--Preciosa.

--Eres mi mayor tesoro.

--Tú eres mi reina.

--Te amo, Monkey D Luffy, y nunca, nunca, nunca te dejaré de amar con toda mi alma.-- Prometió la chica, sonriéndo dulcemente, su sonrojo tampoco se ausentába, y el rostro del contrario estaba igual.

--Yo también te amo, Nico (T/N), y te amaré con todas tus perfecciónes e imperfecciónes... Con tus virtudes y defectos.-- Replicó el moreno, acercándose al asiento de la oji-(c/o), para rodear su cintura.

--Gracias por llegar a mi vida. Me haces sentir afortunada.-- Añadió la jóven, pegándo su frente junto a la del varón.

--Gracias a ti, por amarme, aunque me rompiste el corazón por un largo tiempo, lo volviste a construír.-- Bromeó el de sombrero de paja, carcajeándo levemente.

Ambos unieron sus labios en un tierno beso, dónde Luffy posó su mano en la nuca de la menor para profundizar su gesto.

Sus lenguas se encontráron en secreto, y se demostráron mutuamente su amor.

Las manos de ambos amantes recorrían inocentemente el cuerpo del contrario.

Era imposible no resistirse ante tanta dulzura que se traían los dos.

Se separáron, con la intención de recuperar al aliento, y después de varios segundos tratándo de respirar comodamente, volvieron a unir sus labios.

<< Nunca sentí algo igual anteriormente. ¿Es que acaso mi destino debía ser junto a ti, Monkey D Luffy? ¿Acaso yo debo estar contigo? Si ser feliz contigo es mi razón para existir, con mucho gusto te amaré y aceptaré tu amor. Eres todo para mi, y eso es poco. Eres mi vida, mi mundo, me siento tan bien... Se siente tan bien amarte de ésta manera. Te amo. >>

<< Tal vez soy un idiota, tal vez soy poco comparado a lo que tú eres. Aún asi, te amo, me haces feliz con tan sólo sonreír. Amarte es un placer, amarte es mi mayor adicción. Besarte es cómo comer carne, delicioso y mi pasatiempo favorito. Abrazarte y sentirte cerca de mi, es super genial. Te regalo lo imposible, lo inexplicable, lo infinito, porque te amo. >>

Los dos sonriéron.

Una sonrisa de idiota.

Una sonrisa de dos enamorados.

Una sonrisa que era el significado de una nueva vida.

Una vida junto el amor de su sueños.

Y ahora de su realidad.

--Te amo, Luffy.

--Te amo, (T/N).

Tal vez no todo sería perfecto.

Pero siempre habría una salida.

Una salida junto al contrario, que era lo relevante.

CONTINUARÁ...

Tan sólo falta el Epílogo y las curiosidades de ésta historia.

Mi Mayor Tesoro (Luffy x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora