Los infieles

Sus cuerpos se disfrutan pt. 1

Capítulo 10:

Jimin no se dio cuenta en qué momento entro su camioneta, solo se perdió en la imagen de Yoongi conduciendo, se distrajo observando el par de brazos fornidos que tenían las venas sobresaliendo, y como maniobraba el timón y la palanca de cambios. El mayor lejos de incomodarse, disfruto en tener toda la atención del pequeño Park en su figura, por momentos giraba un poco para notar como este se mordía el labio inferior y luego pasaba su lengua por el mismo lugar. De solo recordar la mamada que le dio Jimin en los asientos traseros, su polla reacciono dentro de su ropa interior.

Jimin le atribuía al alcohol en su organismo el haberse perdido en el tiempo por unos minutos, no supo en qué momento llegaron hasta lo que distinguía, era un edificio. En ese momento cayo en cuenta de haber dejado a Taehyung en el bar, tomo su teléfono y busco el nombre del chico en sus contactos, por suerte ambos intercambiaron números en la pizzería. Timbraba una y otra vez, pero el dueño no contestaba, corto e intento una vez más, obtuvo lo mismo y decidió dejar un mensaje en el buzón de voz.

Una vez ingresaron al estacionamiento, Yoongi ubico el auto al lado del suyo. Bajo algo rápido y antes de que Jimin baje por sí mismo, abrió la puerta de copiloto y le ofreció su mano, el menor esbozo una sonrisa por la acción y tomo la mano extendida. Cuando la puerta fue cerrada y el seguro colocado, Yoongi guio a Jimin hasta el ascensor sin soltar esa mano que encajaba perfectamente con la suya, pensaba que eran como dos piezas de un rompecabezas, se amoldaban la una con la otra de forma exacta.

Cuando ingresaron al ascensor Yoongi atrajo el delgado cuerpo de Jimin al suyo, este coloco sus palmas en los pectorales del contrario sorprendido por la acción y ladeo su cabeza exponiendo la piel de su cuello. Yoongi se acercó a dicha zona y paso su lengua desde el lóbulo de la oreja hasta el inicio del choker que adornaba la tersa piel del más bajito, sintió el cuerpo de Jimin estremecerse en sus brazos.

Fijo su vista en el hermoso rostro del menor, tenía los ojos cerrados y aprisionaba su labio inferior con los dientes, así que no perdió el tiempo y se acercó a su boca buscando el deseoso beso.

Sus labios se absorbían con ganas y las lenguas hicieron acto de presencia para saborearse, Yoongi succiono el apetitoso labio inferior y luego lo mordió, Jimin se quejó con un gemido nasal mientras entrelazaba sus manos en el cuello del pálido. Cuando el sonido de llegada del ascensor hizo eco, Yoongi tomo las piernas del menor haciendo que este tome impulso y se abrase con ellas a su cintura.

No planeaba despegarse de Jimin, por ello cargando el cuerpo del nombrado llego hasta la puerta de su departamento, lo apoyo en la pared un momento para poder cogerlo solo con un brazo, su otra mano fue hasta el bolsillo donde estaba la tarjeta de entrada, fue ahí cuando sintió la lengua de Jimin pasearse por su oreja y meterse en ella. Se apuro en pasar el plástico por el aparato y con los ojos a punto de cerrarse por el jodido placer de tener la lengua de Jimin chupando y mordiendo su lóbulo, digito la contraseña.

Cuando por fin ingresaron, el mayor se dirigió hasta su cuarto y encendió la luz como pudo, su miembro le pedía ser liberado de la tela del bóxer y el pantalón, coloco el cuerpo de Jimin sobre la cama y choco su erección con la de Jimin, ambos soltaron un suspiro pesado por la excitación.

- Me tienes durísimo ángel.

- Necesito verte sin ropa, vamos quítatela – Yoongi lo miro intensamente por la voz demandante que uso puesto que normalmente, él mandaba a la hora de tener sexo, aun así, accedió.

Se quito la prenda superior exponiendo su pecho y dorso, la piel lechosa contrastaba con la luz del lugar y Jimin paseaba su vista maravillado. Yoongi no era fisicoculturista, pero tampoco estaba delgado, sus pectorales eran planos pero definidos gracias al ejercicio que hacía últimamente. Por ello también sus brazos delgados quedaron en el pasado, ahora eran más gruesos. Cuando Yoongi puso sus manos al inicio de su pantalón, Jimin se arrodillo en la cama totalmente expectante.