t h r e e

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Al día siguiente, Seoho había llegado con los ánimos por el suelo. Su corazón se había marchitado al igual que una rosa, tan frágil.
Keonhee por el otro lado estaba preocupado por su amigo, había oído lo que pasó y se sintió bastante mal por el, estaba tratando de subirle los ánimos, se notaba a kilómetros que ya no era el mismo, ya no sonreía.
Geonhak también lo notó, sabía que era su culpa pero, no le importaba, o al menos eso aparentaba.
El lado malo, era que el rubio seguía enamorado de ese estupido, odiaba sus sentimientos, no soportaba más, Keonhee tenía razón, ¿no podía enamorarse de alguien más?

Pero Seoho estaba cansado de fingir que estaba bien.

Transcurrieron los días y Seoho cada vez estaba más cambiado, ya no era amable ni sonriente, no en público, solo con Keonhee seguía siendo el mismo, los demás ya no le importaban. Ocultó sus sentimientos por Geonhak en lo más profundo de su corazón, pero aún estaban ahí.
Cualquiera que lo viera pensaría que era alguien sin sentimientos, todos su colores se habían vuelto grises, era serio, no alegre, el brillo en sus ojos también había desaparecido.
Geonhak se sentía mal y culpable, claro que no lo admitiría, tenía un ego gigante.

Seoho quería una disculpa.

Y la iba a conseguir.

Geonhak iba a recibir el trato que merecía.

Y no era para nada bueno.

Seoho iba a reclamar su disculpa y no se iba a rendir hasta conseguirla.

Y así fue como empezó a tratar mal a Kim.
Se acercó a Kim con un tanto de enojo en sus ojos - Disculpate - Kim lo miró atónito y pestañeo y par de veces para luego reír.

- ¿Me hablas a mí? Que rarito, vete - Había quedado un poco sorprendido por la actitud de Lee, nunca pensó que le hablaría así.

Lee no se fue - Hazlo, ahora mismo - Dijo en un tono autoritario, superior.

- ¿Y por qué? ¿Por hacerte ver que el mundo no es color de rosas? - En ese momento Lee golpeó la mesa en la que estaba sentado Kim, este casi dio un salto, como sonó fuerte, logró captar la atención de todos.

- Kim

- Lee

- Disculpate

- Jamás

El rubio jamás pensó que haría tal cosa pero se abalanzó al pelinegro y empezó a golpearlo, Kim estaba inmóvil, ¿que estaba pasando? - ¡Me avergonzaste frente a todos, me rompiste el corazón, me dijiste cosas horribles! - Lo golpeaba mientras las lágrimas amenazaban con salir de sus ojos y todos los de la clase se agrupaban a ver la pelea - ¡Arruinaste mi estabilidad mental y emocional! - Kim solo podía escucharlo, dios, nunca pensó que el rubio tendría tanta fuerza, atractivo - Jamás te lo voy a perdonar y te odio - En ese momento llego Keonhee y tomo a su amigo para que no siguiera golpeándolo, ¿lo quería matar a caso?

Geonhak quedó inmóvil, o embobado, quién sabe.

𝐔𝐍𝐃𝐄𝐑 𝐓𝐇𝐀𝐓 𝐁𝐄𝐀𝐔𝐓𝐈𝐅𝐔𝐋 𝐒𝐌𝐈𝐋𝐄 ─ 𝐋𝐄𝐄𝐇𝐎 ꗃDonde viven las historias. Descúbrelo ahora