Profecía De Un Omega (Pausada)

Capítulo 23:"Conexión"

(Capítulo largo)

— Tu irresponsabilidad me sorprende como no tienes idea. Le hiciste pasar un mal rato a tu omega, ¡Pudiste haber muerto! ¿Eres consciente de eso? No, claro que no, porque siempre haces lo que quieres cuando quieres. Tienes prohibido desde hoy salir sin guardias, tendrás uno en la puerta de tu casa y no hay discusión. 

Lukas apretó los labios viendo a Zacarías dar vueltas en la habitación de la enfermería, quería reírse de su tono susurrado molesto, pues Levi estaba a su lado en la cama profundamente dormido, pero en el fondo no se atrevía a contradecirlo, sabía que merecía el regaño.

— ¿Algo más? 

Voy a ponerle nombre a la vena en su frente, y cada vez que se enoje, la saludaré.

— ¡Si! Tengo mucho que decir 

Lukas miró el techo y sintió la suave respiración de su omega en el cuello, la cama era lo suficientemente grande como para que el omega se acurrucara a su lado con sus dedos sujetando su brazo con fuerza. Noah ya lo había revisado apenas despertó y le dijo todo lo que le había hecho a su cuerpo, y aunque no entendió la mayor parte, se sentía aliviado de estar bien. Quería volver a casa cuanto antes y descansar, sentía que por su cuerpo habían pasado una docena de caballos, le dolía incluso respirar. 

— Sabes lo que debes hacer con ese hombre ¿Verdad? 

Lukas cerró los ojos teniendo un pequeño momento con sus caóticos pensamientos y su moral.

— Lo sé. Será ejecutado.

— Que alguien te lastimara significa que te ven como una presa fácil, no tienes autoridad, no te respetan Lukas. Debes cambiar eso ahora ¿Como te sentirías si la siguiente persona en la mira es ese niño?

Lukas apretó la mandíbula hasta que se hizo daño. No, no. Había jurado que nadie ni nada le haría daño a Levi. Si protegerlo significaba endurecer su corazón, lo haría.

— Miralo — Zacarías señaló a Levi con un dedo acusador — está así porque no durmió en dos días cuidándote, Noah está igual y él tiene un cachorro que cuidar. Eres un alfa, eres tu quien debe cuidar de los demás, no alveres ¡Se va a desvanecer en el aire si no come! Piensa en la clase de cortejo que le estas dando 

— Lo entiendo, soy un asco de Alfa 

Zacarías ni siquiera lo dudo

— Sí 

— Cielos viejo, ya callate, eres la quinta persona que viene a cermoniarlo — Levi se despertó a su lado bostezando, se frotó el estómago con una mueca en los labios — muero de hambre 

Lukas miró a Zacarías con fingida inocencia.

— Tráele algo de comer 

— ¿Envías a tu consejero de moneda a hacer el trabajo de un sirviente? 

— Sí 

La conocida vena saltó en la frente del alfa canoso, le dio una mirada al rostro cansada del omega y pareciendo rendirse salió de la habitación hablando entre dientes. 

— Estaba preocupado — murmuró Levi contra su piel 

— ¿Llamas a eso preocupación? Sentí que iba a darme una nalgada.

— Sus manos temblaban. Lo vi. Solo es su forma de dejarlo salir.

Lukas frunció el ceño y trató de acomodarse mejor pero una punzada en su vientre lo hizo soltar un quejido. Levi gruñó bajito tomando las mantas para taparlo mejor. El alfa busco las vendas en su estómago y las acaricio por encima